Asala: el Festival

Monasterio Tikse Gompa

En el día de la sagrada luna llena del mes de Asala (Ashadha en sánscrito), el Buddha ofreció Su primer sermón en Sarnath, cerca de Benarés, actualmente Varanasi. El Maestro del Dharma, dando una vuelta a la rueda de la Ley, enseñó la causa de todas las cosas así como los remedios para la cesación del sufrimiento. Ni que decir tiene que Gautama ya había conseguido la iluminación búddhica,

En el referido sermón, el Buddha hizo hincapié en el peligro de vivir según los extremos de la gratificación o de la mortificación y expresó cómo el Camino de en Medio le aparta a uno del sufrimiento y le lleva al Nirvana. Es posible que si la humanidad hubiera seguido Sus enseñanzas, el mundo habría acometido una revolución radical, pues habría dejado de lado el odio, la avaricia y la ilusión, y la humanidad habría progresado espiritualmente en una atmósfera de paz.

El Buddhismo es un sistema de filosofía y metafísica, que actualmente es considerado una religión, que se deriva de las enseñanzas impartidas por Gautama el Buddha y que, como se sabe, se inició en la India unos 500 años antes de la era cristiana, es decir, del nacimiento de Jesús el Cristo o Crestos.

El canon buddhista fue establecido en la época del emperador Asoka (una encarnación anterior de H.S. Olcott) quien murió en el año 225 antes de la era cristiana y que adoptó el buddhismo como la religión de su reino. La filosofía buddhista propiamente dicha, forma parte de uno de los sistemas Nastika de la filosofía hindú. En la actualidad el buddhismo comprende dos grandes divisiones; la Mahâyâna o gran vehículo (sendero) establecida en el norte de la India, y la Hinayâma o pequeño vehículo en el sur, básicamente en Sri Lanka, antigua Ceilán. Parece ser que, al menos, hasta el siglo XlX existía una parte del Mahâyâna, llamada del hábito amarillo, que era totalmente esotérica y a la cual, se dice, perteneció H.P.B. Que esos monjes de hábito amarillo formaran realmente un cuerpo establecido o no y que llevaran hábito, es algo que no se puede afirmar categóricamente, pero de lo que no hay duda es de que el buddhismo, incluso hoy en día, tiene una parte esotérica u oculta que, por su propia naturaleza es poco o nada conocida.

Gautama el Buddha observó y enseñó que la causa de todas las miserias y problemas humanas era Avidya, la ignorancia, y que para hacer desaparecer esos pesares la solución radicaba en hacerse sabio, que, en realidad, es lo que de forma lenta y progresiva todos hacemos en el curso de nuestras numerosas encarnaciones.

Para ayudar a disipar la ignorancia y nuestros sufrimientos, el Buddha recomendó conocer «las Cuatro Nobles Verdades» que son:

1. El sufrimiento.
2. El origen del sufrimiento.
3. La eliminación del sufrimiento.
4. El camino para la eliminación del sufrimiento, Noble Octuple Sendero.

Para la cesación del sufrimiento y para la consecución del Nirvana, que es la meta de todo buddhista, el Buddha enseñó el Noble Octuple Sendero, que es la médula de la ética del buddhismo y que estableció, como sigue, en ocho etapas:

1. Recta compresión
2. Recta aspiración.
3. Recta palabra
4. Recta conducta
5. Recto vivir
6. Recto esfuerzo
7. Recto pensamiento
8. Recta meditación.

En definitiva, las enseñanzas de Gautama el Buddha, se centraban cuando fueron expuestas, y se centran ahora, en la renuncia a los deseos, que es lo único que nos lleva a la liberación.

Tanto la redacción de Las Cuatro Nobles Verdades como la del Noble Óctuple Sendero pueden variar según se trate de qué traducción, pero siempre nos muestran las mismas verdades en el fondo.

Las enseñanzas buddhistas, como todas las que tienen una base verdaderamente esotérica, nos muestran el camino a seguir, educiendo cualidades, para facilitar nuestro desarrollo interno. Pero como no se trata de exponer un tratado acerca de las enseñanzas buddhistas, sino de celebrar el día en el que Gautama ofreció Su primer sermón, es lógico pues, centrarse en esta celebración, y para ello será importante recitar la oración Namo Tassa y dar lugar a que se produzcan opiniones y comentarios sobre el sentido esotérico de lo que esta celebración representa.

El Festival de Asala como el de la luna llena de Wesak o Weisaka, tiene dos formas de celebración. Una, la más importante, es poder asistir al lugar y a la hora exacta en el que se produce en cuerpo mental, en el caso del Festival de Asala. Y en esto, quizá, radica el mayor problema para muchos al no dominar convenientemente dicho cuerpo. El lugar en el que se produce el evento es el jardín de la casa del Sr. Maitreya cerca de un gran y antiguo árbol próximo a la entrada de la casa que tiene a su alrededor un banco de mármol que está rodeado de un trono tallado para que puedan tomar asiento los miembros de la Gran Fraternidad Blanca.. Otra forma de celebración es la puramente exotérica mediante reuniones en el plano físico sin que en este caso importe mucho la hora de la celebración.

Por ser el Buddha el ser humano que se ha elevado a las más altas cotas espirituales, el primer ser humano que ha llegado al buddhado, esta es la celebración del espíritu de la humanidad que aspira a elevarse hacia la Deidad. Es una celebración de profunda invocación que expresa la honda aspiración hacia la fraternidad.

Una vez celebrado el Festival de Asala, dos pensamientos deberían ocupar nuestra atención constante: las necesidades de nuestros semejantes y la precisión de proveer un canal grupal por el que puedan fluir las fuerzas espirituales

Ojalá que nuestro desarrollo interno nos capacite para asistir el próximo año en cuerpo mental al lugar y a la hora exacta de la luna llena de Asala.