M.- Trigésimo tercera letra de los alfabetos hebreo e inglés, vigésimo cuarta del arábigo [y trigésimo novena del sánscrito]. Como número romano, esta letra representa 1000, y con un trazo horizontal en la parte superior, significa un millón. En el alfabeto hebreo, Mem [nombre de la letra M] simboliza el agua, y como número, equivale a 40. El Ma [nombre de la M] sánscrito es equivalente al número 5, y se halla igualmente relacionado con el agua por medio del signo zodiacal denominado Makara. (Véase esta palabra). Además, en las numeraciones hebrea y latina, la M expresa “un número definido en lugar de una cantidad indefinida” (Mackenzie, Mason, Cyclop.), y “el nombre sagrado hebreo de Dios adaptado a esta letra es Meborach, Benedictus”. Entre los esoteristas, la M es el símbolo del Ego superior, Manas, la Mente.
Ma, Mut (Egipcio).- La diosa del mundo inferior, otra forma de Isis, puesto que es la Naturaleza, la Madre Eterna. Era soberana y regente del viento Norte, precursora de la inundación del Nilo, y así se la llamaba “abridora de las ventanas nasales de los vivientes”. Estaba representada ofreciendo el ankh (o cruz), emblema de la vida física para sus adoradores, y era llamada “Señora del Cielo”.
* Ma (Sánscrito).- Agua, buena fortuna; tiempo, estación, la luna, la cuarta nota de la gama musical; verso o fórmula mágica; veneno.
Mâ (Sánscrito).- Sobrenombre de Lakchmî. [También significa: medida; muerte; luz; conocimiento; uno de los cinco metros inferiores al gâyatri; mâ es, además, adverbio de negación y equivale a no.]
* Maat (Egipcio).- Equivalente al Némesis de los griegos, al Fatum de los latinos, y en cierto modo al Karma indo.
Macrocosmo (Griego).- Literalmente, el “Gran Universo” o Kosmos. [Es el Universo, el gran mundo, incluyendo todas las cosas visibles e invisibles. (F. Hartmann). –El Universo en contraposición al hombre (microcosmo, o pequeño universo). Tanto el macrocosmo como el microcosmo tienen una constitución septenaria.]
Macroprosopo (Macroprosopus) (Griego).- Término cabalístico, formado de una palabra griega compuesta, que significa: “Vasta o grande Faz”. (Véase: Faces cabalísticas); un título de Kether, la Corona, el Sephira más elevado. Es el nombre del Universo, llamado Arikh-Anpin, la totalidad de aquello de lo cual el Microprosopo, o Zauir-Anpin, “la Faz menor, es la parte y antítesis. En su sentido metafísico más elevado y abstracto, Microprosopo es Adam Kadmon, el vehículo de Ain-Suph, y la corona del Arbol Sephirotal, si bien desde que Sephira y Adam Kadmon son en realidad uno bajo dos aspectos, resulta lo mismo. Muchas son las interpretaciones que se han dado sobre este punto, pero difieren unas de otras. [En la Cábala caldea, Macroprosopo es una pura abstracción, el Logos o la Palabra; Palabra que si bien en realidad viene a ser un número plural (o Palabras), cuando se refleja a sí misma, o desciende hasta adquirir el aspecto de una Hueste de Angeles, o Sephiroth –el “Número”-, es, sin embargo, colectivamente Uno, y en el plano ideal un cero, “No-cosa”, Ain, el que existe negativamente. (Doctr. Secr., I, 374; II, 662, etc. –Véase: Cara o Faz Superior y Tetragrammaton.]
Machagistia.- Magia, tal como en otro tiempo se enseñaba en Persia y Caldea, y elevada en sus prácticas ocultas a la categoría de magismo-religión. Platón, al hablar de Machagistia o Magismo, hace notar que es la más pura forma del culto de las cosas divinas.
* Mach-chitta (Mat-chitta) (Sánscrito).- Que piensa en mí; que tiene el pensamiento fijo en mí. (Bhagavad-Gîtâ).
* Mada (Sánscrito).- Orgullo, soberbia; uno de los pecados capitales o “enemigos internos”, que ha de vencer aquel que desea la liberación. Mada significa también embriaguez, incontinencia, desenfreno, pasión, delirio, frenesí, locura, temeridad, lascivia, lujuria.
* Madâzraya (Sánscrito).- Que recurre a mí, que busca en mí su refugio. (Bhagavad-Gîtâ).
* Madbhakta (Sánscrito).- Adorador o devoto mío; devoto a mí.
* Madbhakti (Sánscrito).- La devoción a mí.
* Madbhâva (Sánscrito).- Mi ser, naturaleza o condición; que es o participa de mi ser, esencia o naturaleza.
* Madgata (Sánscrito).- Que ha venido a mí; que está en mí; dirigido a mí.
* Madgata-prâna (Sánscrito).- Que tiene puesta su vida en mí; cuya vida está concentrada o consagrada a mí; que me ofrece su vida.
Madhasûdana.- Véase: Madhu-sûdana.
Mâdhava (Sánscrito).- 1) Epíteto de Vichnú o Krichna. 2) El mes de abril. [Literalmente, “Señor o matador de Madhu”.]
Mâdhavî (Sánscrito).- Sobrenombre de Lakchmí.
* Madhu (Sánscrito).- Literalmente, “dulce”. Nombre de un daitya, gigante o demonio a quien dio muerte Krichna. La primavera, el mes de chaitra (marzo-abril); leche, miel, azúcar.
* Madhujit (Sánscrito).- “Vencedor de Madhu”. Epíteto de Krichna o Vichnú.
* Madhumat (Sánscrito).- Dulce.
* Madhuparka (Sánscrito).- Ofrenda hospitalaria confeccionada con miel, leche cuajada y fruta.
* Madhupratikâ (Sánscrito).- Con este nombre se designan ciertos poderes (siddhis) ocultos que describe Patañjali en los aforismos 44 a 48 del libro tercero.
* Madhupurî (Sánscrito).- “La ciudad de Madhu”: Mathurâ.
* Madhusakka (Sánscrito).- Literalmente, “amigo de la primavera”: Epíteto de Kâma, dios del amor.
Madhu-sûdana (Sánscrito).- “Matador de Madhu”. Sobrenombre de Krichna, debido al hecho de haber dado muerte a dicho demonio.
Madhya (Sánscrito).- Diez mil billones. [Medio, centro, intervalo; situado en el medio o centro.]
* Madhyadeza (Sánscrito).- País central. Región situada entre los montes Himalaya y Vindhya, al E. de Vinasama y al O. de Prayâga. (Leyes de Manú).
* Madhyaga (Sánscrito).- Que va al centro; centrípeto.
Madhyama (Sánscrito).- Este término aplica a alguna cosa sin principio ni fin. Así, de Vâch (Sonido, el Logos femenino, o sea la contraparte femenina de Brahmâ) dícese que existe en varios estados, uno de los cuales es el de Madhyama [o Mâdhyama], lo cual equivale a decir que Vâch es eterno en un sentido: “el Verbo (Vâch) era con Dios, y en Dios”, porque ambos son uno. [En el sistema vedantino, Madhyama es el tercer aspecto de Vâch.]
* Madhyama-loka (Sánscrito).- El mundo intermedio: la tierra.
Mâdhyamikas (Sánscrito).- Una secta mencionada en el Vichnu-Purâna. Segun los orientalistas es una secta búdica, lo cual es un anacronismo. Probablemente era al principio una secta de indos ateos. En la China y el Tibet tuvo su origen una escuela posterior designada con este nombre, la cual enseñaba un sistema de nihilismo sofístico, que reduce cada proposición a una tesis y antítesis, y luego niega la una y la otra. Adopta algunos principios de Nâgârjuna, que fue uno de los fundadores de los sistemas esotéricos Mahâyâna, no sus parodias exotéricas. La alegoría concerniente al Paramârtha de Nâgârjuna como un don de los Nâgas (Serpientes) prueba que él recibió sus enseñanzas de la escuela secreta de Adeptos, y que, por lo tanto, las verdaderas doctrinas se guardan secretas.
* Mâdhyandina (Sánscrito).- Una escuela védica que es una subdivisión de la escuela Vâjasaneyî, relacionada con el Zatapatha Brâhmana.
* Madhya-stha (Sánscrito).- “Que está en el medio”; neutral, imparcial, indiferente.
* Madre del Mundo.- Otro nombre del Kundalinî-zakti. “Deja que el ígneo Poder [Kundalini-zakti] se retire al recinto más interno, la cámara del corazón y morada de la Madre del Mundo”. (Voz del Silencio, I).
* Mâdri (Sánscrito).- Hermana del rey de los madras y segunda esposa de Pându. Fue madre de los dos últimos príncipes pândavas, los gemelos Nakula y Sahadeva, místicamente engendrados por los gemelos Azvins, Nâsatya y Dasra, respectivamente.
* Madyajin (Sánscrito).- Que me adora, venera o rinde culto. (Bhagavad-gîtâ).
* Madyoga (Sánscrito).- La devoción a mí. (Idem).
* Maestro.- Traducción de la voz sánscrita Guru, “Instructor espiritual”, adoptada por los teósofos para designar a los Adeptos, de quienes han recibido sus enseñanzas. (Glosario de la Clave de la Teosofía). –Los Maestros son ciertos grandes Seres, pertenecientes a nuestra raza, que han completado su evolución humana y constituyen la Fraternidad de la Logia Blanca, cuyo objeto es activar y dirigir el desenvolvimiento de la raza. Estos grandes Seres se encarnan voluntariamente en cuerpos humanos a fin de formar lazo de unión entre la humanidad y los seres sobrehumanos, y permiten que aquellos que reúnen determinadas condiciones de virtud, pureza, devoción y trabajo desinteresado en bien de la especie humana, lleguen a ser discípulos suyos, con el objeto de acelerar su evolución y disponerse para ingresar en la gran Fraternidad, cooperando en la gloriosa y benéfica labor en provecho del hombre. (A. Besant, Sabid. Antig., 388-9). –Véase: Mahâtmâ.
Magadha (Sánscrito).- Un antiguo país de la India, que se hallaba bajo el dominio de reyes budistas.
* Mâgadha (Sánscrito).- En las Leyes de Manú se designa con esta denominación al hombre nacido de un vaizya y una kchatriya. Mâgadhas es también el nombre de los habitantes de Magadha, el país de Behar meridional, en donde se hablaba la lengua pâli.
Magas (Sánscrito).- Sacerdotes del Sol [Sûrya] mencionados en el Vichnú Purâna. Son los Magos posteriores de la Caldea y del Irán, los antecesores de los modernos parsis.
* Magha (Sánscrito).- Felicidad, don, recompensa. Nombre de uno de los grandes dvîpas o continentes.
* Mâgha (Sánscrito).- El décimo asterismo o mansión lunar.
* Maghâ (Sánscrito).- El mes indo equivalente a nuestro enero-febrero.
* Maghavat o Maghavân (Sánscrito).- Epíteto de Indra. Como adjetivo: instituto o patrón de un sacrificio; liberal, generoso.
* Magdhim (Caldeo).- Término equivalente a “alta sabiduría” o filosofía sagrada, y del cual deriva la voz magismo y magia.
Magia.- La gran “Ciencia”. Segun Deveria y otros orientalistas, “las naciones más antiguas, más cultas e ilustradas consideraban la Magia como una ciencia sagrada inseparable de la religión”. Los egipcios, por ejemplo, constituían uno de los pueblos más sinceramente religiosos, como lo eran y son aun hoy día los indos. “La Magia consiste en el culto de los dioses, y se adquiere mediante este culto”, dice Platón. ¿Cómo, pues, una nación que, gracias al irrecusable testimonio de inscripciones y papiros, está probado que había creído firmemente en la Magia durante millares de años, podía haber sido inducida en error por espacio de tanto tiempo? ¿Es probable que generaciones tras generaciones de una jerarquía ilustrada y piadosa, muchas de las cuales llevaron una vida de propio martirio, santidad y ascetismo, pudiesen haber continuado engañándose a sí mismas y engañando al pueblo (o siquiera a este último tan sólo), por el gusto de perpetuar la creencia en los “milagros?” Dícese que los fanáticos son capaces de cualquier cosa para inculcar la creencia en su dios o en sus ídolos. Pero a esto contestaremos que en tal caso los brahmanes y los rekhget-amens o hierofantes egipcios no hubieran popularizado la creencia en el poder del hombre mediante las prácticas mágicas, para disponer de los servicios de los dioses; dioses en realidad no son otra cosa que las potencias ocultas de la Naturaleza, personificadas por los mismos sacerdotes instruídos, en las cuales ellos veneraban tan sólo atributos del Principio Uno desconocido y sin nombre. Como expresa muy atinadamente Proclo el platónico: “Cuando los antiguos sacerdotes consideraron que existía cierta alianza y simpatía mutua entre las cosas naturales y entre las cosas manifiestas y los poderes ocultos, y descubrieron que todas las cosas subsisten en todo, fundaron de esta mutua simpatía y similitud una ciencia sagrada… y aplicaron para fines ocultos tanto la naturaleza celestial como la terrestre, gracias a las cuales y por efecto de cierta similitud, dedujeron la existencia de virtudes divinas en esta mansión inferior”. La Magia es la ciencia de comunicarse con Potencias supremas y supramundanas y dirigirlas, así como de ejercer imperio sobre las de las esferas inferiores; es un conocimiento práctico de los misterios ocultos de la Naturaleza, conocidos únicamente de unos pocos, por razón de ser tan difíciles de aprender sin incurrir en pecados contra la Naturaleza. Los místicos antiguos y los de la Edad media dividían la Magia en tres clases: Teurgia, Goecia y Magia natural. “Desde hace mucho tiempo, la Teurgia ha sido apropiada como la esfera particular de los teósofos y metafísicos”, dice Kenneth Mackenzie. La Goecia o magia negra, y la Magia natural (o blanca) se ha elevado saludable con sus alas a la encumbrada posición de un estudio exacto y progresivo”. Los comentarios añadidos por nuestro llorado y sabio hermano son dignos de atención. “Los deseos materiales, realistas de los tiempos modernos han contribuído a desacreditar la Magia y ponerla en ridículo. La fe (en uno mismo) es un elemento esencial en la Magia, y existía mucho tiempo antes que otras ideas que presumen su preexistencia. Se ha dicho que se requiere un sabio para hacer un loco, y las ideas de un hombre deben ser exaltadas casi hasta la locura, esto es, las aptitudes de su cerebro han de acrecentarse hasta un nivel mucho más alto que el bajo y miserable estado de la civilización moderna, antes de que pueda él convertirse en un verdadero mago; porque el ir en busca de esta ciencia implica cierto grado de aislamiento y abnegación. Un aislamiento muy grande, por cierto, cuya realización constituye por sí sola un fenómeno maravilloso, un milagro. Por otra parte, la Magia no es ninguna cosa sobrenatural. Segun expone Jámblico, «ellos, por medio de la teurgia sacerdotal, declaran que pueden remontarse a Esencias más elevadas y universales y hasta aquellas que están por encima del destino, esto es, hasta Dios y el Demiurgo, sin hacer uso de la materia ni asumir otra cosa alguna, excepto la observación de un tiempo razonable». Ya empiezan algunos a reconocer la existencia de poderes e influencias sutiles en la Naturaleza, de los cuales hasta ahora nada sabían. Pero, como hace justamente notar el doctor Carter Blake, «el siglo décimonono no es el que ha observado la génesis de los nuevos métodos de pensamiento ni la consumación de los antiguos»; a lo cual añade Mr. Bonwich que «si los antiguos sabían muy poco de nuestro modo de investigación en los secretos de la Naturaleza, nosotros sabemos menos aun del que ellos empleaban». -[Magia: Sabiduría; la ciencia y arte de utilizar conscientemente poderes invisibles (espirituales) para producir efectos visibles. La voluntad, el amor y la imaginación son poderes mágicos que todos poseen, y aquel que sabe la manera de desarrollarlos y servirse de ellos de un modo consciente y eficaz, es un mago. El que los emplea para fines buenos, practica la magia blanca; el que los usa para fines egoístas o malos, es un mago negro. Paracelso emplea la palabra Magia para designar el más elevado poder del espíritu humano para gobernar todas las influencias exteriores con el objeto de hacer bien. La acción de servirse de poderes invisibles para fines reprobables, la denomina él necromancia, porque los elementarios de los muertos son frecuentemente utilizados como medio para trasmitir malas influencias. La hechicería no es Magia; se halla con ésta en la misma relación que las tinieblas con la luz. La hechicería trata de las fuerzas del alma animal; la Magia trata del poder supremo del Espíritu. (F. Hartmann).]
Magia blanca o «benéfica«.- La Magia así llamada es la Magia divina, libre de egoísmo, de anhelo de poder, de ambición, de lucro, y que tiende únicamente a hacer bien al mundo en general y al prójimo en particular. El más leve intento encaminado a utilizar los propios poderes anormales para la satisfacción personal hace de dichos poderes hechicería o magia negra.
* Magia ceremonial.- La Magia, segun los ritos cabalísticos, obraba, como afirmaban los rosacruces y otros místicos, invocando Poderes espiritualmente más elevados que el hombre, y ejerciendo imperio sobre los elementales que son muy inferiores a él en la escala de la existencia. (Glosario de la Clave de la Teosofía).
Magia negra (Ocultismo).- Hechicería; necromancia, o evocación de los muertos, y otros abusos egoístas o interesados de poderes anormales. Este abuso puede ser hecho sin intención; pero así y todo, siempre es «magia negra«, cuando y dondequiera se produzca fenomenalmente algo por el mero objeto de una satisfacción personal. -Véase: Magia.
Mágico.- Véase: Mago.
* Magismo.- La filosofía o doctrina de los antiguos sacerdotes (magos) persas.
* Magisterio (Magisterium, latín).- La virtud curativa de las substancias medicinales, conservada en un vehículo. (F. Hartmann).
Mago o Mágico.- De Mag o Maha. Esta palabra es la raíz de la cual deriva el término «mágico». El Maha-âtmâ (Grande Alma o Espíritu) de la India tenía sus sacerdotes en los tiempos anteriores a los Vedas. Los magos eran sacerdotes del dios del fuego; los encontramos entre los asirios y los babilonios, lo mismo que entre los persas adoradores del fuego. Los tres Magos, denominados también Reyes, de quienes se dice que hicieron presentes de oro, incienso y mirra al infante Jesús, eran adoradores del fuego, como los demás, y astrólogos, puesto que vieron la estrella del recién nacido. El sumo sacerdote de los parsis, en Surat, es designado con el nombre de Mobed. Otros hacen derivar dicho nombre de Megh; Meh-ab significa alguna cosa grande y noble. Los discípulos de Zoroastro eran llamados meghestom, segun dice Kleuker.
El término Mago o Mágico, en otro tiempo un título honorífico y de distinción, ha decaído por completo de su verdadero significado. Siendo antiguamente sinónimo de todo cuanto era honorable y digno de respeto, del que estaba en posesión de la ciencia y sabiduría, ha degenerado en un epíteto para designar un impostor, farsante y juglar; un charlatán, en una palabra, o uno que «ha vendido su alma al diablo», que hace mal uso de su saber y lo emplea para fines reprobables y peligrosos, segun las enseñanzas del clero y una masa de necios supersticiosos que creen que el mago es un brujo y un «encantador». Dicha palabra deriva de Magh, Mah, en sánscrito Maha (grande), y significa un hombre muy versado en la ciencia esotérica. Pero los cristianos, segun parece, olvidan que Moisés era también un mago, y Daniel, «Príncipe de los magos, astrólogos, caldeos y adivinos». (Daniel, V, 11). -(Isis sin velo, I, XXXIV).
Magna Mater (Latín).- «Gran Madre». Título que en antiguos tiempos se daba a todas las principales diosas de las naciones, tales como Diana de Efeso, Isis, Mauth y muchas otras.
Magnes.- Expresión empleada por Paracelso y los teósofos medievales. Es el espíritu de la luz, o Âkâza. Era un término muy usado por los alquimistas de la Edad Media. [Algunas veces se ha dado el nombre de Magnes al Caos. (Doctr. Secr., I, 367). -Véase: Luz Astral.]
Magnética, Masonería.- Véase: Masonería magnética.
Magnetismo.- Una fuerza que existe en la Naturaleza y en el hombre. En el primer caso, es un agente que da origen a los diversos fenómenos de atracción, de polaridad, de etc. En el segundo caso, se convierte en magnetismo «animal», en contraposición al magnetismo cósmico y terrestre. [El magnetismo, lo mismo que la electricidad, no son más que manifestaciones del Kundalinî zakti, el cual incluye las dos grandes fuerzas de atracción y repulsión.]
Magnetismo animal.- En tanto que la ciencia oficial lo califica de «supuesto» agente y rechaza por completo su realidad, los numerosos millones de personas de los tiempos antiguos y las naciones asiáticas que viven actualmente, ocultistas, teósofos, espiritistas y místicos de toda especie lo proclaman como un hecho bien probado. El magnetismo animal es un fluído, una emanación. Algunas personas lo emites para fines curativos por los ojos y por las puntas de los dedos, mientras que todas las demás criaturas, hombres, animales y aun todo objeto inanimado, lo emana, ya sea como un aura, o ya como una luz variable, sea de un modo consciente o no. Cuando se hace obrar sobre un paciente por contacto o por la voluntad de un operador humano, recibe el nombre de «Mesmerismo». (Véase esta palabra).
* Magnetismo cósmico.- La fuerza universal de atracción y repulsión, conocida ya desde los tiempos de Empédocles y perfectamente descrita por Kepler. Los llamados «siete hijos-hermanos» de Fohat representan y personifican las siete formas de magnetismo cósmico, denominadas en Ocultismo práctico los «Siete Radicales», cuya generación cooperativa y activa son, entre otras energías, la electricidad, el magnetismo, el sonido, la luz, el calor, la cohesión, etc. (Doctr. Secr., I, 169, 540).
Magnum Opus (Latín).- En alquimia, es la consumación final, la «Grande Obra» (Grand’ Œuvre); la producción de la «Piedra filosofal» y del «Elixir de Vida», que si bien es considerado como un mito por algunos escépticos, está lleno de significación mística y debe admitirse simbólicamente.
* Magnus Limbus o Yliaster de Paracelso.- Es el «Padre-Madre» dentro del Espacio, antes de aparecer en él; es la matriz universal del Kosmos, personificada en el carácter dual del Macrocosmo y Microcosmo, o sea el universo y nuestro globo (Los cabalistas de la Edad media aplicaban al hombre la palabra Microcosmo; pero la filosofía antigua llamaba a la Tierra el microcosmo del Macrocosmo, y al hombre el producto entre ambos.), por Aditi-Prakriti, la Naturaleza espiritual y física. Segun la explicación de Paracelso, «el Limbus magnus es el semillero del cual se han desarrollado todas las criaturas, de igual modo que un árbol se desarrolla de una pequeña semilla; con la diferencia, sin embargo, de que el gran Limbus recibe su origen del Verbo de Dios, mientras que el Limbus menor (la semilla o esperma terrestre) lo recibe de la tierra. El gran Limbus es el germen del cual han procedido todos los seres, y el pequeño Limbus es cada ser primario (ultimate) que reproduce su forma y que a su vez ha sido producido por el grande. El Limbus pequeño tiene todas las cualidades del grande, de igual modo que un hijo posee una organización similar a la de su padre». (Doctr. Secr., I, 364).
Magos (Magi, en latín).- Nombre de los antiguos sacerdotes hereditarios y adeptos instruídos de la Persia y de la Media; palabra que deriva de Maha, grande, que más tarde se transformó en mog o magh, que en pelvi significa sacerdote. Porfirio los describe (Abst., IV, 16) diciendo: «Los hombres instruídos que entre los persas están dedicados al servicio de la Divinidad son llamados Magos», y Suidas nos informa que «entre los persas, los amantes de la sabiduría (philalethai) son conocidos con el nombre de Magos». El Zend-Avesta (II, 171, 261) los divide en tres grados: 1) Los Herbeds o «novicios»; 2) Mobeds o «maestros», y 3) Destur Mobeds, o «maestros perfectos». Los caldeos tenían unos colegios parecidos, como también los egipcios, cuyos hierofantes de los Misterios, tales como se practicaban en Grecia y Egipto, eran idénticos a los Destur Mobeds.
Magus (Latín).- En el Nuevo Testamento significa sabio, un hombre sabio de los caldeos. En inglés se usa con frecuencia para designar un mago, un hacedor de prodigios cualquiera. En la Sociedad Rosacruz es el título de los miembros más elevado de grado IX; el Magus supremo es el Jefe de la Orden en la sección «externa». Los magos de la «interna» son desconocidos, excepto de aquellos que pertenecen al grado VIII. (W.W.W.).
* Mah (Cábala).- Nombre secreto cabalístico aplicado a la idea de Formación. (Doctr. Secr., III, 207).
* Maha (Sánscrito).- Grande, poderoso, rico, abundante.
* Mahâ (Sánscrito).- Al principio de una palabra compuesta tiene el mismo significado que mahat o mahant. Así, Mahâdeva (mahâdeva) significa «gran Dios».
* Mahâbâhu (Sánscrito).- Literalmente: «de grande o poderoso brazo». -Calificativo honorífico aplicado a los príncipes arios, así como a los dioses y héroes en general.
Mahâbhârata (Sánscrito).- Literalmente: «la Gran Guerra», famoso poema épico de la India (probablemente el más extenso poema del mundo), que incluye un bosquejo del Râmâyana y el Bhagavad-Gîtâ, «Canto celeste» [así como varios otros interesantes episodios, tales como la historia de Nala y la leyenda de Zakuntalâ, que sirvió de base para el tan celebrado drama de este nombre]. No hay dos orientalistas que estén de acuerdo acerca de la fecha de su composición, pero sin duda alguna es sumamente antiguo.
[El Mahâbhârata, o la «Gran (guerra de los) Bhâratas», contiene 220.000 versos, divididos en 18 libros (parvas), y fue compuesto, segun se cree, por Krichna Dvaipâyana, llamado el Vyâsa («ordenador» o «compilador»). El asunto de la obra son los hechos que ocurrieron en las postrimerías del Dvâpara-yuga (edad que precedió a la nuestra, o sea unos 5.000 años atrás), entre dos ramas rivales descendientes del rey Bharata, que hicieron armas entre ellas para lograr la soberanía de Hastinâpura. La más antigua de dichas ramas conservaba el nombre de uno de sus antepasados, el rey Kurú, mientras que la más joven era designada con el nombre de pândava, nombre derivado de Pându, padre putativo de los cinco principales jefes de la misma. En lejana época reinaba en Hastinâpura un rey de la dinastía lunar apellidado Vichitravîrya. Este rey era hijo de Zantanu y Satyavatí; Bhîchma y Krichna Dvaipâyana, llamado el Vyâsa, eran hermanastros suyos, siéndolo el primero por parte de padre y el último por parte de madre. Casó con dos hermanas, Ambikâ y Ambâlikâ, pero habiendo muerto sin dejar sucesión, el gran richi llamado el Vyâsa, obedeciendo a las instigaciones de Bhîchma, se casó con las dos viudas y engendró dos hijos, Dhritarâchtra y Pându, que pasaron por ser hijos del rey Vichitravîrya, y después de la muerte de Vyâsa fueron educados por su tío Bhîchma, quien, durante la minoridad de ellos, tuvo a su cargo el gobierno del reino. Dhritarâchtra, el primogénito, se casó con Gândhârî, de la cual tuvo cien hijos, que fueron los príncipes Kurús o Kuravas, el mayor de los cuales se llamaba Duryodhana. Pându, el menor de ambos hermanos, tomó primero por esposa a Prithâ (o Kûnti, por otro nombre) y más tarde a Mâdrî, de las cuales nacieron los cinco príncipes pândavas, que a pesar de su nombre patronímico, fueron engendrados místicamente por varias divinidades. Dhritarâchtra, por ser ciego de nacimiento, tuvo que renunciar a la corona en favor de su hermano Pându, designado para sucederle en el trono a Yudhichthira, primogéntio de los pândavas. Estos cinco príncipes, por su vasta instrucción y sus brillantes hechos de armas, excitaron el celo y la envidia de su primo Duryodhana, quien, después de haber intentado deshacerse de ellos por medios criminales, concertóse con su tío Zakuni, habilísimo jugador, para arruinar a sus rivales. Invitado a jugar, perdió Yudhichthira todo cuanto le pertenecía, su reino y su misma esposa Draupadî, que una vez separada de su consorte fue tratada ignominiosamente como esclava. A tenor de lo estipulado, Duryodhana debía ocupar el trono por espacio de doce años, mientras que los cinco príncipes pândavas, acompañados de su esposa común, Draupadî, estaban condenados al destierro sufriendo toda clase de privaciones. Una vez expirado el plazo y transcurrido además otro año que los infelices pândavas pasaron de incógnito en el reino de Matsya, Yudhichthira, alegando incuestionables derechos, reclamó la corona, pero el pérfido de Duryodhana se a opuso tan legítimas pretensiones. En vista de ello, los pândavas resolvieron conquistar su reino por medio de la fuerza, y a tal fin reunieron en torno a sus aliados y amigos, formando así un poderoso ejército para atacar a sus rivales, quienes se apresuraron igualmente a reunir todas sus fuerzas. Pusiéronse en marcha las dos huestes enemigas, encontrándose en Kurukchetra, o sagrada llanura de Kurú. El valeroso y experto Bhîma, segundo hijo de Pându, tomó el mando del ejército pândava, mientras que Bhîchma figuraba a la cabeza del ejército contrario. De un momento a otro iba a estallar el combate; sonaban con estruendo atronador atabales, trompetas, caracolas y otros instrumentos guerreros; los combatientes, llenos de impaciencia y formados en orden de batalla, tenían armados ya sus arcos, prontos a sembrar la muerte. En tan críticos instantes, Arjuna, tercero de los príncipes pândavas, presa de dolor y sufrimiento al ver a sus parientes y amigos que militaban en una y otra hueste, arroja su arco declarando que se dejará matar sin resistencia antes que hacer armas contra aquellos por cuyas venas corre su misma sangre. Contéstale Krichna (el dios que guiaba su carro de guerra) haciéndole ver que está en un lamentable error al adoptar semejante resolución, y exponiéndole las sublimes doctrinas del Bhagavad-Gîtâ, del Canto celestial. Escucha Arjuna sumiso y atento a su divino Instructor, y por fin, sobreponiéndose a sí mismo, toma una parte activísima en la pelea, y los valerosos príncipes pândavas recobran sus dominios después de vencer y exterminar a sus inicuos opresores. Como se comprende, el Mahâbhârata es una obra en la cual la realidad permanece encubierta tras el tupido velo de la alegoría y la fábula. Para más detalles, véase el notable compendio de esta epopeya que, con el título de Historia de la Gran Guerra, escribió la señora A. Besant, y cuya traducción castellana está próxima a publicarse. -En Pânini encontramos el término Mahâbhârata, no aplicándolo a la epopeya de este nombre, sino como un apelativo para designar cada hombre entre los Bhâratas (Jâbâla, Hailîlha) que se distingue de un modo especial. (Weber, Indische Literatur-geschichte).]
Mahâbhâchya (Mahâbhâshya) (Sánscrito).- El «Gran Comentario» de Patañjali sobre la Gramática de Pânini.
* Mahâbhâga (Sánscrito).- Muy eminente, muy ilustre, muy virtuoso, muy afortunado.
* Mahâbhâgya (Sánscrito).- Preeminencia, gran poder o importancia, condición suprema.
Mahâbhautik (Sánscrito).- [Adjetivo derivado de Mahabhûta] -Perteneciente o relativo a los principios macrocósmicos.
* Mahâbhikchu (Sánscrito).- «El gran Mendigo». Epíteto de Buddha.
* Mahâbhûta (Sánscrito).- «Gran Ser» o «Grande elemento». -Sinónimo de Tattva.
Mahâbhûtas [o más propiamente, mahâbhûtâni, plural de mahâbhûta.] -Los groseros principios elementarios de la materia. [Los cinco grandes elementos, o elementos compuestos de la filosofía Sânkhya: éter, aire, fuego, agua y tierra, que combinándose entre sí, forman el mundo material. Estos elementos, productos del Prakriti (materia), corresponden a los cinco sentidos por el orden expresado, esto es: el éter, al oído; el aire, al tacto; el fuego, a la vista; el agua, al gusto; y la tierra, al olfato. Así, leemos en el Bhagavad-Gîtâ: «Yo soy sabor en las aguas…, sonido en el éter…, fragancia en la tierra…, esplendor en el fuego…» (VII, 8, 9). Hay que advertir, sin embargo, que cada uno de estos elementos afecta no sólo al sentido correspondiente, sino que además, por razón de ser compuesto, afecta igualmente, si bien en un grado menor, a los demás sentidos. -Véase: Tanmâtras o Elementos sutiles.]
* Mahâbodhi (Sánscrito).- Literalmente: «Gran sabio»: un Buddha.
Mahâbuddhi (Sánscrito).- Mahat. El Alma inteligente del mundo. Los siete Prakritis, o siete «naturalezas» o planos, se cuentan desde el Mahâbuddhi abajo. [Véase: Mahat.]
Mahâ-Chohan (Sánscrito).- Jefe de una jerarquía espiritual o de una escuela de Ocultismo: el jefe de los místicos de la región situada más allá del Himalaya.
Mahâ-deva (Sánscrito).- Literalmente: «Gran Dios»; epíteto de Ziva. [En el Yajurveda Blanco se aplica este calificativo al dios Rudra. En plural, los Mahâdevas o Chaturdevas se han hecho sinónimos de los cuatro Mahârajas. (Véase: A. Besant, Sabiduría Ant., 350.]
Mahâ-Gurú (Sánscrito).- Literalmente: «Gran Instructor»; el Iniciador. [El Ser prodigioso que descendió de una de las regiones superiores al principio de la Edad tercera, antes de la separación de los sexos de la tercera Raza; el Arbol de que han brotado todos los grandes Sabios y Hierofantes históricamente conocidos; el excelso Personaje que cambia de forma, permaneciendo siempre él mismo; el Ser sin nombre, a pesar de la multitud de nombres con que se le ha designado; el Iniciador llamado GRAN SACRIFICIO poruqe se sacrificó en provecho de la especie humana con el objeto de arrancarla de las cadenas de la carne y de la ilusión. Bajo la guía y dirección de este grande Instructor, todos los demás Instructores y Maestros, menos divinos que él, han venido a ser los guías de la humanidad terrestre. Estos «Hijos de Dios» echaron los primeros cimientos de las antiguas civilizaciones y enseñaron a la humanidad, cuando ésta se hallaba en su infancia, las primeras nociones de todas las artes y ciencias, así como el conocimiento espiritual. (Doctr. Secr., I, 228, 229).]
* Mahâ-îzvara.- Véase: Mahezvara.
Mahâjvala o Mahâjwala (Sánscrito).- Literalmente: «gran llama o fuego». -Nombre de cierto infierno.
Mahâkâla (Sánscrito).- «Gran tiempo». Título de Ziva como «Destructor», y de Vichnú como «Conservador». [El infierno en que las cualidades de Prithivi Tattva se hallan en doloroso exceso. (Râma Prasâd).]
Mahâkalpa (Sánscrito).- «Gran Edad» [o «Gran Ciclo». Una Edad de Brahmâ, equivalente a 100 años de Brahmâ, o sea la enorme cifra de 311.040.000.000.000 de años solares, segun el cómputo brahmánico del tiempo.]
* Mahâkarana-zarira (Sánscrito).- «El gran cuerpo causal», el cuerpo búdico.
* Mahâ-kâvyas (Sánscrito).- Grandes poemas. Se cuentan seis, entre los cuales figuran en primer término: La Dinastía de Raghu, El Nacimiento del Dios de la Guerra y La Nube Mensajera.
* Mahâkâza (Mahâ-âkâza) (Sánscrito).- Literalmente: «Gran Espacio». -El Espacio.
* Mahâlaya (Sánscrito).- Mansión suprema, el mundo de Brahmâ; el Ser supremo; santuario; lugar de peregrinación.
Mahâmanvantara (Sánscrito).- Literalmente: «el gran intervalo de tiempo entre dos Manús». El período de actividad universal. Manvantara implica simplemente un período de actividad, en contraposición al Pralaya, o período de reposo, sin referencia alguna a la longitud del ciclo de tiempo.
Mahâ-mâyâ (Sánscrito).- La gran ilusión o manifestación. Este universo y todo cuanto hay en él en sus mutuas relaciones, es denominado Gran Ilusión, o Mahâ-mâyâ. Este es también el título ordinario dado a la inmaculada madre de Gautama el Buddha, Mâyâdevî, o «Gran Misterio», como la denominan los místicos. [El universo objetivo. (Voz del Silencio).]
* Mahâ-moha (Sánscrito).- Gran ilusión o error. Uno de los cinco sufrimientos de Patañjali. Sinónimo de râga (afán de adquirir o atesorar).
* Mahâ-mudrâ (Sánscrito).- Entre los yoguîs, es una actitud especial de las manos y de los pies. (Powis Hoult).
* Mahânubhava (Sánscrito).- De grande o alta dignidad; magnánimo, eminente, poderoso.
* Mahâpâpa (Sánscrito).- Gran pecado o crimen.
* Mahâpâpman (Sánscrito).- «Gran pecador»; muy malvado o perverso.
Mahâparinibbâna Sutta (Pali).- Una de las más autoritativas escrituras sagradas de los budistas.
* Mahâpâtâla (Sánscrito).- Lugar pavoroso parecido a un infierno ardiente y al fuego del día del Juicio final. (Véase: Uttara-Gîtâ, II, 28).
* Mahâpâsaka (Sánscrito).- Religioso mendicante.
* Mahâpatha (Sánscrito).- «Gran vía»; el gran camino de los seres vivientes; la muerte.
* Mahâprâjña (Sánscrito).- Muy sabio, sapientísimo.
Mahâ-pralaya (Sánscrito).- Lo opuesto al Mahâ-manvantara. Literalmente: «Gran Disolución», la «Noche» que sigue al «Día de Brahmâ». Es el gran reposo y sueño de toda la Naturaleza después de un período de activa manifestación. Los cristianos ortodoxos dirían que es la «Destrucción del Mundo».
* Mahâ-purânas (Sánscrito).- «Los Grandes Purânas: el Vichnú -y el Bhâgavata-Purâna.
* Mahâ-Purucha (-Purusha) (Sánscrito).- Grande o supremo Espíritu. Epíteto de Vichnú. [Esta palabra equivale también a Paramâtman.]
* Mahârâja (Sánscrito).- Gran rey o soberano. En plural:
Mahârâjâs o Mahârâjahs. Los Cuatro. (Sánscrito).- Entre los budistas del Norte, son las cuatro grandes divinidades kármicas, colocadas en los cuatro puntos cardinales, para guardar la humanidad. [Mahârâjâs o Devarâjâs son los cuatro regentes que presiden, respectivamente, los cuatro puntos cardinales, gobernando las Fuerzas cósmicas de dichos puntos, cada una de las cuales tiene una distinta propiedad oculta. Estos seres son los protectores de la humanidad y se hallan relacionados con el Karma, del cual son agentes en la tierra, razón por la que se les designa también con el nombre de «dioses kármicos». -Véase: Lipika, Señores del Karma, Cuatro Mahârâjâs, Inteligencias, etc. -Con el nombre de Mahârâjah o Vallabhâchârya se designa una secta oriental que practica el más vergonzoso y desenfrenado culto fálico. (Clave de la Teosofía, pág. 280.) -Véase: Goswâmi Mahârâjah y Vallabhâchârya.]
Mahârâjikâs (Sánscrito).- Una clase (gana) de divinidades [inferiores], en número de 236. En las enseñanzas esotéricas, son ciertas Fuerzas.
* Mahâratha (Sánscrito).- «Que tiene un gran carro». Calificativo de los grandes héroes, jefes o caudillos de ejército.
* Mahâraurava (Sánscrito).- El quinto infierno ardiente.
* Maharchi (Mahâ-richi) (Sánscrito).- Gran Richi. En plural: los grandes Richis o Prajâpatis. (Véase: Richi.).
* Mahâ-richi.- Véase: Maharchi.
* Maharishis o Maharshis.- Véase: Mahârichis o Maharchis.
* Mahar-loka (mahâ-loka) (Sánscrito).- Una región donde moran los Munis o «santos» durante el pralaya, segun declaran los Purânas. Es la residencia ordinaria de Bhrigu, uno de los Prajâpatis (Progenitores) y uno de los siete Richis que, segun se dice, son coexistentes con Brahmâ. Véase: Loka.
* Mahârupaka (Sánscrito).- Drama; representación dramática.
* Mahâsena (Sánscrito).- «Gran Capitán». Epíteto de Kârttikeya, dios de la guerra.
* Maha sûnyatâ.- Véase: Mahâ-zûnyatâ.
Mahâsura (Sánscrito).- El gran asura [mahâ-asura]. Exotéricamente, Satán o Lucifer; esotéricamente, el gran dios [mahâ-sura].
Mahat o Mahant (Sánscrito).- Literalmente: «El grande». Primer Principio de conciencia o inteligencia universales [o cósmicas]. En la filosofía puránica es el primer producto de la Naturaleza radical o Pradhâna (o sea el Mûlaprakriti); el productor del Manas (principio pensador) y del Ahankâra (egotismo o sentimiento del «yo soy yo» (en el Manas inferior). [Mahat es el nombre que, por antonomasia, se da al Buddhi o Mahâbuddhi, intelecto o principio intelectual. Significa también: grande, vasto, abundante, numeroso, considerable, poderoso, eminente, ilustre, etc.]
* Mahâtala (Sánscrito).- Exotéricamente, significa «gran lugar»; pero, esotéricamente, expresa un lugar que incluye todos los demás subjetivamente, y que potencialmente incluye todo lo que le precede. El Mahâtala corresponde a las jerarquías de Rasadevas o Devas del gusto, e incluye un estado de conciencia que abarca las emanaciones de la vida y del ser y los cinco sentidos inferiores. Corresponde al Kâma y al Prâna en el hombre, y a los gnomos y salamandras en la Naturaleza. (Doctrina Secreta, III, 565-566). -Segun se expresa en el Uttara-Gîtâ (II, 27), «la porción inferior del muslo (jânu) se llama Mahâtala. (Véase: Loka y Tala).
Mahâtmâ [o Mahâtman] (Sánscrito).- Literalmente: «grande Alma o Espíritu». Un Adepto del orden más elevado. Los Mahâtmas son seres eminentes que, habiendo logrado el dominio de sus principios inferiores, viven así libres de los impedimentos del «hombre de carne» y se hallan en posesión de un conocimiento y poder proporcionados al nivel que han alcanzado en su evolución espiritual. En pâli se les llama Rahats o Arhats. [También se les conoce con el nombre de Siddhas; son unos seres perfectos, que por su poderosa inteligencia y santidad han llegado a una condición semidivina. -Véase: M. Dvivedi, Comentarios de los Aforismos de Patañjali (III, 32). -Estos Seres magnánimos, poderosos, de alma excelsa, primeros frutos de la humanidad, han alcanzado la conciencia âtmica o nirvânica, la que pertenece a la vida del quinto plano, y han completado el ciclo de la evolución humana. Se les designa con los nombres de Maestros, Grandes Espíritus o Jivan-muktas [almas libertadas], y continúan, sin embargo, relacionados con el cuerpo físico para ayudar al progreso de la humanidad. (A. Besant, Sabid. Antig., 220.) -Véase: Maestro, Mahâguru, etc.]
Mahâtmya (Sánscrito).- «Magnanimidad», una leyenda de un altar, sepulcro o cualquier sitio sagrado. [Mahâtmya tiene varias otras ascepciones: majestad, eminencia, grandeza, excelsitud, etc. -Es también el título de un libro dedicado a describir la potencia del Bhâgavata.]
Mahatowarat (Sánscrito).- Calificativo aplicado a Parabrahm; más grande que las más grandes esferas.
Mahat-tattva (Sánscrito).- La primera de las siete creaciones, llamadas, respectivamente, en los Purânas: Mahat-tattva, Bhûta, Indriya, Mukhya, Tiryakzrotas, Urdhvazrotas y Arvâkzrotas, [Literalmente: «el gran elemento»; lo mismo que âdi-tattva, y probablemente se denomina así porque, como raíz primordial que es, incluye en su grandeza todos los demás elementos. (Bhagavân Dâs). -En la filosofía sânkhya, Mahat-tattva o Mahâ-tattva es Mahat, Buddhi o Gran Principio, primera y principal producción del Prakriti.]
Mahâvanso (Pali).- Obra histórica búdica escrita por el bhikchu Mohânâma, tío del rey Dhatusma. Es una autoridad en la historia del Budismo y su difusión en la isla de Ceilán.
* Mahâvastu (Sánscrito).- «La grande historia». Título de un libro búdico.
* Mahâvideha (Sánscrito).- Literalmente: «gran incorpóreo». El profesor Manilal Dvivedi, en su comentario a los Aforismos de Patañjali (III, 43), explica así esta palabra: «Siempre pensamos en relación con el ego que está dentro de nosotros, y por consiguiente en relación con el cuerpo. Hasta cuando dirigimos nuestro pensamiento a alguna parte fuera del cuerpo, está siempre en relación con el yo pensante. Cuando esta relación se halla cortada por completo y la mente existe, por decirlo asi, espontáneamente, ajena e independiente del cuerpo, el poder que se origina es llamado mahâvideha. En esta condición, toda clase de conocimiento se halla fácilmente al alcance del asceta, sin que éste haga el menor esfuerzo, porque se ha disipado el velo de las tres cualidades [gunas], que impide la intuitiva iluminación sâttvica«. He aquí el aforismo en cuestión: «Cuando se ha alcanzado aquella condición mental que es externa, independiente del cuerpo y no afectada por éste, entonces se disipa el velo que impide la iluminación».
Mahâvidyâ (Sánscrito).- La gran ciencia esotérica. Unicamente los más altos Iniciados se hallan en posesión de esta ciencia, que abarca casi el conocimiento universal. [Grande o perfecto conocimiento; sabiduría; nombre de uno de los aspectos del Zakti. (Bhagavân Dâs).]
* Mahâvîra (Sánscrito).- Héroe. Agni, el fuego sagrado o celeste, el rayo. Epíteto de Buddha.
* Mahâvirya (Sánscrito).- Dotado de gran fuerza o poder. Brahmâ.
* Mahâvizichta (Sánscrito).- Dotado de grandes cualidades.
* Mahâvrata (Sánscrito).- Muy piadoso; que practica grandes austeridades; muy fiel a sus votos. Epíteto de Ziva.
* Mahâvyâhriti (Sánscrito).- «La grande exclamación», esto es, las tres palabras místicas: bhûr, bhuva(s), svar.
* Mahâyajña (Sánscrito).- Gran sacrificio. Hay cinco de éstos, que han de celebrar diariamente los jefes de familia, y son: la lectura o estudio del Veda (Brahma-yajña); la ofrenda que se hace a los dioses y consiste en derramar en el fuego manteca derretida (Devayajña); la libación y ofrenda en honor de los manes (Pitriyajña); las ofrendas depositadas en varios sitios en el suelo para los espíritus y todos los seres vivientes (Bhûta-yajña), y la ofrenda a los hombres, que consiste en la hospitalidad, especialmente a los brahmanes mendicantes (Manuchya-yajña). -Véase: Leyes de Manú, III, 69-70.
Mahâyâna (Sánscrito).- Nombre de una escuela [de filosofía búdica]. Literalmente: «gran vehículo». Sistema místico fundado por Nâgârjuna. Sus libros fueron escritos en el siglo segundo antes de J. C. [Las escuelas mahâyânas son «contemplativas». (Prefacio de La Voz del Silencio. -Véase: Hinayâna.]
* Mahâyoga (Sánscrito).- El hecho de ver al Yo como uno con Dios. (Swâmi Vivekânanda). -Constituye la perfección en el Yoga.
* Mahâyogî (Sánscrito).- «El gran yogui o asceta». Epíteto de Ziva.
Mahâyuga (Sánscrito).- Literalmente, «gran edad». Es el agregado de cuatro yugas o edades, que consta de 4.320.000 años solares, o sea la milésima parte de un «Día de Brahmâ», segun el cómputo brahmánico. [Véase: Yuga.]
* Mahâzana (Sánscrito).- Muy comedor; voraz.
Mahâ-zûnyatâ (Mahâ-Sûnyatâ) (Sánscrito).- Espacio, o ley eterna; el gran vacío o caos.
* Mahendra (Mahâ-Indra) (Sánscrito).- «El gran Indra». Calificativo de este dios. Una de las siete cadenas montañosas de la India.
I
* Mahesha.- Véase: Maheza.
* Maheshvara.- Véase: Mahezvara.
* Maheza (Mahesha) (Sánscrito).- «Gran Señor» (Mahâ-îza). Epíteto de Ziva. Sinónimo de Mahezvara.
* Mahezvara (Mahâ-îzvara) (Sánscrito).- «Gran Dios o Señor». Uno de los título de Ziva.
* Mahesvara-Purâna (Sánscrito).- Título de uno de los Purânas.
* Mahî (Sánscrito).- La tierra; suelo, país, reino; vaca.
* Mahîkchit (Sánscrito).- Rey, príncipe o señor de la tierra.
* Mahimâ o Mahiman (Sánscrito).- Grandor, grandeza, majestad, poder. -El poder de extenderse o dilatarse en el espacio; el mágico poder de aumentar de tamaño a voluntad. Uno de los ocho vibhûtis o poderes anormales más elevados del yogui.
* Mahîpati (Sánscrito).- «Señor de la tierra»; rey, príncipe.
Mahoraga (Mahâ-uraga) (Sánscrito).- «Gran serpiente». Zecha o algunas otras.
* Mahûrta.- Véase: Muhûrta.
* Maia.- Madre de Mercurio (Buddha, Thot Hermes). Maia, entre los griegos, ha venido a significar «madre», y ha dado su nombre al mes de mayo, que estaba consagrado a todas las diosas antes de que fuera consagrado a María. (Véase: Maya, Mâyâ y María).
* Maitra (Sánscrito).- Amigo, amistoso, amable, benévolo, bondadoso, afectuoso.
* Maitrabha (Sánscrito).- Nombre del 17mo. Asterismo o mansión lunar. -Véase: Maitrî.
* Maitrâkchajyotika (Sánscrito).- Una clase de espíritu maligno que se nutre de materias purulentas. (Leyes de Manú, XII, 72).
* Maitreya (Sánscrito).- Benévolo, amable, afectuoso. Nombre de un Bodhisattva. -Véase: Maitreya Buddha.
Maitreya Buddha (Sánscrito).- Lo mismo que el Kalkî Avatar de Vichnú (el Avatar del «Cabello Blanco»), y de Sosiosch y otros Mesías. La única diferencia está en las fechas de sus apariciones respectivas. Así, mientras que se espera que Vichnú aparecerá en su caballo blanco al fin del presente Kali-yuga «para exterminio final de los malvados, renovación de la creación y restablecimiento de la pureza, Maitreya es esperado antes. La enseñanza popular o exotérica, diferenciándose muy poco de la doctrina esotérica, afirma que Zâkyamuni (Gautama Buddha) visitó a Maitreya en Tuchita (una mansión celeste), y le comisionó para salir de allí y dirigirse a la tierra como sucesor suyo al expirar el término de cinco mil años después de su muerte (de Buddha). Para que esto ocurra, no faltan aun 3.000 años. La filosofía esotérica enseña que el próximo Buddha aparecerá durante la séptima (sub)raza de esta Ronda. El hecho es que Maitreya era un secuaz de Buddha, un célebre Arhat, aunque no su discípulo directo, y que fue fundador de una escuela filosófica esotérica. Segun declara Eitel (Diccionario Sánscrito-Chino), «se erigieron estatuas en honor suyo en una época tan lejana como el año 350 antes de J. C.». [Maitreya es el nombre secreto del quinto Buddha, y el Kalkî Avatara de los brahmanes, el postrer Mesías que vendrá a la culminación del Gran Ciclo. -En todo el oriente es una creencia universal que este Bodhisattva aparecerá con el nombre de Maitreya Buddha, en la séptima Raza. (Doctr. Secr., I, 412, 510).]
* Maitri, Maitrâyani (Sánscrito).- Título de uno de los Upanichads.
* Maitrî (Sánscrito).- Amistad, benevolencia, caridad; la caridad universal. -El décimoséptimo asterismo lunar.
* Maitrya (Sánscrito).- Amistad.
Makara (Sánscrito).- «Cocodrilo». -Décimo signo del Zodíaco, equivalente al Capricornio de los europeos. Esotéricamente, es una mística clase de devas. Entre los indos, es vehículo de Varuna, dios de las aguas. [Makara significa cocodrilo, o más bien un monstruo acuático asociado siempre con el agua. (Doctr. Secr., I, 412). -Es un monstruo marino provisto de una especie de trompa algo parecida a la del elefante, y en el cual cabalga Varuna, dios del océano. Signo del Zodíaco equivalente a nuestro Capricornio y representado en forma de un animal que tiene la cabeza y las patas delanteras de antílope, y el cuerpo y cola de pez. -Véase: Kâma-deva, Makaram y Makara-ketu.]
Makara-ketu (Sánscrito).- [Literalmente: «que tiene por emblema o bandera el makara«.] Sobrenombre de Kâma, el dios indo del amor y deseo. [Véase: Kâma-deva.]
Makaram o Pañchakaram (Sánscrito).- En la simbología oculta, es el pentágono, la estrella de cinco puntas, los cinco miembros o extremidades del hombre. Es muy místico. [Makaram puede servir para representar a la vez el microcosmo y el macrocosmo, como objetos externos de percepción. (Subba Row, Los doce signos del Zodíaco). -Véase: Pentágono.]
Mâkâras (Sánscrito).- Las cinco M M de los tântrikas. -(Véase: Tantra). [Estas cinco M M aluden a los cinco requisitos para el culto tántrico que son: Madya (vino), Mansa (carne), Matsya (pescado), Mudrâ (grano seco y gesticulaciones místicas), y Maithuna (comercio sexual). -(Dowson: Diccionario clásico indo).]
* Mal de ojo.- Influjo maléfico que puede una persona ejercer sobre otra, mirándola de cierta manera, y particularmente sobre los niños. Esta creencia se halla sumamente extendida en España, Italia, Alemania, Grecia y muchos otros países, pero su origen es oriental. El mismo Thalmud habla de ella. En el lenguaje gitanesco, se llama querelar nazula el hacer caer enferma a una persona por la simple influencia de la mirada; los niños, sobre todo, son los más expuestos a tan funesta acción. En Andalucía se ven no pocos niÑos con un pequeño cuerno de ciervo colgado al cuello, que, segun la creencia vulgar, es un poderoso preservativo contra el aojamiento. En Isis sin Velo (II, 633) se relata un curioso caso, cuyo protagonista fue el jesuíta padre Girad, que en el año 1731 fue juzgado ante el Parlamento de Aix, con motivo de la seducción de su penitente, la bella y virtuosa señorita Catalina Cadiere, de Tolón, y por ciertos repugnantes crímenes relacionados con ella. El mal de ojo, mal’occhio o jettatura, es efecto del poder que tienen algunas personas de comprimir el fluído astral y lanzar un rayo del mismo, de un modo consciente o inconsciente, contra un objeto determinado con una fuerza fatal. Personas hay que puedan matar aves y sapos con solo mirarlos, y del mismo modo pueden matar seres humanos. La malignidad de su deseo acumula en un foco fuerzas maléficas que son disparadas como un dardo mortífero. (Véase: Isis sin velo, I, 380).
* Mala (Sánscrito).- Impureza, suciedad, mancha, polvo, orín.
* Mâla (Sánscrito).- Vil, abyecto, ruin.
Malachim (Hebreo).- Mensajeros, ángeles.
* Malâpakarchana (Sánscrito).- Limpieza, purificación.
* Malaya (Sánscrito).- Jardin; el paraíso de Indra.
* Malina (Sánscrito).- Sucio, negro, manchado por el pecado, criminal. Como substantivo: mancha, pecado, crimen, vicio, defecto, imperfección.
* Malina-mukha (Sánscrito).- «De rostro negro». Salvaje, feroz, cruel. Calificativo de los râkchasas y otras especies de demonios.
Malkuth (Hebreo).- El Reino, el décimo Sephira, correspondiente a la H (hé) final del Tetragrammaton o I H V H. Es la Madre inferior, la esposa del Microprosopo (véase esta palabra), llamada también la «Reina». Es, en cierto sentido, el Shekinah. (W. W. W.).
* Mâlya (Sánscrito).- Collar, diadema, guirnalda, corona, flor.
* Mâm (Sánscrito, pronombre personal).- A mí.
* Mama (Sánscrito, pronombre posesivo).- Mío.
Mamitu (Caldeo).- La diosa del Destino. Una especie de Némesis.
* Mâna (Sánscrito).- Medida, peso; ponderación, consideración, respeto, honor, aprecio, opinión, concepto, intuición, indiferencia o razonamiento; arrogancia, soberbia, orgullo, alto aprecio de sí mismo; voluntad, capricho; necio, fatuo.
* Mânakara (Sánscrito).- Que forma o constituye autoridad.
* Manana (Sánscrito).- Pensamiento, reflexión, consideración, contemplación, meditación.
* Mananâ (Sánscrito).- De un modo cuidadoso, atento o reflexivo.
* Mânana o Mânanâ (Sánscrito).- Veneración, respeto.
Manas [o Manah] (Sánscrito).- Literalmente: “la mente”, la facultad mental que hace del hombre un ser inteligente y moral y le distingue del simple bruto; es sinónimo de Mahat. Esotéricamente, sin embargo, cuando no está especificado, significa el Ego superior, o sea el principio senciente, que se reencarna en el hombre. Cuando se le califica, es llamado por los teósofos Buddhi-Manas, o sea el Alma espiritual, en contraposición de su reflexión humana, el Kâma-Manas. [Manas, quinto principio de la constitución humana, deriva su nombre de la raíz sánscrita man, “pensar”, y significa la mente propiamente dicha, el Pensador, lo que en nosotros piensa, el Ego que se reencarna repetidas veces acumulando en él las experiencias recogidas en la vida terrestre. Este principio es dual en su esencia, y de ahí su división en Manas o Inteligencia inferior, terrestre, que está íntimamente ligada con el alma animal (Kâma), y Manas o Inteligencia superior, relacionada con Âtma y Buddhi, y vehículo o instrumento del alma espiritual (Buddhi). –El Manas superior, junto con el Buddhi y Âtman, constituye la Tríada superior, imperecedera, mientras que el Manas inferior, unido a los principios inferiores (cuerpo fisico, doble etéreo, principio vital y alma animal), forma el cuaternario inferior, esto es, la personalidad transitoria. –El Manas, en el hombre, es el reflejo de la Mente universal, o sea el tercer principio constituyente del universo, contando de abajo hacia arriba. (Râma Prasâd). –El Manas de la literatura teosófica no debe confundirse con el de la filosofía sânkhya. Segun esta última, Manas es el órgano interno de percepción y conocimiento, el sensorio común o sentido interno que regula y gobierna la acción de los sentidos; es el analizador de las impresiones que de ellos recibe; el principio que combina, sintetiza y elabora las sensaciones transformándolas en conceptos rudimentarios, que luego transmite al ahankâra y al buddhi. Es también la facultad que siente, desea, duda, piensa, discurre y reflexiona; la mente impulsiva que incita a funcionar los cinco órganos de acción. Así, pues, en el referido sistema, la voz Manas viene a significar: mente, pensamiento, alma, ánimo, corazón, sentimiento; inteligencia, razón, conocimiento, intención, voluntad, inclinación, deseo, disposición, etc. Con frecuencia el Manas es incluído entre los indriyas (véase: Indriyas). Véase, además: Cuaternario, Ego inferior, Ego superior y Tríada superior.]
* Manas inferior.- La mente o inteligencia terrestre, la que actualmente predomina en la especie humana. Está estrechamente ligado con el alma animal (razón por la cual se designa al Manas inferior con el nombre de Kâma-Manas), y profundamente egoísta y pasional como es, aplica la inteligencia a satisfacción de los deseos, de las pasiones y de los instintos de la bestia humana, para lograr un refinamiento de los placeres de los sentidos y dar origen a ciertas aberraciones y anomalías que ponen al hombre por debajo del bruto. A esto se refería Mefistófeles cuando, al hablar del hombre, dirigía al Señor estas palabras: “Un poco mejor viviera si no le hubieses dado esa vislumbre de la luz celeste a la que da el nombre de Razón, y que no utiliza sino para ser más bestial que toda bestia”. (Fausto, Prólogo en el cielo). –El Manas inferior es lo que hace que la personalidad se considere como Yo, y engañada por el sentimiento de separatividad, se juzgue distinta y separada de los demás Yos, sin ver la unidad que está por cima de lo que pueden alcanzar los sentidos. El Manas inferior obra como instinto en los animales. _-Véase: Manas, Manas-Kâma, Manas superior, etc.).
Manas-Kâma (Sánscrito).- Literalmente: “la mente del deseo [o pasional]”. Entre los budistas, es el sexto de los chadâyatanas (véase esta palabra), o sean los seis órganos de percepción o conocimiento, y de ahí el más elevado de éstos, sintetizados por el séptimo, llamado Klichta, la percepción espiritual de lo que vicia este Manas (inferior), o por otro nombre el alma humano-animal, como la denominan los ocultistas. Así como el Manas superior o el Ego está directamente relacionado con el Vijñâna (el décimo de los doce nidânas), que es el conocimiento perfecto de todas las formas de conocimiento, sea referente al objeto o al sujeto con el nidânico encadenamiento de causas y efectos, el inferior, el Kâma-Manas es sólo uno de los indriyas u órganos (raíces) de sentido. Muy poco puede decirse aquí del Manas dual, por cuanto la doctrina que trata de este punto sólo se halla expuesta debidamente en las obras esotéricas. Así es que únicamente pueden mencionarse de un modo superficial.
Manas sanyama [o Manas samyama] (Sánscrito).- Perfecta concentración de la mente y dominio de la misma durante las prácticas del Yoga.
* Manas-sûtrâtmâ (Sánscrito).- Esta palabra compuesta significa: “mente” y “alma-hilo”. Es sinónima de Ego, o la entidad que se reencarna. Es un término técnico de la filosofía vedantina. (Glosario de la Clave de la Teosofía). –Véase: Sûtrâtmâ.
* Manas superior.- Sólo muy raras veces se manifiesta en el presente período de la evolución humana. Es el aspecto más noble y sublime de la mente, el principio inmortal de la Egoidad, el Ego permanente e imperecedero, que, en su marcha evolutiva, va recogiendo todas las experiencias más elevadas y tiende sin cesar a remontarse hacia el Alma espiritual (Buddhi), a lo eterno, a lo divino. Tras repetidos nacimientos, el Manas entero adquiere una condición sublime, se reconcentra en la individualidad, y el hombre, purificado ya, lleno de altruísmo absoluto, iluminado por la luz del Manas superior, goza de la visión del “ojo interno”, de la intuición pura, y se convierte en un verdadero genio, en un Mahâtmâ. Entonces el hombre adquiere plenamente el libre albedrío, y su voluntad obra siempre de acuerdo con la Ley divina. Otro de los poderes del Manas superior es el llamado Kriyazakti, o sea el misterioso poder de pensamiento que le permite producir resultados fenomenales externos y perceptibles, gracias a su propia energía inherente. (Véase: Manas, Manas inferior, etc.).
Manas-taijasa (Manas taijasi) (Sánscrito).- Literalmente: el “Manas radiante”; un estado del Ego superior que sólo los más grandes metafísicos son capaces de concebir y comprender. [Es el alma humana (Manas) iluminada por la radiación del Buddhi.]
Mânasa o Manaswin (Sánscrito).- “La emanación de la mente divina”, explicada en el sentido de que dicha emanación significa los mânasa o hijos divinos del Brahmâ-virâj (véase esta palabra). Nilakantha, que es la autoridad para esta declaración, explica más adelante el término Mânasa en el sentido de manomâtra-zarîra [“cuerpo puramente mental”]. Estos Mânasa son los hijos incorpóreos (arûpa) del Prajâpati Virâj, segun otra versión. Pero como quiera que Arjuna Mizra identifica a Virâj con Brahmâ, y como quiera que Brahmâ es Mahat, la mente universal, el velo exotérico se hace más claro. Los Pitris son idénticos a los Kumâras, los Vairaja, los Mânasa-putras (Hijos de la Mente), y por último están identificados con los Egos humanos. [Mânasa significa “nacido de la mente”, mental, espiritual; y como substantivo, alma, ánimo, mente, corazón, pensamiento, sentido interno. En el Mahâbhârata dicho nombre se aplica al “dios primitivo, sin principio ni fin, indivisible, inmutable e inmortal”. También es el nombre de un lago sagrado del Himâlaya y lugar de peregrinación. –Véase: Mânasa-sarovara.]
* Manasâ (Sánscrito).- Nombre de la divinidad que reina sobre las serpientes y protégé contra su mordedura. (Véase: Manasâ-devî).
* Mânasâ (Sánscrito).- Mente, ánimo, alma, corazón.
Mânasas (Sánscrito).- Aquellos que dotaron de manas o inteligencia a la humanidad, los Egos inmortales en los hombres. (Véase: Manas).
* Mânasa-devas (Sánscrito).- Los devas rûpa o arûpa del mundo mental. (Powis Hoult).
* Manasâ-devî (Sánscrito).- Hermana del rey de las serpientes Zecha, y esposa del sabio Jarat-kâru. Tenía un poder especial para neutralizar el veneno de las serpientes. (Véase: Manasâ).
Mânasa Dhyânis (Sánscrito).- Los más elevados Pitris en los Purânas; los Agnichvâttas o Antecesores solares del hombre, que hicieron de éste un ser racional, encarnándose en las formas desprovistas de sentido de los semietéreos hombres de carne de la tercera Raza. (Véase: Doctr. Secr., II).
* Mânasa-Manas (Sánscrito).- Es el puro rayo del Manas, o sea el Manas inferior antes de mezclarse con el Kâma, como acontece en el niño. (Doctr. Secr., III, 566).
* Mânasa-pitris (Sánscrito).- Aquellos Pitris que dotan a las Mónadas humanas de mente y principios razonadores; los Agnichvâttas. (P. Hoult).
* Mânasa-putras (Sánscrito).- Los “Hijos de la Mente”, o “Hijos nacidos de la Mente”; nombre dado a nuestros Egos superiores antes de que se encarnaran en la humanidad. En los Purânas exotéricos, aunque alegóricos y simbólicos, es el título dado a los hijos de Brahmâ nacidos de la Mente, los Kumâras. (Glosario de la Clave de la Teosofía). –Los Mânasa-putras son los Hijos de Sabiduría que en la última parte de la tercera Raza madre dotaron de “mente” a las formas (cascarones o envolturas) desprovistas de sentido, creadas y modeladas por los Pitris. (Doctr. Secr., I, 203; II, 643). –Véase: Prajâpatis. –Considerados desde otro punto de vista, los Mânasa-putras, “los Hijos de la Mente universal”, son “el Pensamiento individualizado” al cual los teósofos denominan “verdadero Ego humano”, la Entidad pensante, aprisionada en una envoltura de carne y hueso. Dichas Entidades son los Egos que se encarnan y animan la masa de materia animal llamada humanidad, y que son designadas con el nombre de Mânasa o “Mentes”. (Clave de la Teosofía, pág. 184).
* Mânasa-rûpa (Sánscrito).- El cuerpo mental. Así como el Kâma-rûpa se refiere al yo astral o personal, el Mânasa-rûpa se relaciona con la individualidad o Yo que se reencarna. (Voz del Silencio, I).
Mânasa-sarovara (Sánscrito).- Fonéticamente, se pronuncia Mânsoravara [o Mânsarovara]. Un lago sagrado del Tibet, en los Himalayas, llamado también Anavatapta. Mânasa-sarovara es el nombre de la deidad tutelar de dicho lago, y segun la creencia popular, dícese que es un nâga o “serpiente”, lo cual, traducido al lenguaje esotérico, significa un gran adepto o sabio. El lago referido es un importante lugar de peregrinación anual para los indos, y se pretende que en sus orillas fueron escritos los Vedas. [Los siete cisnes que se cree bajan del cielo en el lago Mansarovara son, segun la fantasía popular, los siete Richis de la Osa Mayor, que adoptan dicha forma para visitar el sitio en que fueron escritos los referidos libros sagrados. (Doctr. Secr., I, 382).]
* Mânasatva (Sánscrito).- Forma de pensamiento. (P. Hoult).
* Manásico, plano.- Véase: Plano manásico.
* Manasija (Sánscrito).- “Nacido en el manas”; mental; el amor: Kâma.
* Manasizaya (Sánscrito).- Igual significado que Manasija.
* Manaskâra (Sánscrito).- “Operación del manas”. Atención, percepción interior, sentido interno.
* Manasvin (Sánscrito).- Inteligente, razonable, atento. (Véase: Mânasa).
* Mana(s)prasâda (Sánscrito).- La paz del corazón.
Mânava (Sánscrito).- Un país de la India antigua; un Kalpa o Ciclo. Nombre de un arma utilizada por Râma. Adjetivo derivado de Manu. [Hombre, ser humano, gente, humanidad; humano. Nombre de una escuela védica.]
Mânava-dharma-zâstra (-shâstra) (Sánscrito).- Antiguo código de leyes de Manú. [Literalmente: “Libro de leyes de Manú”. Este código es atribuído al primer Manú, titulado Svâyam-bhuva, que floreció cerca de 30 millones de años atrás, y es la primera y principal obra clasificada como Smriti (o basada en la tradición autoritativa), por lo cual es tenida en el mayor respeto y es el fundamento de la ley inda. Dícese que originalmente constaba de 100.000 versos, distribuídos en 24 capítulos; que Nârada la abrevió reduciéndola a 12.000 versos y que Sumati la compendió aun más, con lo cual constaba de 4.000, de los cuales sólo quedan en la actualidad 2.685. –Véase: Manu-sanhitâ.]
* Mânavarjita (Sánscrito).- Modesto, humilde.
* Manavas (Sánscrito).- Plural de Manu.
* Mânavî (Sánscrito).- Forma femenina de Mânava: mujer. La hija de Manú.
* Manda (Sánscrito).- Adormecido, indolente, inerte, perezoso, apático; débil; necio; mezquino.
Mandâkinî (Sánscrito).- El Gangâ o Ganges celeste.
Mandala (Sánscrito).- Un círculo, y también las diez divisiones del Rig-veda. [Disco del sol o de la luna; territorio; colección; grupo, multitud, etc.]
* Mandala nritya (Sánscrito).- Danza circular, como la de las gopîs (zagalas) en torno de Krichna y Râdhâ. (Véase: Danza).
* Mandapâla (Sánscrito).- Un santo Richi, de que se habla en el Mahâbhârata.
Mandara (Sánscrito).- La montaña de que se sirvieron los dioses a guisa de batidor para batir el océano de leche, segun refieren los Purânas.
* Mandehas (Sánscrito).- Una clase de râkchasas enemigos del Sol, al cual trataron de devorar.
* Mandjusry.- Véase: Manjushrî.
Mandrágora.- Planta cuya raíz tiene forma humana. En Ocultismo es utilizada por los magos negros para varios fines ilícitos, y algunos de los ocultistas “de la mano izquierda” hacen homúnculos con ella. Segun la creencia vulgar, lanza gritos cuando se la arranca del suelo. [La Mandrágora, de que se habla en el Génesis (XXX, 14 y siguientes), es una planta cuyas raíces son carnosas, peludas y ahorquilladas, representando toscamente los miembros del cuerpo y hasta la cabeza de un hombre. Sus mágicas y misteriosas virtudes se han proclamado en la fábula y en el drama desde los tiempos más remotos. Desde Raquel y Lea, que con ella se entregaron a la hechicería, hasta Shakespeare, que habla de sus espeluznantes chillidos, la mandrágora ha sido la planta mágica por excelencia. Estas raíces no tienen aparentemente tallo, y de su cabeza brotan grandes hojas, como una gigantesca mata de cabello. Presentan poca semejanza con el hombre cuando se las encuentra en España, Italia, Asia Menor o Siria; pero en la isla de Candía y en Caramania, cerca de la ciudad de Adán, tienen una forma humana que asombra y son sumamente apreciadas como amuletos. También las llevan las mujeres a guisa de amuleto contra la esterilidad y otros fines diversos. Son especialmente eficaces en la magia negra. (Doctr. Secr., II, 30). Los antiguos germanos veneraban como dioses lares unos feos y disformes ídolos a modo de pequeñas figuras fabricadas con la raíz de la mandrágora, y de ahí su nombre de alrunes, derivado de la voz alemana Alraune (mandrágoras). Aquellos que tenían en su casa una de tales figuritas se creían felices, puesto que ellas velaban por la casa y sus moradores preservándolos de todo mal, y predecían el porvenir emitiendo ciertos sonidos o voces. El poseedor de una mandrágora, además, obtenía por su influencia cuantiosos bienes y riquezas. –Véase: Drusos.]
* Mândûkya (Sánscrito).- Título de uno de los Upanichads: el Mândûkyopanichad (Mândûkya-Upanichad).
* Mândya (Sánscrito).- Torpeza, lentitud, indolencia, apatía.
Manes o Manus (Latín).- “Dioses” benévolos, esto es, “espíritus” del mundo inferior (Kâmaloka); las sombras de los muertos deificadas por los antiguos profanos y los espíritus “materializados” de los modernos espiritistas, que, segun se creía, eran las almas de los difuntos, siendo así que en realidad no son otra cosa que sus imágenes o envolturas vacías. [Véase: Pitris.]
* Mangala (Sánscrito).- El Marte indo. El planeta Marte, identificado con Kârttikeya, dios de la guerra.
* Mangonaria (Ocultismo).- Poder mágico mediante el cual los cuerpos pesados pueden levantarse sin gran esfuerzo físico; suspensión mágica; levitación. Ordinariamente este fenómeno se ejecuta cambiando la polaridad de dichos cuerpos respecto a la atracción (gravedad) de la tierra. (F. Hartmann). –Véase: Levitación y Etrobacia.
* Manía (Griego).- Entusiasmo, furor divino, transporte religioso, inspiración de los dioses. Platón enumera cuatro clases de manía: 1) musical; 2) teléstica o mística; 3) profética; y 4) la perteneciente al amor. El entusiasmo, en la verdadera acepción de la palabra, aparece cuando aquella parte del alma que está por encima del intelecto se halla exaltada hasta los dioses, de quienes proviene su inspiración. Una de estas manías (especialmente la amorosa) puede ser suficiente para hacer remontar el alma a su divinidad y bienaventuranza primitivas; pero existe una íntima unión entre todas ellas, y la progresión ordinaria por la cual se encumbra el alma es, en primer lugar, por el entusiasmo musical, después por el teléstico o místico; 3) por el profético, y finalmente por el entusiasmo del Amor. (Véase: Zanoni, Introducción).
* Manîchin (Sánscrito).- Sabio, docto, pensador, devoto.
* Mânin (Sánscrito).- Orgulloso, soberbio, presuntuoso.
* Manipûra (Sánscrito).- Uno de los siete padmas o plexos del cuerpo. Está situado en el ombligo, y es el más importante de todos ellos en lo que concierne a la disposición de los nervios del cuerpo, puesto que es el eje de todo el organismo. Así, leemos en uno de los Aforismos de Patañjali (III, 29): “Por la práctica del Samyama sobre el círculo [chakra o plexo] del ombligo, se logra el conocimiento de la disposición o estructura del cuerpo”. Es el tercer loto o padma de los yoguis, el que está opuesto al corazón. (Swami Vivakânanda).
Maniqueos.- Una secta del siglo III, que creía en dos eternos principios del bien y del mal; el primero suministra a la humanidad las almas y el segundo los cuerpos. Esta secta fue fundada por cierto místico semicristiano llamado Mani, que se hacía pasar por el esperado “Confortador”, Mesías y Cristo. Muchos siglos más tarde, después de extinguida la secta, apareció una Fraternidad que se titulaba de los “Maniqueos”, la cual tenía un carácter masónico con varios grados de iniciación. Sus ideas eran cabalísticas, pero fueron mal comprendidas.
Manjushrî [Manjusri o Mandjusri] (Tibet).- El dios de la Sabiduría. En filosofía esotérica es cierto Dhyân Chohan. [Bodhisattva humano. –Doctr. Secr., II, 37.) -En el Budismo del Norte, es el tercer Logos, el Creador. (P. Hoult).]
* Manmanas (Sánscrito).- Que tiene el corazón o el pensamiento puesto en mí, o dirigido a mí. (Bhagavad-Gîtâ).
* Manmaya (Sánscrito).- Devoto mío; entregado a mí; absorto en mí; lleno de mí; de mi naturaleza o condición. (Bhagavad-Gîtâ).
Mano (Gnóstico).- El Señor de Luz. Rex Lucis, en el Codex Nazarœus. Es la segunda “Vida” de la segunda Trinidad o Trinidad manifestada, “la Vida y Luz celestes, y más antigua que el arquitecto del cielo y de la tierra”. (Cod. Naz., vol. I, pág. 145). Estas trinidades son como sigue: El supremo Señor de esplendor y de luz, luminoso y refulgente, antes del cual ningun otro existía, es llamado Corona; el Señor Ferho, la vida no revelada, que existía en el primero desde la eternidad; y el Señor Jordán, el Espíritu, el Agua viva de gracia. (Id., II, págs. 45-51). Es el único, por medio del cual podemos ser salvados. Estos tres constituyen la Trinidad in abscóndito. La segunda Trinidad está compuesta de las tres Vidas. La primera es la similitud del Señor Ferho, por medio de quien él ha dimanado, y el segundo Ferho es el Rey de Luz: Mano. La segunda Vida es Ish Amon (Pleroma), el vaso de elección, que contiene el pensamiento visible del Jordanus Máximus, la imagen (o su reflejo inteligible), el prototipo del Agua viviente, que es el “Jordán espiritual”. (Id., II, pág. 211). La tercera Vida, producida por las otras dos, es Abatur (Ab, el Padre). Es el misterioso y decrépito “Anciano de los Ancianos”, el Antiguo, “Senem sui obtegentem et grandœvum mundi”. Esta última tercera Vida es el Padre del Demiurgo Fetahil, el Creador del Mundo, a quien los ofitas denominan Ilda-Baoth (véase esta palabra), si bien Fetahil es el único engendrado, la reflexión del Padre, Abatur, que le engendra igualmente a su Hijo Ilda-Baoth, el Demiurgo, considerando el caos de materia. Pero el Señor Mano, “el Señor de Excelsitud, el Señor de todos los genios, es superior al Padre, en este Codex cabalístico, puesto que el uno es puramente espiritual, y el otro es material. Así, por ejemplo, mientras que el “único engendrado” de Abatur es el genio Fetahil, el creador del mundo físico; el Señor Mano, el “Señor de Excelsitud”, que es el Hijo de Él, que es “el Padre de todos los que predican el Evangelio”, produce también un “único engendrado”, el Señor Lehdaio, “un Señor justo”. Es el Christos, el ungido, que derrama la “gracia” del Jordán invisible, el Espíritu de la Corona Suprema. (Para más detalles, véase: Isis sin velo, II, págs. 227 y siguientes, de la edición inglesa).
* Mano (Sánscrito).- Esta voz sánscrita, en las palabras compuestas, v. gr., Manomaya, manodhâtu, etc., equivale a Manas.
* Mano.- En los monumentos cristianos de los cuatro primeros siglos, la idea, la acción, la omnipotencia o la intervención de la Divinidad no se expresaba más que por una mano aislada, que por regla general salía de una nube. Así se daba entonces a entender que Dios era un Ser incorpóreo e invisible, que sólo se nos manifiesta por sus obras. Todo cuanto se parecía a una materialización o personificación de Dios repugnaba esencialmente al espíritu cristiano, y el mismo San Agustí condena toda práctica de esta naturaleza con las siguientes palabras: “Todo lo que pueda, tratándose de Dios, despertar la idea de una semejanza corpórea, debes rechazarlo de tu pensamiento, repudiarlo, renegarlo y huir de ello”. Aunque en los primeros tiempos del Cristianismo no había nacido aun la herejía de los antropomorfitas, tales prevenciones era, sin embargo, necesarias contra los herejes y contra los estoicos, que se figuraban un Dios corpóreo. Pero en varios monumentos cristianos posteriores al siglo IV vemos ya antropomorfizada la figura de la Divinidad, a la cual se representa como un viejo, como un hombre de edad madura y hasta como un joven. (Véase: Martigny, Dict. Des Antig. Chret., artículo Dieu).
* Manobhâva (Sánscrito).- El amor; Kâma.
* Manobhû o Manobhûta (Sánscrito).- Igual significado que Manobhâva. –La mente, con una envoltura que corresponde al mundo físico. La pasión de amor. (P. Hoult).
Manodhâtu (Sánscrito).- Literalmente: “Mundo de la mente”; lo cual significa no sólo todas nuestras facultades mentales, sino también una de las divisiones del plano de la mente. Cada ser humano tiene su manodhâtu o plano de pensamiento proporcionado al grado de su intelecto y de sus facultades mentales, más allá del cual no puede ir sino estudiando y desenvolviendo sus facultades espirituales, más elevadas en una de las esferas superiores del pensamiento.
* Manodvâra-varjana (o –vajjana) (Pali).- La abertura de las puertas de la mente, la convicción de lo transitorio de todo lo mundano. En el Budismo, es el cambio que se opera en el hombre cuando éste se vuelve consciente de que las cosas visibles son temporales, y así, desde entonces en adelates, consagra sus energías vitales a las cosas invisibles o eternas. Su equivalente sánscrito es Viveka, o sea el perfecto discernimiento entre lo real y lo irreal.
* Manogata (Sánscrito).- Que existe en la mente; una idea, un concepto. (P. Hoult).
* Manogavi (Sánscrito).- Deseo.
* Manohara (Sánscrito).- Que embelesa el corazón; seductor, atractivo, hechicero; lo que agrada, atrae y embelesa la mente.
* Manoja (Sánscrito).- Nacido en el corazón. El amor.
* Manojanman (Sánscrito).- Igual significado que Manoja.
* Manojava (Sánscrito).- Que comprende pronto; prontitud de ingenio o talento.
* Manojña o Manojñam (Sánscrito).- Lo que conoce o satisface la mente; que conoce el camino del corazón; bello, seductor. Nombre de un gandharva.
* Manokâya (Sánscrito).- El sub-koza o envoltura que corresponde al mundo mental inferior. (P. Hoult).
* Manolaya (Sánscrito).- Pérdida de la conciencia.
* Manomani (Sánscrito).- “En el ojo izquierdo y relacionado con la dirección ichânya [deseo, impulso], está el Ziva loka [región de Ziva], conocido con el nombre de Manomani. (Uttara-Gîtâ, II, 24).
* Manomaya (Sánscrito).- Constituído o formado por la mente; de naturaleza mental.
* Manomaya-jagat (Sánscrito).- El mundo de la mente.
Manomaya-koza (-kosha) (Sánscrito).- Témino vedantino que significa envoltura (Koza) del Manomaya, un equivalente de los “principios” cuarto y quinto del hombre. En filosofía esotérica este Koza corresponde al Manas dual. [Es la tercera envoltura de la Mónada divina, el principio mental; la mente individualizada, que es, por decirlo así, una cáscara o cubierta para que en ella se manifieste la energía espiritual, de la manera particular como encontramos la mente operando. (Râma Prasâd). –Es el alma animal juntamente con las porciones inferiores del principio intelectual, o sea la envoltura del Yo compuesta de la mente inferior y del principio o asiento de las emociones y pasiones, la unión del cuerpo mental y el cuerpo pasional (alma animal, o cuerpo astral, como otros lo denominan).]
* Manorama (Sánscrito).- Lo que agrada, atrae y embelesa la mente.
* Manoratha (Sánscrito).- “Gozo del corazón”; deseo, anhelo, gusto, deleite, contento, placer.
* Mânsa (Sánscrito).- Carne.
* Mânsa-bhakcha (Sánscrito).- Comedor de carne, carnívoro.
Mânsarovara.- Véase: Mânasa-sarovara.
* Mansión de dolor.- La tierra, el “valle de lágrimas”, como se le ha calificado. (Voz del Silencio, I). –En el plano físico es donde reina el dolor más intenso. Por esta razón se ha dado a nuestra tierra el nombre de “infierno”. –Véase: Myalba.
Manticismo, o Frenesí mántico.- Durante dicho estado se desarrollaba el don de profecía. Ambas expresiones son casi sinónimas. La una era tan honrada como la otra. Pitágoras y Platón lo tenían en alta estima, y Sócrates aconsejaba a sus discípulos estudiasen el Manticismo. Los Padres de la Iglesia, que con tanta severidad condenaban el furor mántico en los sacerdotes paganos y en las pitonisas, no dejaban de aplicarlo para su uso particular. Los montanistas, que tomaron su nombre de Montano, obispo de Frigia, a quien se consideraba como divinamente inspirado, competían con los manteis o profetas. “Tertuliano, Agustín y los mártires de Cártago figuraban en el número de ellos”, dice el autor de Profecía antigua y Moderna. “Los montanistas, segun parece, tenían semejanza con las bancantes, en el frenético entusiasmo que caracterizaba sus orgías” añade el citado autor. Hay diversas opiniones acerca del origen de la palabra Manticismo. Había la famosa Mantis, la Vidente, en los tiempos de Melampo y Preto, rey de Argos, y había también Manto, la hija del profeta de Tebas (Tiresias) que a su vez era profetisa. Cicerón describe la profecía y el furor mántico diciendo que “en las profundidades de la mente está oculta y recluída la profecía divina, un impulso divino, que cuando arde más vivamente es denominado furor”, frenesí. (Isis sin velo). [Véase: Soma.]
Mantra [o Mantram] (Sánscrito).- Los mantras son versos tomados de las obras védicas y usados como encantos y hechizos. Por mantras se entienden todas aquellas porciones de los Vedas que son distintas de los Brâhmanas, o su interpretación. [Mantras o encantaciones, ensalmos, etc., son ciertas combinaciones de palabras rítmicamente dispuestas, mediante las cuales se originan ciertas vibraciones que producen determinados efectos ocultos. Esotéricamente, los mantras son más bien invocaciones mágicas que oraciones religiosas. Como enseña la ciencia esotérica, cada sonido en el mundo físico despierta un sonido correspondiente en los reinos invisibles e incita a la acción alguna fuerza u otra en el lado oculto de la Naturaleza. (Doctr. Secr., III, 451). El sonido es el más eficaz y poderoso agente mágico y la primera de las llaves para abrir la puerta de comunicación entre los mortales y los Inmortales. (Id., I, 502). Por otra parte, cada letra tiene su significado oculto y su razón de ser; es una causa y un efecto de otra causa precedente, y la combinación de éstos produce con mucha frecuencia los más mágicos efectos. Las vocales, sobre todo, contienen las potencias más ocultas y formidables. (Id., I, 121). Los Mantras están sacados todos de libros especiales que los brahmanes mantienen ocultos y, segun se dice, cada uno de ellos produce un efecto mágico, puesto que quien lo recita o lee, con sólo cantarlos [con la entonación debida] origina causas secretas que se traducen en efectos inmediatos. (Id., I, 511). –En la mayoría de los casos –dice M. Leadbeater- la fórmula no sirve más que para fortalecer la voluntad del que hace uso de ella y para imprimir en la mente del sujeto el resultado que se desea obtener. Al logro de este resultado contribuyen no poco la firme confianza del operador y la fe ciega del sujeto. –La voz mantra tiene, además, otras acepciones: lenguaje, especialmente el sagrado; sentencia; texto; himno védico, plegaria, rezo; encanto, hechizo, ensalmo, conjuro; verso o fórmula mística de encantamiento, etc. –Véase: Encanto, Dhâranî y Soma.]
* Mantra-bîja (Sánscrito).- “Semilla mágica”. –La primera sílaba de un mantra, en que se da la nota fundamental. (P. Hoult).
* Mantra-gandaka (Sánscrito).- Ciencia o conocimiento de los mantras.
Mantra, Período.- Véase: Período mántrico.
* Mantra-prabhâva (Sánscrito).- Poder de la magia.
* Mantra-sanhitâ (Sánscrito).- Colección de himnos védicos.
Mantra shâstra.- Véase: Mantra-zâstra.
Mantra-tantra-zâstras (Sánscrito).- Obras que tratan de encantamiento, pero especialmente de magia.
* Mantra-vâdin (Sánscrito).- Que pronuncia mantras; que sabe o hace fórmulas de encantación.
* Mantra-vid (Sánscrito).- Conocedor de los mantras.
* Mantra-vidyâ (Sánscrito).- Literalmente: “Conocimiento de los mantras”. –Arte mágica.
* Mantra-yoga (Sánscrito).- Una clase de yoga que consiste en recitar mentalmente ciertas fórmulas, con atenta meditación sobre su significado. Este proceso es útil en todo acto, tanto del Hathayoga como del Râja-yoga. (Manilal Dvivedi).
* Mantra-zakti (Sánscrito).- El poder o un medio de encantamiento.
Mantra-zâstra (Mantra shâstra) (Sánscrito).- Escritos brahmánicos acerca de la ciencia oculta o encantamientos.
* Matrezvara (Mantra-îzvara) (Sánscrito).- Señor de los mantras.
* Mântrika (Sánscrito).- Recitador de textos o ensalmos; encantador, hechicero.
Mantrika sakti.- Véase: Mantrikâzakti.
Mantrikâzakti (Mantrikâshakti) (Sánscrito).- El poder o la potencia oculta de los sonidos, palabras, letras o números místicos de los mantras. [La influencia de la música es una de sus manifestaciones. El poder del mirífico nombre inefable es la corona de este zakti. Doctr. Secr., I, 312.]
Manu (Sánscrito).- El gran legislador indo. Este nombre deriva de la raíz sánscrita man “pensar”, humanidad, realmente, pero significa Swâyambhuva, el primero de los Manús, que surgió de Swayambhú, “el que existe por sí mismo”, y es, por lo tanto, el Logos y el progenitor de la humanidad. Manú es el primer legislador, casi un Ser divino. [El Código o Libro de leyes de Manú (Mânava-dharma-zâstra) se atribuye a este gran legislador, a quien, para diferenciarle de los restantes Manús, se ha dado el nombre de Manú Swâyambhuva. –Véase: Manús y Mânava-dharma-zâstra.]
Manus (Sánscrito).- Los catorce Manús son los patronos o guardianes de los ciclos de raza de un manvantara o Día de Brahmâ. Los Manús primitivos son siete, pero en los Purânas su número llega a catorce. [Los Manús –propiamente Manavas, en plural- son en número de catorce en cada Kalpa, y cada uno de ellos preside su correspondiente período de tiempo o Manvantara (Manu-antara, o período entre dos Manús). Esotéricamente, cada Manú, como patrono antropomorfizado de su ciclo (o Ronda) especial, no es más que la idea personificada del “Pensamiento divino” (como el Pymander hermético); siendo, por lo tanto, cada uno de los Manús el dios especial, el creador y modelador de todo cuanto aparece durante su propio ciclo respectivo de existencia, o Manvantara. (Doctr. Secr., I, 93). –Manú es el Ser concebido como el substratum del tercer principio del universo, contando desde abajo. La idea de la humanidad de uno de los ciclos conocidos con el nombre de Manvantara (Râma Prasâd).]
Manu-Svâyambhuva [o –Swâyambhuva] (Sánscrito).- El hombre celeste, Adam Kadmon, la síntesis de los catorce Manús [o Prajâpatis. Hijo de Svayambhû o Brahmâ, segun el Bhâgavata Purâna, y el primero de los Manús. “De este Manu Svâyambhuva (nacido del Ser existente por sí mismo) descienden otros seis Manús, dotados de un alma sublime y de gran potencia emanadora, cada uno de los cuales emitió su creación propia, y son: Svârochicha, Auttami, Tâmasa, Raivata, el gloriosísimo Châkchucha y el hijo de Vivasvat”. (Mânava-dharma-zâstra, I, 61). –En la Doctrina Secreta (II, 323) encontramos una lista de los catorce Manús antes mencionados, en su orden respectivo y en su relación con cada Ronda: Svâyambhuva y Svârochi o Svârochicha, correspondientes a la primera Ronda; Auttami y Tâmasa, a la segunda; Raivata y Châkchucha, a la tercera; Vaivasvata (nuestro Progenitor) y Sâvarna, a la cuarta; Dakcha-Sâvarna y Brahma-Sâvarna, a la quinta; Dharma-Sâvarna y Rudra-Sâvarna, a la sexta; y Rauchya y Bhautya, a la séptima. –Segun dice la Doctrina Secreta, el primer Manú (Manu-Svâyambhava) no era un hombre, sino la representación de las primeras razas humanas, desarrolladas con la ayuda de los Dhyân Chohans (Devas) al principio de la primera Ronda. Pero en el Mânava-dharma-zâstra leemos que en cada uno de los Kalpas hay catorce Manús, con lo cual catorce Manvantaras forman un Día de Brahmâ o Kalpa, debiendo entenderse por tal el intervalo desde un pralaya menor a otro. (Doctrina Secreta, II, 321).]
* Manubhú (Sánscrito).- “Nacido de Manú”; hombre.
* Manucha o Mânucha (Manusha) (Sánscrito).- Humano; perteneciante a los hombres. Día manucha, el día ordinario de veinticuatro horas; año manucha, el años solar ordinario. El mes lunar es designado con el nombre de “día de los padres” (pitrîya); el año solar, a su vez, es denominado “día de los dioses”. (Râma Prasâd).
* Manuchî (Manushi) (Sánscrito).- Forma femenina de Manucha; mujer.
Mânuchi o Mânuchi Buddhas (Sánscrito).- Buddhas humanos, Bodhisattvas o Dhyán Chohans encarnados. [Véase: Dhyâni Buddhas.]
* Manuchya (Manushya) (Sánscrito).- Hombre; humano.
* Manuchya-dharma (Sánscrito).- Condición humana.
Manuchya-loka (Sánscrito).- El mundo de los mortales o humano. Comprende todas las esferas materiales de existencia, cielo (svarga) inclusive.
* Manuchya-yajña (Sánscrito).- Ofrenda a los hombres. Uno de los cinco sacrificios (yajñas) diarios que debe practicar el jefe de familia indo: la hospitalidad. (Véase: Mahâyajña).
* Manu-ja (Sánscrito).- Literalmente: “Nacido de Manú”; hombre.
* Manu-sanhitâ (Sánscrito).- “Colección de Manu”. –Véase: Mânava-dharma-zâstra, o “Libro de las leyes de Manú”.
* manusha, Manushî y Manushya.- Véase: Manucha, Manuchî y Manuchya.
Manvantara [o Manwantara] (Sánscrito).- Un período de manifestación [del universo], opuesto al pralaya (reposo o disolución); término aplicado a varios ciclos, especialmente a un Día de Brahmâ, que comprende 4.320.000.000 de años solares, y al reinado de un Manú, equivalente a 306.720.000. (Véase: Doctrina Secreta, II, págs. 69 y siguientes.) Literalmente significa: “Período entre dos Manús” (Manu-antara). –[La expiración del Principio creador; el período de actividad cósmica entre dos pralayas. Cada manvantara se divide en siete períodos o Rondas, y así cada globo tiene siete períodos de actividad durante un manvantara. (A. Besant, Sabiduría Antigua, 419). –El Manvantara, o período entre dos Manús, es una Ronda o ciclo de existencia correspondiente a un Manú, y durante el cual existe una humanidad de cierto tipo. Catorce Manvantaras forman un Kalpa o Día de Brahmâ. No obstante, los Manvantaras, así como los Kalpas, segun se expresa en el lenguaje de los Purânas, han de entenderse en sus diversas referencias, puesto que dichas edades se refieren tanto los grandes períodos como a los pequeños, a los Mahâkalpas y a los ciclos menores. (Doctr. Secr., I, 396). Estas diversas maneras de apreciación se notan sobre todo cuando se comparan los datos de la ciencia ortodoxa con los de la ciencia esotérica. (Id., II, 752). Así es que la duración del Manvantara, considerado como una décimocuarta parte de un Kalpa o Día de Brahmâ, sería de 308.448.000 años (o de 306.720.000, como se lee en otras partes); mientras que considerado como un ciclo de 71 Mahâ-yugas (o Chatur-yugas), se trataría de un período de 36.720.000 años. En la actualidad nos hallamos en el séptimo Manvatara, llamado Vaivasvata, nombre del séptimo Manú.]
* Manvantárico.- Perteneciente a un Manvantara.
* Mânya (Sánscrito).- Honorable, venerable, respetable.
* Manzana de Sodoma.- Véase: Fruta del Mar Muerto.
* Mañju y Mañjula (Sánscrito).- Bello, agradable; famoso, reputado; de sonido agradable.
* Mañjukezin (Sánscrito).- De hermosa cabellera. Epíteto de Krichna.
Maquom (Sánscrito).- “Lugar secreto”, en la fraseología del Zohar, un sitio oculto, ora sea referente a un objeto sagrado de un templo, ora lo sea a la “Matriz del Mundo” o a la matriz humana. Es un término cabalístico.
* Mar de Fuego.- Con este nombre se designa la Luz superastral (esto es, noumenal), la primera radiación de la Raíz Mûlaprakriti, Substancia cósmica indiferenciada, que pasa a ser Materia astral. El Mar de Fuego es denominado también Serpiente ígnea o de Fuego.
Mâra (Sánscrito).- El Dios de la Tentación, el Seductor que trataba de apartar a Buddha de su Sendero. Es denominado “Destructor” y “Muerte” (del Alma). Es uno de los nombres de Kâma, dios del amor. [El gran Engañador, el Tentador o Destructor. En las religiones exotéricas, Mâra es un demonio, un asura; pero, en la filosofía esotérica, es la Tentación personificada por los vicios humanos, y traducida esta palabra literalmente, significa “lo que mata” el Alma. Es representado como un Rey (Rey de los Mâras), con una corona en la cual brilla una joya con resplandor tal que ciega a cuantos la miran, figurando este brillo la fascinación producida por el vicio sobre ciertas naturalezas. (Voz del Silencio, I). -Es el Diablo de los budistas.
Marabut.- Peregrino mahometano que ha estado en La Meca; un santo, cuyo cuerpo, después de la muerte, es colocado en un sepulcro abierto erigido sobre el suelo, como las demás construcciones, pero en medio de las calles y plazas de las ciudades populosas. Colocado dentro del único y pequeño recinto de la tumba (y muchos de estos sepulcros públicos de ladrillo y argamasa pueden verse hoy día en las calles y plazas de El Cairo), la devoción de los transeúntes mantiene una lámpara siempre encendida sobre la cabeza del santo. Las tumbas de algunos de estos marabuts son muy famosas por los milagros que se atribuyen a ellas.
* Mârajit (Sánscrito).- “Vencedor de Mâra”. Epíteto de Buddha.
* Mâraka o Maraka (Sánscrito).- Destructor; epidemia, pestilencia, contagio, mortalidad.
* Marana (Sánscrito).- Muerte.
Marcionistas.- Antigua secta gnóstica [del siglo II], fundada por Marción, que fue devoto cristiano en tanto que ningun dogma de creación humana vino a viciar los conceptos puramente trascendentales y metafísicos, y las creencias originales de los primeros cristianos. Dichas creencias primitivas eran las de Marción. Este negaba los hechos históricos (tales como ahora se encuentran en los Evangelios) del nacimiento, de la encarnación y pasión de Cristo, así como la resurrección del cuerpo de Jesús, sosteniendo que tales afirmaciones no eran más que la carnalización del simbolismo y de las alegorías metafísicas y una degradación de la verdadera idea espiritual. Lo mismo que todos los demás gnósticos, Marción acusaba a los “Padres de la Iglesia”, como se lamentaba de ello el propio Ireneo, de “forjar su doctrina (cristiana) segun la capacidad de sus oyentes, inventando cosas obscuras para los ciegos, conforme a su ceguera; para el necio, segun su necedad, y para los que están sumidos en el error, segun sus propios errores”.
* Mârdava (Sánscrito).- Mansedumbre, dulzura, bondad, benignidad, ternura, docilidad.
* Mârddhava (Sánscrito).- Hombre de casta vil.
Mârga (Sánscrito).- “Sendero”. El Actânga mârga [óctuple sendero], el sendero “santo” o sagrado, es el único que conduce al Nirvâna. El óctuple sendero ha pasado más allá del séptuplo, gracias a la adición del (ahora) primero del óctuple sendero, esto es, “la posesión de las opiniones ortodoxas”, con las cuales el verdadero Yogâcharya nada tiene que ver. [Mârga significa: vía, método, sendero. Los cuatro senderos de liberación conocidos en el indoísmo son: el Karma-mârga, o sendero de las obras; el Jñâna-mârga, o sendero del conocimiento; el Bhakti-mârga, o sendero de devoción, y el Dhyâna-mârga, o sendero de meditación.]
* Mârgazîrcha (Sánscrito).- (De mriga-zîrcha, “cabeza de antílope”). Nombre derivado de una constelación de tres estrellas, figurada por una cabeza de antílope. Mes constituído por la segunda quincena de noviembre y la primera de diciembre. Antiguamente era el primer mes del año, por lo cual se le denomina también âgrahâyana “principio de año”, y es el mejor de todos porque entonces las cosechas están en sazón, y además se han mitigado los excesivos calores a consecuencia de las lluvias periódicas.
* Mâri (Sánscrito).- Muerte, destrucción, ruina, pestilencia.
* María.- María, Maia y Maya forman un nombre genérico. Maia proviene de la raíz ma (nodriza), y entre los griegos vino a significar “madre”, y aun dio su nombre al mes de mayo, consagrado a todas las diosas antes de que fuese consagrado a María. En efecto, el pagano Plutarco expone que “mayo es consagrado a Maia o Vesta, nuestra madre tierra, nuestra nodriza y sustentadora, personificadas”. (Doctrina Secreta, I, 426). –María, madre de Jesús, es llamada también Mâyâ, por cuanto María es Mare, el mar, la gran Ilusión, simbólicamente. María, además, tiene por inicial la letra M, la más sagrada de todas, que simboliza el Agua en su origen, el Gran Abismo, y en todas las lenguas, así orientales como occidentales, representa gráficamente las olas, y en el esoterismo ario, lo mismo que en el semítico, dicha letra expresa las Aguas. (Doctr. Secr., I, 412).
* Mariam (Arábigo).- María, entre los musulmanes.
Mârichâ [o Mârichî] (Sánscrito).- Hija del sabio Kandu y de Pramlochâ, la apsara-demonio del cielo de Indra. Fue madre de Dakcha. Es una alegoría referente al misterio de la segunda y tercera Razas humanas. [Véase: Pramlochâ.]
Marîchi (Mârîchi) (Sánscrito).- Uno de los hijos nacidos de la mente de Brahmâ, segun los Purânas. Los brahmanes hacen de él la luz personificada, el padre de Sûrya, el Sol, el antecesor directo de Mahâkâzyapa. Los budistas del norte pertenecientes a la escuela Yogachârya, ven en Marîchi Deva un Bodhisattva, mientras que los budistas chinos (especialmente los taoístas), han hecho de este concepto la Reina de los Cielos, la diosa de la luz, regente del sol y de la luna. Entre los piadosos, e iliteratos budistas, su mágica fórmula “On Marîchi svâha” es muy poderoso. Hablando de Marîchi, Eitel hace mención de “Georgi, que explica tal término como una transcripción china del nombre de la santa virgen María” (!!). Como quiera que Marîchi es el jefe de los Maruts [personificaciones de los vientos] y uno de los siete Richis primitivos, aquella supuesta derivación parece buscada demasiado lejos. [Marîchi significa literalmente “rayo de luz”. Es uno de los Prajâpatis (procreadores), y uno de los ocho puntos del cielo. En su significado esotérico, es uno de los antecesores solares de la humanidad, los Egos humanos inteligentes.]
* Mârja o Mârjana (Sánscrito).- Limpieza, purificación, absolución.
* Mârkandeya (Sánscrito).- Famoso asceta, hijo de Mrikanda; autor del Mârkandeya Purâna y célebre por sus estudios y acerbas austeridades. De él se hace frecuente mención en el Mahâbhârata, de él se cuenta que habiéndose unido a Bhagavat (Vichnú) por medio del pensamiento, a fuerza de ascetismo y meditación, se le apareció Hari (Vichnú-Krichna) bajo la doble figura de nara y Nârâyana. También se cuenta de él que, por el favor de Hrichikeza, “venció a la muerte, tan difícil de vencer”, y de ahí su sobrenombre de Dîrghâyus, “el de larga vida”.
* Marta (Sánscrito).- Mortal, hombre.
Mârtanda o Mârttanda (Sánscrito).- Nombre védico del Sol [o Dios sol, uno de los hijos de Aditi.]
Martillo de Thor [Mitología escandinava].- Un arma que tenía la forma de cruz svástika, y que los masones y místicos europeos designaban con el nombre de “Cruz hermética” y también con el de “Cruz jaina”, croix cramponnée. Es el símbolo más arcaico y el más sagrado y universalemente respetado. –Véase: Svastika. [Véase, además: Isis sin velo, I, 160-161, edic. inglesa.]
* Martini.- Profesor de filosofía en Helmstadt, célebre por sus diatribas contra la alquimia. Un día, en una de sus lecciones públicas, mientras se desataba en improperios contra los buscadores de la piedra filosofal y aducía argumento tras argumento contras sus doctrinas, un gentilhombre extranjero que estaba allí presente le interrumpió de muy buenos modos y le propuso una discusión pública. Después de haber refutado uno por uno todos los argumentos del profesor, el gentilhombre pidió que le facilitaran al punto un crisol, un hornillo y plomo, y acto contínuo operó la transmutación; convirtió dicho metal en oro y lo ofreció a su estupefacto adversario diciéndole: Domine, solve mi hunc syllogismum (Señor, resuélveme este silogismo). Esta demostración tan patente causó la completa conversión de Martini, que, en la edición siguiente de su Tratado de Lógica, se expresa en estos términos: “Nada diré contra la verdad de esta arte, puesto que no puedo rechazar los testimonios de tantas personas honradas que aseguran haber visto con sus propios ojos la sublimación de los metales y haberla ejecutado ellas mismas. Mentir sería aquí una locura, sobre todo para un discípulo de la Sabiduría”. (Figuier, L’Alchimmie et les Alchimistes, pág. 246).
Martinistas.- Sociedad fundada en Francia por un gran místico llamado Marqués de Saint Martin, discípulo de Martínez Pasqualis. Fue establecida primeramente en Lión, como una especie de sociedad masónica oculta, cuyos miembros creían en la posibilidad de comunicarse con los espíritus planetarios, los dioses menores y los genios de las esferas ultramundanas. Luis Claudio de Saint Martin, nacido en el año 1743, comenzó su vida como un brillante oficial del ejército, pero abandonó la carrera militar para consagrarse al estudio y a las belles lettres, y acabó por ser un ferviente teósofo y discípulo de Jacobo Boehme. Trató de hacer volver la masonería a su primitivo carácter de Ocultismo y Teurgia, pero fracasó en su empeño. En primer lugar, hizo que su “Rito rectificado” constara de diez grados, pero éstos quedaron reducidos a siete, debido al estudio de las órdenes masónicas originales. Los masones se lamentan de que Saint Martin introdujo ciertas ideas y adoptó ritos “que están en desacuerdo con la historia arqueológica de la masonería”; pero otro tanto hicieron antes que él Cagliostro y Saint Germain, lo mismo que todos los que conocían bien el origen de la francmasonería.
Mârttanda.- Véase: Mârtanda.
* Martya (Sánscrito).- Mortal, humano; hombre; la tierra, el mundo de los mortales.
* Martya-loka (Sánscrito).- El mundo de los hombres o mortales.
* Martya-mukha (Sánscrito).- Literalmente: “de rostro humano”. Un ser (kinnara, yakcha, etc.) en quien se hallan combinadas las figuras de hombre y de animal.
* Marut.- Véase: Maruts.
* Maruta o Mâruta (Sánscrito).- Viento, aire; soplo vital. (Véase: Maruts).
Mârut-jivas (Sánscrito).- Las Mónadas de Adeptos que han alcanzado la liberación final, pero prefieren reencarnarse en la tierra en beneficio de la humanidad. No se los confunda, sin embargo, con los Nirmânakâvas que ocupan un lugar mucho más elevado.
Maruts [Marutas o Mârutas] (Sánscrito).- Entre los orientalistas, son los dioses de la tormenta, pero en el Veda son algo muy místico. En las enseñanzas esotéricas, por razón de reencarnarse ellos en cada Ronda, son simplemente id’enticos a algunos de los Agnichvâtta-Pitris, los Egos humanos inteligentes. De ahí la alegoría de que Ziva transformó las masas de carne en niños, y los denominó Maruts, para expresar hombres desprovistos de sentido transformados gracias a llegar a ser vehículos de los Pitris o Maruts ígneos, y por lo tanto, seres racionales. [Marut significa: viento, aire, aliento, soplo vital. En plural (Maruts o Marutas), son dioses, genios o personificaciones de los vientos. Son hijos de Rudra y de Diti, y amigos o aliados de Indra. Su número es de siete (siete veces siete, o cuarenta y ocho, segun otros), y su jefe es Marîchi. –Véase: Diti.]
* Marutpâla (Sánscrito).- “Señor de los Maruts”: Indra, dios del firmamento.
Masben (Caldeo).- Término masónico que significa: “el Sol en putrefacción”. Tiene una relación directa (quizás olvidada por los masones) con su “Palabra en voz baja”.
Mash-Mak.- Por tradición, una palabra atlántica de la cuarta Raza, usada para expresar un misterioso fuego cósmico, o más bien Fuerza, que, segun se decía, era capaz de pulverizar en un segundo ciudades enteras y destruir el mundo.
Masonería magnética.- Llamada también “Masonería iátrica”. Se la describe como una Fraternidad de sanadores (de iatriké, voz griega que significa “arte de curar”), y es muy frecuentada por los “Hermanos de la Luz”, como afirma Kenneth Mackenzie en Royal Masonic Cyclopœdia. Parece existir una tradición en ciertas obras secretas masónicas (así lo dice al menos Ragon, la grande autoridad masónica) referente al hecho de que había un grado masónico titulado Oráculo de Cos, “instituído en el siglo XVIII antes de J. C., por razón de que Cos fue el lugar donde nació Hipócrates”. El iatriké era una cualidad característica distinta de los sacerdotes que tenían a su cargo los enfermos en las antiguas Asclepias, templos en donde es fama que el dios Asclepios (Esculapio) curaba pacientes y lisiados.
Masora o Massorah (Hebreo).- Nombre que se aplica especialmente a una colección de notas aclaratorias, gramaticales y críticas que se encuentran en el margen de antiguos manuscritos hebreos, o en rollos del Antiguo Testamento. [El objeto que se proponían los rabinos al redactar dichas notas era conservar la genuina lectura e inteligencia del sagrado texto hebreo. Hay el Gran Masora y el Pequeño Masora, que es un extracto del anterior.]
Masoretas.- Llamados también melquitas. [Gramáticos hebreos que se ocupaban en la división, estudio, acentuación, palabras, letras y formas gramaticales del texto hebreo del Antiguo Testamento.]
Masoréticos.- Véase: Puntos masoréticos.
Mastaba (Egipcio).- La porción superior de una tumba egipcia, que, como dicen los egiptólogos, constaba siempre de tres partes, a saber: 1) el Mastaba o capilla conmemorativa levantada sobre el suelo; 2) un hoyo de 20 a 90 pies de profundidad, que conducía por medio de un pasadizo, a 3) la cámara sepulcral, en donde estaba el sarcófago, que contenía la momia durmiendo su sueño de largos siglos. Una vez enterrada la momia, se cegaba el hoyo y quedaba oculta la entrada. Así dicen los orientalistas, que dividen la última morada de la momia en casi los mismos principios en que los teólogos dividen al hombre; cuerpo, alma y espíritu o mente. El hecho es que estas tumbas de los antiguos eran simbólicas como sus demás edificios sagrados, y que esta simbología se refiere directamente a la división septenaria del hombre. Pero, en la muerte, el orden resulta invertido; y así como el Mastaba, con sus escenas de la vida diaria pintadas en las paredes, su mesa de ofrendas, para la larva, la sombra o linga zarîra, era un objeto conmemorativo de los dos principios de la Vida que había abandonado, lo que era un trío inferior en la tierra, el hoyo, el pasadizo y la cámara sepulcral y la momia del sarcófago eran los símbolos objetivos erigidos a los dos “principios” perecederos, la mente personal y el Kâma, y a los tres imperecederos, la Tríada superior, ahora fundidos en uno. Este “Uno” era el Espíritu del bienaventurado que descansa actualmente en el Círculo feliz de Aanru.
* Mata (Sánscrito).- Pensamiento, opinión, creencia, doctrina, intención, consideración, sentencia, dictamen. Como adjetivo: pensado, considerado, juzgado, declarado, conocido, supuesto, aprobado.
* Matallikâ (Sánscrito).- Excelencia.
* Matanga (Sánscrito).- Una de las castas inferiores de la India; elefante; nube. Nombre de un personaje de que se habla en el Mahâbhârata y en el Râmâyana.
Mâtari-svan.- Véase: Mâtarizvan.
Mâtarizvan (Mâtarishvâ) (Sánscrito).- Un ser aéreo representado en el Rig-veda aportando de lo alto o produciendo fuego (agni) para los Brighus, que son designados con el nombre de “Consumidores”, y son descritos por los orientalistas como “una clase de seres míticos pertenecientes a la clase media o aérea de los dioses”. En Ocultismo, los Brighus son simplemente las “Salamandras” de los rosacruces y cabalistas. [Mâtarizvan: divino personaje estrechamente asociado con Agni, dios del fuego de los Vedas. (Doctr. Secr.,II, 431). –Literalmente: “el que duerme en el espacio”. Este término se aplica al Prâna, en el sentido de que desempeña las funciones de registrar los actos de los hombres. (Râma Prasâd). Algunos autores suponen que es el viento en general, y en el Diccionario de Burnouf se dice que es el nombre del jefe de los cuarenta y ocho Maruts que rodean el carro de Indra. –Véase: Prometeo.]
* Materia.- Espíritu y Materia son dos polos o aspectos bajo los cuales se manifiesta el Logos. Como Ser absoluto que es, la Divinidad suprema, es a la vez Espíritu y Materia. La Materia es la Madre del mundo, así como el Espíritu es el Padre. La vida del Logos aparece como Espíritu; su Mâyâ, como Materia. (A. Besant, Sabid. Antig., 364). En otros términos: la naturaleza inferior del Logos, la material, es origen o matriz de todos los seres, mientras que su naturaleza superior, la espiritual, es el vital Elemento que los anima y sostiene: “Todos los seres que vienen a la existencia, sean animado o inanimados, son producto de la unión de la Materia con el Espíritu”. (Bhagavad-Gîtâ, XIII, 26). La Materia, por lo tanto, es eterna, increada e indestructible, mientras que las formas de la misma, que constituyen el mundo de Mâyâ o de ilusión, son creadas, transitorias y cambiantes; no son permanentes ni tienen verdadera realidad. En el universo manifestado no hay materia muerta. La Materia es viva, y así podemos afirmar que “no hay fuerza sin materia, ni materia sin fuerza”; una y otra están unidas en indisoluble maridaje. Se halla en contínuo movimiento, tomando forma bajo cada estremecimiento o vibración de vida y adaptándose a cada cambio de movimiento. (Sabiduría Antigua, 55, 142). La actividad esencial de la Materia consiste en su naturaleza receptiva. Al recibir impulsos de vida, se organiza en formas, y éstas se mantienen gracias a tales impulsos, mientras que se disgregan en cuanto cesa dicha influencia. (Id., 366). La Materia es también el factor indispensable, la base o vehículo necesario, una condición sine qua non para la manifestación de las fuerzas o agentes físicos (luz, calor, electricidad, etc.) en el plano físico. (Doctr. Secr., I, 536). –La Materia ofrece diversos grados de densidad segun sea el plano o subplano al que corresponda. Su grado de vitalidad es asimismo muy diverso. Así, la materia del plano mental es mucho más sutil que la del plano astral, y ésta, a su vez, lo es mucho más que la del plano físico. Por esta razón, la una atraviesa y penetra fácilmente a la otra. En el plano físico vemos diferentes estados de materia: sólido, líquido y gaseoso, pero investigando más profundamente, encontramos un cuarto estado, el etéreo, que a su vez existe en cuatro estados perfectamente definidos como los de sólido, líquido y gaseoso. (Sabid. Ant., 57-58).
Segun la filosofía Sânkhya, el Prakriti o Pradhâna es la Materia primaria, caótica o inmanifestada, raíz de la Materia y causa material del universo. Opuestamente al Purucha (Espíritu), que es simple, el Prakriti es una substancia compuesta constituída por los tres gunas (modos o cualidades), denominados respectivamente sattva, rajas y tamas, que no son meros accidentes de la Materia, sino que son de su misma naturaleza y entran en su composición, como los ingredientes que integran un producto. Los tres gunas se hallan únicamente difundidos en la naturaleza material; existen en toda las criaturas determinando el carácter o condición individual, por la proporción en que se hallan reunidos en cada uno de los seres. (Véase: Gunas). –El Prakriti es un principio ilimitado, universal, la materia cósmica, que se presenta como una masa sutil, informe, sin diferenciación o manifestación alguna. Pero, gracias a su incesante actividad y a su potencia productora, es la causa material de los diferentes desarrollos, manifestaciones, formas o productos de la Materia. Así, pues, la Materia se presenta en dos estados distintos: 1) Materia indiferenciada, inmanifestada, caótica, informe, raíz o esencia de la Materia (Mûlaprakriti), eterna causa material del universo físico, y 2) Materia diferenciada o manifestada, que constituye las innumerables formas o diferenciaciones materiales accidentales o transitorias de la masa de Materia caótica o indiferenciada, formas que, después de una existencia más larga o más breve, se destruyen desvaneciéndose en el océano de materia informe o caótica de donde procedieron. El Prakriti es inconsciente, y toda su actividad se emplea exclusivamente en favor y provecho del Purucha, para su experiencia y para así conducirle al conocimiento de sí mismo. La asociación del Espíritu y la Materia se ha comparado con la alianza entre un paralítico (el consciente y a la par inactivo Purucha) y un ciego (el inconsciente pero activo Prakriti). Si el ciego lleva a cuestas a su paralítico guía, pueden los dos juntos llegar al término de su peregrinación. –No se confunda la Materia con la Substancia. (Véase esta palabra). –Véase también: Purucha, Prakriti y Mûlaprakriti.
* Materialista.- No lo es necesariamente sólo aquel que no cree ni en Dios ni en el alma, ni en la supervivencia de esta última, sino que también lo es toda persona que materializa lo puramente espiritual; aquellos que creen en una divinidad antropomórfica, en un alma capaz de arder en el fuego del infierno, en un infierno y un cielo como localidades, en lugar de estados de conciencia. Los “substancialistas” americanos, que constituyen una secta cristiana, son materialistas, como los son asimismo los “espiritualistas”. (Glosario de la Clave de la Teosofía).
Materializaciones.- En espiritismo, esta palabra significa la aparición objetiva de los llamados “espíritus” de los muertos, que en ciertas ocasiones se revisten de materia; esto es, se forman para sí mismos, utilizando los materiales que tienen a mano; que se encuentran en la atmósfera, y las emanaciones de los circunstantes, un cuerpo temporal que tiene el parecido humano del difunto cuando estaba vivo. Los teósofos aceptan el fenómeno de la “materialización”, pero rechazan la teoría de que ésta sea producida por “Espíritus”, esto es, los principios inmortales de personas desencarnadas. Creen los teósofos que cuando el fenómeno es verdadero y genuino –lo cual es un hecho más raro de lo que generalmente se cree- es producido por las larvas, formas astrales (eidola), “fantasmas” kâmalókicos de las personalidades muertas. (Véase: Kâmadhâtu, Kâmaloka y Kâmarûpa). –Como quiera que el Kâmaloka se halla en el plano terrestre y difiere del grado de materialidad de éste sólo en el grado de su plano de conciencia, razón por la que está oculto a nuestra vista normal, la aparición fortuita de tales cascarones es tan natural como la de los globos eléctricos y otros fenómenos atmosféricos. La electricidad, como materia fluída o atómica (puesto que los ocultistas sostienen con Maxwell que es atómica), aunque invisible, existe siempre en el aire y se manifiesta bajo diversas formas, pero sólo cuando existen ciertas condiciones para “materializar” el fluído, cuando pasa de su propio plano al nuestro y se hace objetivo. Una cosa parecida acontece con las formas astrales de los muertos. Están presentes a nuestro alrededor, pero hallándose en otro plano, ellas no nos ven, como nosotros tampoco las vemos a ellas. Pero siempre que los vehementes deseos de personas vivas, y las condiciones suministradas por las constituciones anormales de los médium se combinan entre sí, estas formas astrales son atraídas, o mejor dicho, arrancadas de su plano para caer en el nuestro, y se hacen objetivas. Esto es nigromancia; ningun bien hace a los muertos, y si grave daño a los vivos, además de que se opone a una de la leyes de la Naturaleza. La materialización eventual de los “cuerpos astrales” o duplicados de personas vivas es una cuestión enteramente distinta. Estos “astrales” muchas veces se toman equivocadamente por apariciones de muertos, puesto que, a semejanza del camaleón, nuestro propios “elementarios”, lo mismo que los de los “elementales” desencarnados y cósmicos, adoptan a menudo la apariencia de aquellas imágenes que con mayor fuerza tenemos en el pensamiento. En una palabra: en las sesiones llamadas de “materialización”, las personas presentes y el médium son lo que crean la semejanza especial de las apariciones. Las “apariciones” independientes pertenecen a otra clase de fenómenos psíquicos. Las materializaciones se han designado también con los nombres de “manifestaciones de forma” y “estatuas-retratos”. Llamaralas “espíritus materializados” es inadmisible, porque, en realidad, no son espíritus, sino estatuas-retratos.
* Math (Celta).- La Naturaleza.
Mathâdhipatis (Sánscrito).- Jefes o cabezas de varias fraternidades religiosas de la India, grandes sacerdotes de los monasterios.
* Mathana (Sánscrito).- Agitación, rotación. Como adjetivo: aflictivo, dañino, destructor.
* Mati (Sánscrito).- Opinión, creencia, parecer, sentencia, pensamiento, juicio, concepto, inteligencia, mente; determinación, consideración, estimación, propósito; meditación, devoción, culto, voto. –Véase: Deona.
* Matkarmakrit (Sánscrito).- Que practica obras por mí o en honor mío. (Bhagavad-Gîtâ).
* Matpara (Sánscrito).- Que hace de mí su meta o fin supremo, o el objeto de sus aspiraciones; consagrado, devoto o entregado a mí; consagrado sólo a mí; entregado por completo a mí; que piensa sólo en mí; que tiene el corazón dirigido a mí; que me mira como lo supremo; que me tiene por su principal objeto; atento sólo a mí. (Bhagavad-Gîtâ).
* Matparama (Sánscrito).- Igual significado que matpara.
* Matparâyana (Sánscrito).- Que me tiene o considera como su fin, meta u objeto supremo; que hace de mí el objeto de sus anhelos o aspiraciones; que está enteramente lleno o penetrado de mí; devoto, atento o consagrado a mí. (Bhagavad-Gîtâ).
Mâtra (Matrâ) (Sánscrito).- Brevísimo período de tiempo, aplicado a la duración de los sonidos, y equivalente a un abrir y cerrar de ojos. [Medida en general, límite, cantidad, tamaño, duración, medida del verso, pequeña cantidad; un poco, un momento; átomo, partícula; materia, elemento, instrumento. –Mâtra significa también “manifestación”. Los tres mâtras son: el Adhi-bhûta, Adhi-daiva y Adhi-yajña, que son equivalentes al Âtma-Buddhi-Manas de los vedantinos. (P. Hoult). –Al fin de una palabra compuesta, significa: solo, puro, simple. –Véase: Mâtrâ.]
Mâtrâ (Sánscrito).- La cantidad de una sílaba sánscrita. [Materia, elemento, medida, límite, cantidad, tamaño, duración; partícula, átomo. –Véase: Mâtra.]
* Mâtrâsparza (Sánscrito).- Contacto material; choque o encuentro de elementos materiales.
* Mâtri (Sánscrito).- Madre. En sentido figurado: la tierra; la vaca.
Mâtris (Sánscrito).- “Madres”; las madres divinas. Son en número de siete. Son los poderes y aspectos femeninos de los dioses [como Brahmânî, de Brahmâ; Vaichnavî, de Vichnu; Aindrî o Indrâni, de Indra, etc.]
* Matrices (Alquimia).- Los vehículos de las cosas, bases elementarias. (F. Hartmann).
* Mâtrikâ (Sánscrito).- El Abhidharma o tercera parte del Tripitaka de los budistas.
* Mâtripadma (Sánscrito).- La madre-loto; la matriz de la Naturaleza.
Matronethah (Hebreo, Caldeo).- Lo mismo que Malkuth o Malcuth el décimo Sephira. Literalmente: Matrona es la “madre inferior”.
* Matsanstha (Sánscrito).- Que está, vive o descansa en mí; que está unido a mí; que está concentrado en mí. (Bhagavad-Gîtâ).
* Matsara (Sánscrito).- Envidioso, celoso; envidia, celos. Uno de los seis pecados o pasiones capitales.
* Mâtsara o Matsarin (Sánscrito).- Envidioso, celoso.
* Matstha (Sánscrito).- Que está, vive o reside en mí. (Bhagavad-Gîtâ).
Matsya (Sánscrito).- “Pez”. El Matsya avatar fue la primera de las encarnaciones de Vichnú. [Es también un nombre geográfico.]
Matsya-Purâna (Sánscrito).- Uno de los Purânas que trata de la encarnación o avatar de Vichnú en forma de pez.
* Matsyodarî (Sánscrito).- Epíteto de Satyavatî, madre de Vyâsa, que fue encontrada en el vientre (udara) de un pez.
* Matta (Sánscrito).- Ebrio, furioso, frenético, loco, insensato.
* Mattâ (Sánscrito).- Bebida embriagante.
* Mauhûrta o Mauhûrtika (Sánscrito).- Astrólogo.
* Maula (Sánscrito).- Voz derivada de mûla (raíz): radical. De raza pura, de origen noble.
* Maulî (Sánscrito).- La tierra.
* Mauna (Sánscrito).- Derivado de Muni. –La condición de un muni; el silencio.
* Mauna-vrata (Sánscrito).- Literalmente: “voto del muni”. Voto de silencio.
* Maunin (Sánscrito).- Silencioso; asceta; que practica el silencio.
* Maya (Sánscrito).- Maya, Maia y María forman un nombre genérico. (Véase: María y Maia). Maya es también el nombre de un asura, mago por excelencia, de quien se sirvieron los dioses para diversos fines, tales como la edificación de ciudades aéreas y otros hechos portentosos de que hace mención el Bhâgavata-Purâna.
Mâyâ (Sánscrito).- Ilusión. El poder cósmico que hace posibles la existencia fenomenal y las percepciones de la misma. Segun la filosofía inda, sólo aquello que es inmutable y eterno merece el nombre de realidad; todo aquello que está sujeto a cambio por decaimiento y diferenciación, y que, por lo tanto tiene principio y fin, es considerado como mâya: ilusión. [Mâyâ: Arte, poder o virtud mágica extraordinaria o prodigiosa; prestigio, magia, ilusión, ficción; poder de ilusión que origina la aparición ilusoria de las cosas mundanas. La ilusión personificada como un ser de origen celeste; la personificación de la irrealidad de las cosas mundanas; el universo objetivo o la naturaleza considerada como una ilusión. –El poder ilusionante, la mágica potencia del pensamiento, capaz de crear formas pasajeras o ilusorias, y por el que tiene existencia el mundo fenomenal. La potencia creadora mediante la cual el universo llega a la manifestación. –Segun la filosofía vedânta, todo el universo visible no es más que una grande ilusión (mahâ-mâyâ), puesto que tiene principio y fin y está sujeto a incesantes cambios; así como la única realidad es el Espíritu, por ser eterno e inmutable. –Véase: María.]
* Mâyâkâra (Sánscrito).- Mago; actor.
* Mâyâmaya (Sánscrito).- Mágico. Un hecho o manifestación en que hay prestigio o ilusión; ilusión creadora o mágica.
Mâyâ-moha (Sánscrito).- [“Confusión o engaño causado por la ilusión”.] Una forma ilusoria adoptada por Vichnú con el objeto de alucinar a unos ascetas daityas que, por sus grandes austeridades, habían llegado a un excesivo grado de santidad, y por lo mismo se habían hecho demasiado peligrosos por su poder, como dice el Vichnu-Purâna.
* Mâyântika (Sánscrito).- Mágico, que produce ilusión.
* Mâyâvat (Sánscrito).- Mágico, ilusorio. Sobrenombre de Kansa.
* Mâyâvi o Mâyâvin (Sánscrito).- Mago, charlatán.
* Mayâvico.- Palabra castellanizada que deriva del sánscrito mâyâ, y equivale a “ilusorio”.
Mayávico, Upadhi.- Véase: Upadhi mayávico.
Mâyâvi-rûpa (Sánscrito).- “Forma ilusoria”, el “doble”, en filosofía esotérica; doppelgänger o perisprit, en alemán y francés respectivamente. [Cuerpo o forma de ilusión; el cuerpo del plano mental inferior. –Un vehículo o envoltura artificial formado de elementos mentales y astrales mediante un ejercicio de voluntad de un Adepto (esto es, por medio del Kriyâzakti), con el objeto de funcionar en dichos dos mundos o planos. (P. Hoult). En otros términos, segun se expresa Mrs. A. Besant: Cuerpo mental o ilusorio dispuesto para funcionar de un modo independiente en el mundo mental inferior, y del cual se sirve el chela, libre temporalmente de su envoltura física. (Sabid. Ant., 150). Este cuerpo es susceptible de trasladarse a grandes distancias en plena conciencia.]
* Mâyâ-yoga (Sánscrito).- El yoga de ilusión o magia. (P. Hoult).
* Mâyâ-zakti (Sánscrito).- Potencia o fuerza ilusoria.
* Mâyin (Sánscrito).- Mago; que alucina o causa ilusión.
* Mazda (Zendo).- Véase: Ahura-Mazda.
* Mazdeísmo.- Sistema religioso del Zend-Avesta, la antigua religión de los parsis, y cuyo origen, aunque posterior al del indoísmo, se remonta a la noche de los tiempos, pues los historiadores griegos asignan a las enseñanzas de Zarathustra (o Zoroastro) unos 9.000 años antes de nuestra era, siendo muy probable que su antigüedad sea aun mucho mayor. Es la segunda de las religiones salidas del tronco ario. En ella, el Fuego es símbolo del Dios supremo, emblema de la Vida divina, y por lo tanto, el símbolo sagrado que más veneran los mazdeístas. El Ser supremo es Ahura-Mazda, “trino delante de las otras criaturas”, lo supremo, lo universal, omnipresente, origen y fuente de vida y creador del mundo. Ahura-Mazda, a su vez, surgió de Zeroana Akerna, el Tiempo sin límites, o la Causa desconocida. Siguen después las jerarquías de las Inteligencias celestes, dirigidas por los siete grandes Espíritus, los Ameshaspentas, los siete dioses o arcángeles presidentes. “Pensamientos puros, palabras puras y obras puras”: he aquí el famoso axioma de la religión de los parsis. “La pureza es el mejor de los bienes”, dice también uno de sus libros sagrados. –Para más detalles, véase: Annie Besant, Cuatro grandes Religiones.
Mazdeísta.- Voz derivada de (Ahura) Mazda. (Véase: Spiegel, Yasna, I). –Los mazdeístas eran los antiguos noble persas que adoraban a Ormuzd, y rechazando las imágenes, inspiraron a los judíos el mismo horror a toda representación concreta de la Divinidad. Parece que en tiempo de Herodoto fueron sustituídos por los que profesaban la religión de los magos. Los parsis y guebros (geberim, hombres poderosos, del Génesis, VI y X, 8) parecen ser los religionarios magos. [Véase: Isis sin velo, I, XXXVI.]
Mazdiasniano.- Zoroastriano. Literalmente: “que adora a Dios”.
M’bul (Hebreo).- Las “aguas del diluvio”. Esotéricamente, las emisiones periódicas de impurezas astrales sobre la tierra; períodos de iniquidades y crímenes psíquicos, o de cataclismos morales que se presentan de un modo regular.
* Mecha (Mesha) (Sánscrito).- Primer signo del Zodíaco indo, correspondiente a nuestro Aries.
* Medha (Sánscrito).- Sacrificio, inmolación.
* Medhâ (Sánscrito).- Inteligencia, conocimiento, sabiduría, sagacidad; premio, recompensa.
* Medhâvin (Sánscrito).- Inteligente, sagaz, sabio.
Media luna.- Sin era el nombre asirio de la luna, y Sin-ai el Monte, el lugar de nacimiento de Osiris, de Dionysos, Baco y varios otros dioses. Segun Rawlinson, la luna era tenida en más alta estima que el sol en Babilonia, por la razón de que las tinieblas precedieron a la luz. La media luna era, por lo tanto, un símbolo sagrado en casi todas las naciones antes de que llegara a ser la enseña de los turcos. Como dice el autor de Creencia egipcia: “La media luna … no es esencialmente una insignia mahometana. Por el contrario, era una insignia cristiana, derivada, a través del Asia, de la Astarté babilónica, Reina del cielo, o de la Isis egipcia … cuyo emblema era la media luna. El greco-cristiano Imperio de Constantinopla tenía dicha insignia como su paladión. A raíz de la conquista de los turcos, el sultán mahometano la adoptó como símbolo de su poder. Desde entonces, la media luna se ha tomado para contraponerla a la idea de la cruz”.
Medinî (Sánscrito).- La tierra; así llamada de la médula (meda) de los demonios [denominados Kaitabha y Madhu.] Estos monstruos, saliendo del oído de Vichnú mientras éste dormía, se aprestaban para dar muerte a Brahmâ, que estaba echado en el loto que nace del ombligo de Vichnú, cuando se despertó el dios conservador y dió muerte a ellos. Sus cuerpos, arrojados al mar, produjeron tanta cantidad de grasa y médula, que Nârâyana la utilizó para formar con ella la tierra.
* Meditación.- La inexplicable y ardiente aspiración del hombre interior a lo Infinito. (H. P. Blavatsky). –En los Aforismos de Patañjali se define así: “Meditación (dhyâna) es la contínua y prolongada corriente de pensamiento dirigida a un objeto determinado hasta llegar a absorberse en él”. Es una de las principales prácticas del Râja-yoga, y sus resultados son de grandísima trascendencia, como se puede juzgar por estas palabras de Mrs. Annie Besant referentes a la disciplina a que debe someterse el chela: “El aspirante se habrá adiestrado en la meditación, y esta práctica eficaz fuera del cuerpo físico habrá avivado y puesto en activo ejercicio muchas de las facultades superiores. Durante la meditación habrá llegado a más altas regiones de la existencia, aprendiendo más de la vida del plano mental. Se le enseñará a utilizar sus crecientes poderes en servicio de la humanidad, y durante muchas de las horas del sueño del cuerpo habrá trabajado con ahinco en el plano astral ayudando a las almas que la muerte ha llevado allí, aportando refrigerio a las vícitimas de accidentes, enseñando a aquellos que están menos instruídos que él y ayudando de mil modos a los que necesitan de su auxilio. De esta suerte, y segun sus humildes medios, toma parte en la benéfica obra de los Maestros, asociado a la sublime Fraternidad como colaborador en un grado por mínimo que sea”. Sabiduría Antigua, 399-400). –Véase: Dhyâna.
* Medium.- Es un ser diametralmente opuesto al Adepto. El médium es un instrumento pasivo de influencias extrañas; mientras que el Adepto ejerce de un modo activo su poder sobre sí mismo y sobre todas las potencias inferiores. (Isis sin velo, II, 588). En la mediumnidad, el sujeto, por ser pasivo, está expuesto a la influencia de cualquier entidad astral que se halle en sus inmediaciones. De ordinario es inconsciente; nada sabe de lo que se hace por mediación de su organismo, ni quien lo hace, ni recuerda nada de ello al despertar de su especie de ensueño. Su estado es el de una verdadera obsesión. Por otra parte, los mejores médium físicos son personas enfermizas, neuróticas, histero-epilépticas, o, lo que aun es peor, propensas a algun vicio anormal. La mediumnidad, tal como se practica en nuestros días, es un don todavía menos deseable que la túnica de Neso. (Obr. cit., I, 488-489). –Véase: Mediumnidad.
Mediumnidad o Madiumismo.- Palabra ahora admitida para designar aquel estado anormal psicofisiológico que lleva a una persona a considerar como realidades las fantasías de su imaginación, así como sus alucinaciones reales o artificiales. Ninguna persona enteramente sana en los planos fisiológico y psíquico puede jamás ser médium. Lo que los médium ven, oyen y sienten es “real”, pero no verdadero; proviene, o bien del plano astral, tan engañoso en sus vibraciones y sugestiones, o bien de puras alucinaciones, que no tienen existencia real sino para quien las percibe. La “mediumnidad” es una especie de vulgarizada cualidad de mediador, en la que aquel que padece dicha facultad se supone que se convierte en un agente de comunicación entre un hombre vivo y un “Espíritu” desencarnado. Hay verdaderos métodos para producir el desarrollo de esta facultad tan poco envidiable. (Glosario de la Clave de la Teosofía.) -Véase: Médium.
Megacosmo (Griego).- El mundo de la Luz astral, o segun lo expresa con embrollados términos un masón, es “un gran mundo, no idéntico al Macrocosmo, el universo, sino algo entre éste y el Microcosmo, el pequeño mundo”, o sea el hombre.
* Megha (Sánscrito).- Nube. Nombre de un demonio.
* Meghadvâra (Sánscrito).- La atmósfera.
* Meghavâhana (Sánscrito).- Llevado sobre una nube; un dios (Indra, Ziva, etc.).
* Meghavanhi (Sánscrito).- El fuego de las nubes, el rayo.
Mehen (Egipcio).- Segun los mitos populares, es la gran serpiente que representa la parte inferior de la atmósfera. En Ocultismo, es el mundo de la Luz astral, llamada simbólicamente la Serpiente y el Dragón cósmico. (Véanse las obras de Eliphas Levi, que denominó a esta Luz Serpiente del Mal y con otros nombres, atribuyéndole todas las malas influencias en la tierra. [Segun P. Perret, Mehen es la serpiente mitológica que figura en el hemisferio inferior, y que parece simbolizar las sinuosidades del curso del sol nocturno. (Dict. D’ Arch. Egypt.).
* Mehour o Mehur (Egipcio).- “La gran plenitud”; personificación del Espacio, nombre con que se designa el principio femenino de la Divinidad. (Pierret, Dict. D’Arch. Egypt.).
* Mela (Sánscrito).- Reunión, asamblea.
Melekh (Hebreo).- Literalmente, “Rey”. Un título del Sephira Tiphereth, la V, o vau del Tetragrammaton –el hijo del Microprosopo (la Faz menor).
Melhas (Sánscrito).- Una clase de dioses del fuego, o Salamandras.
* Melosinæ (Cábala).- Espíritus elementales del agua, que aparecen ordinariamente en figura de mujer, pero que pueden asimismo tomar la forma de peces o serpientes. Tienen alma, pero no principio espiritual; sin embargo, pueden adquirirlo entrando en unión con el hombre. (El cuarto principio uniéndose con el quinto.) La forma humana es su verdadera forma; sus formas animales las toman prestadas. Son designadas igualmente con el nombre de Ondinas. (F. Hartmann).
* Memoria.- Por memoria en general se entiende la facultad mental de recordar o retener el conocimiento de los pensamientos, actos y sucesos pasados; la facultad de reproducir impresiones anteriores mediante una asociación de ideas sugeridas principalmente por cosas objetivas o por alguna acción sobre nuestros órganos sensoriales externos. Esta facultad depende por completo del funcionamiento más o menos sano o normal de nuestro cerebro físico. Pero memoria es un nombre genérico, además de la memoria en general, tenemos: 1) La recordación (remembrance); 2) lo que los ingleses llaman recollection, y talvez podríamos traducir como retentiva, y la 3) la reminiscencia. La recordación y la retentiva son los atributos y auxiliares de la memoria en general. La reminiscencia es una cosa enteramente distinta; los ocultistas y teósofos la definen diciendo que es «la memoria del alma», y, por lo tanto, no es física ni pasajera, ni depende de las condiciones fisiológicas del cerebro. La reminiscencia da al hombre la certeza de haber vivido antes y de tener que vivir de nuevo. En efecto, como dice Wordsworth: «Nuestro nacimiento es sólo un sueño y un olvido; el alma que surge con nosotros, la estrella de nuestra vida, tuvo en otra parte su ocaso, y viene de lejos». (Clave de la Teosofía, págs. 124 y siguientes.) Por lo antes expuesto se explica el hecho de perder el hombre la memoria de sus existencias anteriores. Los antiguos griegos lo explicaban por medio de la ingeniosa alegoría del río Leteo, o río del olvido, cuyas tranquilas y silenciosas aguas tenían la virtud de hacer olvidar lo pasado. Lo que desaparece realmente es la memoria física o cerebral, que dura sólo el tiempo de una existencia o de parte de ella, pero queda la reminiscencia, el reflejo de los hechos pasados en la memoria del alma, como el perfume que deja una flor, reminiscencia muy vaga y aun del todo latente en la inmensa mayoría de las personas, pero que en determinadas condiciones (sonambulismo, éxtasis, etc.) se despierta como recuerdo vivísimo; hasta el punto que el hombre que ha llegado a una de las etapas superiores de la evolución se da cuenta clara y puntual de la dilatada serie de sus vidas pasadas.
Memrab (Hebreo).- En la cábala, es «la voz de la voluntad»; esto es, las fuerzas colectivas de la naturaleza en actividad, conocidas con el nombre de «Palabra», o Logos por los cabalistas judíos.
Mendaítas [Mandaítas o Mandeanos].- Llamados también sabeos y cristianos de San Juan. Esta última denominación es incorrecta porque, segun todas las declaraciones, y aun las propias, nada absolutamente tienen ellos que ver con el cristianismo, al cual abominan. La moderna secta de los mendaítas se halla extensamente difundida por el Asia Menor y en otras partes, y varios orientalistas creen con razón que es un directo resto sobreviviente de los gnósticos. Porque, segun se explica en el Dictionnaire des Apocryphes del abate Migne (artículo «Le Code Mazarean«, vulgarmente llamado Livre d’Adam), dicha palabra (que en francés se escribe Mandaïtes, nombre que ellos pronuncian Mandai), significa propiamente ciencia, conocimiento o gnosis. Así, pues, mendaítas son equivalentes a gnósticos (loc. Cit., nota pág. 3). Segun expresa la obra antes mencionada, aunque numerosos viajeros han hablado de una secta cuyos nombres son conocidos con los diversos nombres de sabeos, cristianos de San Juan y mendaítas, y que se hallan esparcidos en los alrededores de Schat-Etarab, en la confluencia del Tigris y el Eufrates (principalmente en Basora, Hoveiza, Korna, etc.), Norberg fue el primero que indicó una tribu perteneciente a la misma secta establecida en Siria, y que es la más interesante de todas. Esta tribu, compuesta de 14.000 o 15.000 miembros, reside a cosa de una jornada de distancia al Este del Monte Líbano, principalmente en Elmerkah (Lata-Kich). Titúlanse indistintamente nazarenos y galileos, por cuanto originariamente llegaron a Siria procedentes de Galilea. Pretenden que su religión es la misma que la de San Juan Bautista, y que no ha cambiado ni un ápice desde el tiempo de este santo. En los días festivos se visten de piel de camello, duermen sobre piel de camello y comen langostas y miel, como hacía su «Padre, San Juan Bautista». No obstante, llamaron a Jesu-Cristo impostor, falso Mesías y Nebso (o sea el planeta Mercurio en su parte maligna), y le presentan como un producto del Espíritu de los «siete mal dispuestos estelares» (o planetas). -Véase: Codex Nazarœus, que es su Escritura. [Véase también: Sistema bordesiano.]
Mendes (Griego).- Nombre del demonio cabrío que la Iglesia de Roma suponía haber sido adorado por los templarios y otros masones. Pero esta res cabría era un mito creado por la mala fantasía del odium theologicum. Nunca ha existido semejante criatura, ni su culto fue jamás conocido entre los templarios ni sus predecesores, los gnósticos. El dios de Mendes, o el Mendesio griego, nombre que se daba al Bajo Egipto en los tiempos precristianos, era Ammón, el dios de cabeza de carnero, el viviente y santo espíritu de Ra, el sol dador de vida; y esto condujo a ciertos autores griegos al error de afirmar que los egipcios llamaban Mendes a la «res cabría» misma (o sea al dios de cabeza de carnero). Ammón fue, por espacio de siglos, la principal divinidad de Egipto, el dios supremo; Ammon-Ra, el «dios oculto» o Amen (el oculto), el Engendrado de sí mismo, que es «su propio padre y su propio hijo». Esotéricamente, era Pan, el dios de la Naturaleza, o la Naturaleza personificada, y probablemente el pie hendido de Pan, el de pie de cabra, contribuyó a producir el error de que dicho dios era una res cabría. Como quiera que el altar de Ammón se hallaba situado en Pa-bi-neb-tat, «la morada de Tat o del Espíritu, Señor de Tat» (Rindedi, en las inscripciones asirias), los griegos adulteraron primero este nombre convirtiéndolo en Bendes y más tarde en Mendes, derivado de «Mendesio». Semejante «error» sirvió para ciertos designios eclesiásticos demasiado bien para ser apropiado, aun después de reconocido.
* Menes (Egipcio).- Nombre egipcio de la mente, mens en latín. (Doctrina Secreta, II, 95).
Mensa Isíaca.- Véase: Tablilla de Bembo.
Mensambulismo (Del latín mensa, mesa).- Palabra inventada por ciertos cabalístas franceses para designar el fenómeno de las «mesas giratorias».
* Mental, cuerpo.- Véase: Cuerpo mental.
* Mente.- Es la energía del Manas (el Pensador) que obra dentro de las limitaciones del cerebro físico. (A. Besant, Sabiduría Antigua, 107.) -Véase: Manas.
Mente demiúrgica.- Lo mismo que «Mente universal», Mahat, primer «productor» de Brahmâ, o este mismo.
* Menyw o Menyu (Celta).- Es sin disputa alguna el equivalente del Adam Kadmon de la Cábala, del Manú-Svâyambhuva de la India. Lo mismo que estos dos, Menyw es testigo de la creación, y de ahí su sobrenombre de Hijo de los Tres Gritos, de las Tres Voces, de las Tres Exclamaciones: es el Logos. (E. Bally).
Meracha phath (Hebreo).- Término aplicado al «aliento» del Espíritu divino en el acto de cernerse sobre las aguas del espacio antes de la creación. (Véase: Siphra Dzeniutha).
Mercavah o Mercabah (Caldeo).- Un carro. Dicen los cabalistas que el Ser supremo, después de haber establecido los diez Sephiroth [que en su totalidad son Adam Kadmon, el Hombre arquetipo o celeste], los utilizó a guisa de carro o trono de gloria para descender con él sobre las almas de los hombres. [Los rabinos judíos daban a su serie religiosa secular el nombre de Mercavah (el cuerpo exterior, «el vehículo», o la cubierta que encierra el alma oculta, esto es, su ciencia secreta más elevada). –Clave de la Teosofía, 8.]
Merodach (Caldeo).- Dios de Babilonia, el Bel de tiempos posteriores. Es hijo de Davkina, diosa de las religiones inferiores, o la tierra, y de Hea, dios de los mares y del Hades, entre los orientalistas. Pero, esotéricamente y entre los accadios, es el Gran Dios de Sabiduría, «el que resucita los muertos». Hea, Ea, Dragón u Oannes y Merodach son uno solo.
Merú (Sánscrito).- Nombre de una supuesta montaña del centro (u «ombligo) de la tierra, en donde está situado el Svarga, el Olimpo de los indos. Contiene las «ciudades» de los más grandes dioses y las mansiones de varios devas. Geográficamente considerada, es una montaña desconocida situada al norte de los Himalayas. Segun la tradición, el Merú era la «Región de Bienaventuranza» de los primitivos tiempos védicos. Se les designa igualmente con los nombres de Hemâdri (la «Montaña de Oro»), Ratnasânu («Cima de piedra preciosa»), Karnikâchala («Montaña de loto»), Amarâdri y Devaparvata («Montaña de los dioses»). Las enseñanzas ocultas colocan dicho monte en mismo centro del Polo Norte, e indican que era el sitio del primer continente de nuestra tierra, después de la solidificación del globo. [El Meru o Su-meru es una simbólica montaña elevadísima, stiuada en el mismo centro de la tierra, esto es, en el centro del Jambu-dvîpa (India o continente indo), que a su vez se halla en medio de los otros seis continentes. La cima de este monte está en el cielo, su parte media en la tierra, y su base en los infiernos. En su cumbre está situada la Ciudad de Brahmâ o Mansión de bienaventuranza. -El Merú no es una montaña de tierra como las que vemos en la superficie de nuestro globo. Es la línea divisoria que separa la atmósfera terrestre del aire superior, esto es, del éter puro; o, usando nuestra terminología, el Merú es el círculo que limita el Prâna terrestre. Del lado hacia acá, el círculo es nuestro planeta, con su atmósfera; del lado hacia allá, es el Prâna celeste, la mansión de los dioses. El sabio Vyâsa describe el Bhûrloka (la tierra) como extendiéndose desde el nivel del mar hasta la parte de atrás del Merú. En la faz de la llamada montaña viven los seres celestiales y, por lo tanto, el límite de la tierra es su espalda. Esta línea es denominada montaña (parvata, achala), a causa de su posición fija e inmutable. (Râma Prasâd).]
* Meru-danda (Sánscrito).- Nombre dado simbólicamente a la espina dorsal. (Uttara-Gîtâ, II, 13, 14).
Meshia y Meshiana (Zendo).- El Adán y Eva de los zoroastrianos, segun el primitivo sistema persa; la primera pareja humana.
Mesmer, Federico-Antonio.- Famoso médico que redescubrió y aplicó prácticamente al hombre aquel fluído magnético que fue designado con el nombre de «magnetismo animal», y desde entonces «Mesmerismo». Nació en Schwaben, en 1734, y murio en 1815. Era miembro iniciado en la Fraternidad de los Fatres Lucis [Hermanos de la Luz] y de Lukshoor (o Luxor), o la rama egipcia de esta última. El Consejo de «Luxor» le eligió -con arreglo a las órdenes de la «Gran Fraternidad»- para actuar en el siglo XVIII como un explorador usual, enviado en el último cuarto de cada siglo para instruir en la ciencia oculta una pequeña parte de las naciones occidentales. El conde de Saint Germain inspeccionó el desarrollo de los acontecimientos en este caso; y más tarde Cagliostro fue comisionado para prestar su concurso, pero habiendo cometido una serie de desaciertos más o menos fatales, fue destituído de su cargo. De estos tres personajes, que al principio fueron considerados como charlatanes, Mesmer ya está vindicado. La justificación de los dos restantes seguirá en la próxima centuria. Mesmer fundó la «Orden la Armonía Universal», en 1783, en la que, segun era de suponer, sólo se enseñaba el magnetismo animal, pero en realidad se exponían las doctrinas de Hipócrates, los métodos de los antiguos Asclepieia, los Templos de curación y muchas otras ciencias ocultas.
* Mesmerismo.- Término derivado de Mesmer, que redescubrió la fuerza magnética y sus aplicaciones prácticas. Es una corriente vital que puede transmitir una persona a otra, y por cuyo medio se produce un estado anormal en el sistema nervioso, que permite ejercer una influencia directa sobre la mente y la voluntad del sujeto o persona mesmerizada. (Glosario de la Clave de la Teosofía). La referida corriente de Prâna es la energía vital que, especializada por el doble etéreo, emite el mesmerizador para restaurar a una persona débil y para curar las enfermedades. (Antig. Sabid., 64). –El mesmerismo, que en otro tiempo fue objeto de tan acerbas burlas, ha sido aceptado modernamente por la ciencia oficial, pero no sin cambiar antes su antiguo nombre por el de hipnotismo. (Véase: Magnetismo animal).
* Metafísica (Del griego meta, sobre, más allá, y phisica, las cosas del mundo material externo).- Traducir esta palabra en el sentido de “más allá de la naturaleza”, o sobrenatural, es olvidar el espíritu y atenerse a la letra muerta, puesto que es más bien fuera de lo natural, visible o concreto. La metafísica, en ontología y filosofía, es el término corriente para designar aquella ciencia que trata del ser real y permanente, en contraposición al ser irreal, ilusorio o fenomenal. (Glosario de la Clave de la Teosofía.) -La Metafísica se ha representado bajo la figura de una matrona, que, como reina de las ciencias, lleva un cetro en la mano; contempla un globo celeste adornado de estrellas; lleva una venda en los ojos, dispuesta de manera que, sin privarla de la luz de lo alto, le impide sólo mirar hacia abajo el globo de la tierra, sobre el cual está apoyada y que cubre en parte con su ropaje, para ocuparse sólo en contemplaciones más elevadas.
* Metamorfosis (Del griego metamorphosis).- Transformación de una persona o cosa en otra, o mudanza de una persona o cosa al pasar de un estado a otro distinto. La metamorfosis se expresa en egipcio con la palabra venir a ser, transformarse, y está simbolizada por el escarabajo, Khepra. Es un atributo divino, un privilegio prometido a los justos. En todos los capítulos del Libro de los Muertos, el difunto pide la facultad de revestir todas las formas que le plazcan. (P. Pierret, Dict. D’ Arch. Egypt.) -Véase: Metempsicosis.
Metatron (Hebreo).- El cabalístico “Príncipe de las Faces”, la inteligencia del primer Sephira, y el supuesto director de Moisés. Su numeración es el 314, lo mismo que el título de la Divinidad “Shaddai”, Todopoderoso. Es también el Angel del mundo de Briah y el que condujo a los israelitas a través del desierto y, por lo tanto, es lo mismo que el “Señor Dios” Jehovah. Dicho nombre se parece a la palabra griega metathronon o “cerca del trono”. (W.W.W.) -[Metatron es en griego ángelos (mensajero) o el Gran Instructor (Doctr. Secr., III, 388). –Este nombre se aplica igualmente al Hombre perfecto o divino. (Id., I, 362).]
Metempsícosis [Voz derivada del griego y que equivale a transmigración de las almas a otros cuerpos].- Es el progreso del alma desde un estado de existencia a otro. Vulgarmente se cree (y así está simbolizada) que la metempsícosis se refiere a renacimientos en cuerpos de animales. Es un término generalmente mal interpretado por todas las clases de la sociedad europea y americana, incluyendo a muchos hombres de ciencia. Metempsícosis debiera aplicarse sólo a los animales. El axioma cabalístico: “La piedra se convierte en planta, la planta en animal, el animal el hombre, el hombre en espíritu y el espíritu en Dios”, halla su explicación en el Mânava-Dharma-Zâstra y en otros libros brahmánicos. [La creencia de los egipcios en la transmigración del alma en los cuerpos de animales, atestiguada por Herodoto (II, 123), parece ser confirmada por los monumentos. Los capítulos LXXVI a LXXXVIII del Libro de los Muertos están consagrados a la transformación del hombre en gavilán, golondrina, serpiente, cocodrilo y hasta en loto. (Dict. D’Arch. Egypt.) -“¿No es muy natural –dice el autor del Diccionario filosófico– que todas las metamorfosis de que está cubierta la tierra hayan hecho imaginar, en el Oriente, que nuestras almas pasaban de un cuerpo a otro? Un punto casi imperceptible se convierte en gusano, este gusano se convierte en mariposa; una bellota se transforma en una encina, un huevo en ave; la madera se cambia en fuego y en ceniza; todo, en fin, parece metamorfoseado en la Naturaleza. La idea de la metempsícosis es quizás el más antiguo dogma del universo conocido”. (Véase: Metamorfosis, Reencarnación, etc.).
Metis (Griego).- Sabiduría. La teología griega asociaba Metis (Sabiduría divina) con Eros (amor divino). Dicha palabra –como se dice también- formaba parte de la divinidad de los templarios, o sea el ídolo Baphomet, que algunos autores de nota derivan de Baphe, bautismo, y Metis, sabiduría; mientras que otros dicen que el ídolo en cuestión representaba los dos maestros a quienes los templarios negaban por igual, a saber: el Papa y Mahoma. (W.W.W.).
* Microcosmo o Microcosmos (Del griego mikrós, pequeño, y Kosmos, mundo).- El hombre que es un compendio y trasunto fiel del universo o macrocosmo. El pequeño universo, entendiendo por ésta palabra el hombre, hecho a imagen de su Creador, el Macrocosmo, o gran universo, y conteniendo todo cuanto este último contiene. Ambos términos se emplean en Ocultismo y Teosofía. (Glosario de la Clave de la Teosofía).- La palabra Microcosmo, o pequeño mundo, se aplica generalmente al hombre. Un mundo más pequeño es un microcosmo si se compara con otro más grande. Nuestro sistema solar es un microcosmo en comparación del Universo, y un macrocosmo si se compara con la Tierra. De igual manera, el hombre es un microcosmo en comparación de la Tierra, y un macrocosmo cuando se le compara con un átomo de materia. Un átomo de materia es un microcosmo, porque en él están todas las potencialidades de que puede desarrollarse un macrocosmo si las condiciones son abonadas. Toda cosa contenida en un microcosmo en estado de desarrollo está contenida en el microcosmo en germen. –(F. Hartmann). –El hombre es llamado espejo del universo, imagen o reflexión de Dios; y así, el hombre repite en miniatura la evolución del universo. (A. Besant, Sabiduría Antigua, 213).
* Microprosopo o Microprosopus.- Voz griega que significa literalmente: “Cara pequeña” o “Faz menor”. En su sentido metafísico más elevado, Microprosopo es Adam Kadmon, el Hombre celeste o arquetipo; el vehículo de Ain Suph. Igualmente se aplica dicho término al Microcosmo (Doctr. Secr., I, 235) y a la Tétrada (Id., II, 663). Véase: Cara inferior, Faces o Caras cabalísticas, Macroprosopo, Tetragrammaton, etc.
* Micha (Sánscrito).- Envidia, engaño, fraude.
* Middha (Sánscrito).- Soñolencia, torpeza, estupidez.
Midgard (Escandinavo).- La gran Serpiente de los Eddas, que roe las raíces del Yggdrasil, el Arbol de Vida y del Universo, segun la leyenda los antiguos escandinavos. Midgard es la mundana Serpiente del Mal. [Midgard, considerado desde otro punto de vista, es la Tierra, mansión del hombre, en contraposición al Asgard, morada de los dioses, y al Utgard, residencia de los gigantes. Está unido con el Asgard por el puente del arco iris. Midgard es también la Serpiente del mundo, oculto en el océano, y cuyos anillos o espirales rodean todo nuestro planeta.]
* Midrash.- Otro nombre del Zohar. (Doctr. Secr., III, 167).
Midrashim (Hebreo).- “Antiguo”; lo mismo que Purâna. Los antiguos escritos de los judíos, como los Purânas, son desginados con el nombre de “Antiguas” (Escrituras de la India).
Migmar (Tibet).- El planeta Marte. [Está simbolizado por un Ojo. –“Contempla como Migmar, cubriendo su “Ojo con un velo carmesí, pasa majestuoso acariciando la tierra adormecida”. (Voz del Silencio, II).]
* Miguel.- Es el Metatron de los cabalístas judíos. Se le ha designado con numerosos títulos: Miguel-Jehovah, Angel de la Faz, Príncipe de las Faces del Señor, Gloria del Señor, Guía de Israel, Caudillo de los ejércitos del Señor, etc. Los católico-romanos identifican a Cristo con Miguel, que es su Ferouer. (Véase esta palabra). –Segun la alegoría primitiva, arcaica, Miguel lucha con Satán, el Dragón, y le vence a él y a sus ángeles. (Doctrina Secreta, II, 503; III, 388, etc.).
* Milagro.- Segun Chambers, es todo fenómeno que excede al poder del hombre y se aparta de la acción comun de las leyes de la Naturaleza. Webster está más en lo justo diciendo: “Una desviación de las leyes conocidas de la Naturaleza”. Sabemos por experiencia –dice Mr. Leadbeater- que en la actualidad el hombre conoce tan sólo una parte muy mínima de las leyes naturales, y que, por lo tanto, suceden muchas cosas que no alcanza a explicarse. Pero, apoyándonos en la analogía, así como en la observación directa, estamos completamente que dichas leyes son inmutables, y que siempre que ocurre un fenómeno inexplicable para nosotros, la falta de explicación es debida a nuestra ignorancia de tales leyes y no a ninguna contravención de las mismas. Así es que a medida que se va ensanchando el círculo de nuestros conocimientos, más y más se va reduciendo proporcionalmente el campo de lo milagroso. Los que se llaman “milagros” no son hechos que están supra vires naturœ (por encima de las fuerzas de la Naturaleza), sino simplemente efectos o manifestaciones de la Ley que están por encima de nuestro saber y comprensión actuales. Enseña, pues, la Teosofía que no existe ni puede existir el milagro, y que negar un hecho porque nos parezca extraordinario, o declararlo imposible a priori, es una simple prueba de ignorancia. Todo cuanto sucede es resultado de la Ley eterna e inmutable, y muchos hay que ignoran que hay leyes en otro tiempo conocidas y ahora desconocidas de la ciencia oficial. No concluyen las posibilidades allí donde termina nuestro saber y nuestros alcances intelectuales, por muy grandes que nos parezcan. Muchas novedades que nuestros abuelos hubieran calificado de sobrenaturales o milagrosas son para nosotros hechos completamente naturales, por la sencilla razón de que conocemos su mecanismo. En vista de los sorprendentes descubrimientos que cada día hace la ciencia, ¿quién será bastante osado para decir que conocemos ya todas las leyes de la Naturaleza? Las palabras “milagro”, “sobrenatural” y otras por el estilo figuran, por lo tanto, sólo en el vocabulario de la ignorancia. Pero hay muchas personas, doctas al parecer, que, llevadas de un exceso de presunción y no queriendo confesar su propia ignorancia, niegan en absoluto la posibilidad de todo cuanto excede a su limitada comprensión. A tales personas se pueden aplicar las palabras que pone Goethe en boca de Fausto: “Ten por cierto que lo que llaman talento es, a menudo, más bien fatuidad e inteligencia limitada”. Aconsejan, pues, de consuno la prudencia y el buen sentido que, dondequiera que nos encontremos delante de un fenómeno natural cuya explicación nos escapa todavía, nos esforcemos en buscarla por todos los medios posibles. –Véase: Sobrenatural, Yoga, etc.
Mîmânsâ (Sánscrito).- Un sistema de filosofía, uno de los seis que existen en la India. Hay dos escuelas filosóficas de este nombre: la primera, llamada Pûrva-Mîmânsâ [o Mîmânsâ anterior], fue fundada por Jaimini, y la segunda, Uttara Mîmânsâ [o Mîmânsâ posterior], lo fue por un Vyâsa, y actualmente es conocida con el nombre de Escuela Vedânta. Zankarâchârya fue el más eminente apóstol de esta última. La escuela Vedânta es el más antiguo de los seis darzanas (literalmente “demostraciones”), pero aun al Pûrva-Mîmânsa no se le atribuye una antigüedad que pase del año 500 antes de J.C. Los orientales que patrocinan la absurda idea de que todas estas escuelas “son debidas a la influencia griega” quisieran asignarles una fecha posterior, con el objeto de apoyar su teoría. Los Chad-darzana (o seis demostraciones) tienen todos un mismo punto de partida y afirman que exnihilo nihil fit [de la nada, nada se hace]. –[Véase: Filosofía pûrva-mîmânsâ y Filosofía vedânta.]
* Mimer.- Véase: Mimir.
Mimir (Escandinavo).- Un sabio gigante, en los Eddas. Uno de los Jotuns o Titanes. Tenía a su cuidado un pozo (Pozo de Mimir), que contenía las aguas de la Sabiduría primitiva, bebiendo de las cuales Odín adquirió el conocimiento de todos los sucesos pasados, presentes y futuros.
Mîna (Minas) (Sánscrito).- Lo mismo que Meenam. Duodécimo signo del Zodíaco indo, correspondiente a nuestro Piscis (los Peces).
Minas.- Véase: Mîna.
Minos (Griego).- El gran Juez del Hades. Un antiguo rey de Creta.
Miölner [o Miolner] (Escandinavo).- El martillo de combate de Thor (véase: Svastika), que los enanos fabricaron para él. Con dicho martillo el dios venció a los hombres, lo mismo que a los dioses. Es la misma especie de arma mágica que el Agneyastra indo, el arma de fuego.
Mishnah (Hebreo).- [Literalmente: instrucción o repetición.] La parte más antigua del Talmud judío, o ley oral, que se compone de reglas secundarias para guía de los judíos, con un extenso comentario. Su contenido está ordenado en seis secciones, que tratan, respectivamente, de Simientes, Fiestas, Mujeres, Daños, Cosas sagradas y Purificación. El rabino Judas Haunasse codificó el Mishnah en el año 140, aproximadamente, después de J. C. (W.W.W.).
Mistagogía.- Voz derivada del griego. –Doctrinas e interpretaciones de los sagrados Misterios.
* Mistagogo (Mystagogus, en griego).- Jefe de los iniciados. Sacerdote que iniciaba a los neófitos en los Misterios.
* Mistelten (Escandinavo).- Un arbolillo o retoño con el que Oeder, instigado por Loke, mató a Balder.
Misterios.- En griego, teletai, consumaciones, ceremonias de iniciación o Misterios. Eran unas ceremonias que generalmente se mantenían ocultas a los profanos y a las personas no iniciadas, y durante las cuales se enseñaban por medio de representaciones dramáticas y otros métodos el origen de las cosas, la naturaleza del espíritu humano, las relaciones de éste con el cuerpo y el método de su purificación y reposición a una vida superior. La ciencia física, la medicina, las leyes de la música, la adivinación, se enseñaban todas ellas de la misma manera. El juramento de Hipócrates no era más que un compromiso místico. Hipócrates era un sacerdote de Asclepios, algunos de cuyos escritos llegaron por casualidad a hacerse públicos. Pero los Asclepiades eran iniciados del culto de la serpiente de Esculapio, como las bacantes lo eran del dionisíaco, y ambos ritos, andando el tiempo, fueron incorporados a los eleusinos. Los sagrados Misterios eran celebrados en los antiguos templos por los hierofantes-iniciados, para provecho e instrucción de los candidatos. Los Misterios más solemnes y secretos eran seguramente los celebrados en Egipto por “la compañía de los guardadores del secreto”, como denomina Bonwick a los Hierofantes. Maurice describe muy gráficamente su naturaleza en breves líneas. Hablando de los Misterios que se celebraban en Filé (Isla del Nilo), dice que “en estas sombrías cavernas los grandes y místicos arcanos de la diosa (Isis) eran revelados al adorador aspirante mientras el solemne himno de iniciación resonaba en toda la larga extensión de estas recónditas profundidades de granito.” La palabra “Misterios” deriva del griego muô, “cerrar la boca”, y cada símbolo relacionado con ellos tenía una significación muy oculta. Segun afirman Platón y muchos otros sabios de la antigüedad, los Misterios eran altamente religiosos, morales y benéficos como escuela de ética. Los Misterios griegos, los de Ceres y Baco eran sólo imitaciones de los egipcios, y el autor de Creencia egipcia y Pensamiento moderno nos enseña que la “palabra inglesa chapel (capilla o capella) se dice que es el Caph-El o colegio de El, la divinidad solar. Los tan conocidos Kabiri o Cabires estaban asociados con los Misterios. En breves palabras, los Misterios eran en todos los países una serie de representaciones dramáticas en las que los misterios de la cosmogonía y de la Naturaleza, en general, eran personificados por los sacerdotes y neófitos, que desempeñaban el papel de los diferentes dioses y diosas, repitiendo supuestas escenas (alegorías) de sus vidas respectivas. Estas eran explicadas en su sentido oculto a los candidatos a la iniciación, e incorporadas en las doctrinas filosóficas.
Misterios de Eleusis.- Los Misterios eleusinos eran los más famosos y más antiguos de todos los Misterios griegos (excepto los de Samotracia), y se celebraban en las cercanías de la aldea de Eleusis, no lejos de Atenas. Epifanio los hace remontar a los tiempos de Inachos (1800 antes de J. C.), y fueron fundados, como se expresa en otra versión, por Eumolpo, rey de Tracia y Hierofante. Se celebraban en honor de Deméter, la Ceres griega y la Isis egipcia, y el último acto de la representación aludía a una víctima sacrificial expiatoria y una resurrección cuando el Iniciado era admitido al supremo grado de Epopta. (Véase esta palabra). La fiesta de los Misterios empezaba en el mes de Boëdromion (septiembre), época de la vendimia, y duraba desde el día 15 hasta el 22, o sean siete días. La fiesta hebrea de los Tabernáculos, fiesta de las Cosechas, en el mes de Ethanim (el séptimo), empezaba igualmente el día 15 y terminaba el 22 de dicho mes. El nombre del mes (Ethanim) deriva, segun algunos, de Adonim, Adonia, Attenim, Ethanim, y estaba consagrado a Adonai o Adonis (Thammuz), cuya muerte lamentaban los hebreos en las arboledas de Bethlehem. El sacrificio del “Pan y del Vino” ejecutábase antes de los Misterios de la Iniciación, y durante la ceremonia se revelaban a los candidatos los misterios del Petroma, especie de libro hecho de dos tablitas de piedra (petrai), unidas por un lado y dispuestas para abrirse como los demás libros. (Para más detalles, véase: Isis sin velo, II, págs. 44 y 91 y siguientes).
Misterios órficos u Orphica (Griego).- Venían después de los Misterios de Baco, pero diferían mucho de éstos. El sistema de Orfeo se caracteriza por su purísima moralidad y severísimo ascetismo. La teología que enseñaba Orfeo es, por otra parte, puramente inda. Para él la Esencia divina es inseparable de todo cuanto es en el universo infinito, puesto que todas las formas están ocultas en ella desde toda la eternidad. En determinados períodos, estas formas son manifestadas emanando de la Esencia divina, o se manifiestan ellas mismas. Así, gracias a esta ley de emanación (o evolución), todas las cosas participan de dicha Esencia, y son partes y miembros impregnados de la naturaleza divina, que es omnipresente. Habiendo procedido de Ella todas las cosas, a Ella deben necesariamente volver y, por lo tanto, son menester innumerables transmigraciones o reencarnaciones y purificaciones antes de llegar la consumación final. Esto es pura filosofía Vedânta. Por otra parte, la Fraternidad órfica no comía alimentos animales, llevaba vestidos de lino blanco y practicaba muchas ceremonias parecidas a las de los brahmanes.
* Misticismo.- Toda doctrina envuelta en el misterio y en la metafísica, y que trata más de los mundos ideales que de nuestro positivo universo real. (Glosario de la Clave de la Teosofía.) Otra acepción de esta palabra es: el estado de la persona que se dedica mucho a Dios y a las cosas espirituales. (Diccionario de la Lengua castellana).
* Místico.- De la voz griega mystikós. En la antigüedad era aquel que figuraba entre los que eran admitidos en los antiguos Misterios; en nuestra época es el que practica el misticismo y profesa ideas místicas, trascendentales, etc. (Glosario de la Clave de la Teosofía). Segun leemos en Isis sin velo (I, XXXVI), se da el nombre de místicos a los iniciados; pero en la Edad Media y en períodos posteriores se aplicaba dicho término a aquellos hombres que, como Jacobo Boehme el Teósofo, Molinos el Quietista, Nicolás de Basilea y otros, creían en una comunicación interior directa con Dios, análoga a la inspiración de los profetas.
* Mita (Sánscrito).- Mesurado, reducido, limitado, conciso; dividido, distribuído; conocido, examinado; fijo, firme, sólido.
* Mitabhâchin o Mitabhâchitri (Sánscrito).- Que habla poco. En los Vedas, es un epíteto de ciertos ministros del Sacrificio.
* Mitadru (Sánscrito).- El mar, el océano.
* Mitakchara (Sánscrito).- Literalmente, “palabra medida”. Verso.
* Mitâzana (Sánscrito).- Que come poco; sobrio, frugal.
* Mithilâ (Sánscrito).- Nombre de una ciudad situada al N.E. de Bengala.
* Mithra.- Véase: Mitra.
* Mithuna (Sánscrito).- Par, pareja, unión. Tercer signo del Zodíaco indo, correspondiente a nuestro Géminis, o los Gemelos.
* Mithyâ (Sánscrito).- Mítico, fabuloso, falso, fingido, hipócrita.
* Mithyâchâra (Sánscrito).- Conducta indebida, incorrecta, que obra con falsedad o hipocresía; hipócrita, falso devoto.
* Mithyâdhyavasiti (Sánscrito).- Perseverancia en el error; confirmación de un error por medio de un falso razonamiento.
* Mithyâdrichti (Sánscrito).- Visión falsa; ilusión; error, herejía.
Mithyâvachana (Sánscrito).- Falsedad, mentira.
* Miti (Sánscrito).- Medida, peso; apreciación, valor; juicio, prueba.
* Mito (Mythos, en griego).- Comúnmente se entiende por mito una fábula o ficción alegórica que encierra en el fondo una verdad generalmente de orden espiritual, moral o religioso. Pero hay que tener en cuenta que los antiguos escritores daban a la voz mythos el significado de tradición, palabra, relato, rumor público, etc., y que la palabra latina fábula era sinónima de alguna cosa dicha, como sucedida en tiempos prehistóricos, y no necesariamente una ficción o invención. (Véase: Doctrina Secreta, III, 33). Los mitos tienen una doble significación. Muchos de ellos van resultando realidades, y la mayor parte no son invenciones, sino transformaciones, puesto que tienen por punto de partida hechos reales. Los mitos –dice my atinadamente Pococke- está ahora probado que son fábulas en la misma proporción que los comprendemos mal, y son verdades en la proporción en que se les comprendía en otro tiempo. Los mitos han tenido y tienen aun, para las masas populares, el valor de dogmas y realidades, y constituyen la base de las religiones exotéricas. ¿De dónde viene –dice Eugenio Talbot- ese consentimiento unánime y persistente en unas creencias fundadas en el error? De esta ley lógica e indiscutible de que “todo error tiene su base en la verdad”. En otras palabras, como lo ha comprendido tan bien Otfried Müller, los mitos no son la consecuencia elaborada de un sistema, sino una creación espontánea, irreflexiva y repentina del espíritu humano en su infancia; el mito es el antípoda de la abstracción. Nada tiene, pues, de sorprendente que la masa de la humanidad siga aferrada en todos tiempos al mito; éste forma parte de ella misma, y cuando la humanidad llega a la edad adulta no puede renegar de las creencias de su cuna. Los modernos estudios de Mitología comparada han aportado muchísima luz sobre la génesis del mundo, del hombre y de los dioses, así como sobre la historia y la evolución de las principales religiones del globo. Para todo hombre pensador es de suma importancia examinar con la mayor atención los mitos bajo todos sus aspectos, aplicándoles cada una de las siete claves, y descubrir las verdades trascendetales ocultas en el fondo de tales ficciones.
* Mitra (Sánscrito).- Uno de los doce Âdityas (hijos de Aditi) o personificaciones del Sol. En los Vedas se halla generalmente asociado con Varuna, siendo Mitra el que rige el día, y Varuna el que rige la noche. Por la semejanza del nombre, y por ser una forma del sol, guarda estrecha relación con el Mithra persa. (Véase: Mitra o Mithra.) Mitra significa también: amigo, compañero, aliado.
Mitra o Mithra (Persa).- Antigua divinidad irania, un dios-sol, como lo demuestra el hecho de tener cabeza de león. Este nombre existe igualmente en la India, y significa una forma del sol. El Mithra persa, el que hizo salir del cielo a Ahrimán, es una especie de Mesías que, segun se espera, volverá como juez de los hombres, y es un Dios que carga con los pecados y expía las iniquidades de la humanidad. Como tal, sin embargo, se halla directamente relacionado con el Ocultismo supremo, cuyas enseñanzas se exponían durante los Misterios mitraicos, que así llevaban su nombre. [Esta divinidad es el principio mediador colocado entre el bien y el mal, entre Ormuzd y Ahrimán, Mithra es Khorschid, el primero de los Izeds, el dispensador de luz y de bienes, mantenedor de la armonía en el mundo y guardián protector de todas las criaturas. Sin ser propiamente el sol, es la representación del astro rey, y es invocado con éste. Por los documentos relativos a la Persia –dice E. Bournof- sabemos que el viril (El viril de nuestras iglesias, como se sabe, es un receptáculo de metal que encierra la Hostia, y del cual, a manera de sol radiante, emanan rayos dorados en todas direcciones) figura también en las ceremonias mazdeístas, en las cuales representaba a Mithra, y que Mithra no era otra cosa que la fuerza inmanente del Sol, concebido como regulador del tiempo, iluminador del mundo y agente de vida. El Veda confirma sobradamente esta interpretación del símbolo, y da al propio tiempo el primer sentido de la fórmula cristiana per quem omnia facta sunt (por el cual han sido hechas todas las cosas).]
Mitra.- Toca o adorno de la cabeza de un dignatario religiosos, como un obispo católico-romano; una toca que termina por arriba en dos labios, como una cabeza de pez con la boca abierta –hocico de tenca- asociada con Dagón, la divinidad babilónica, siendo de advertir que la palabra dag significa pez. Es muy curioso que el orificio de la matriz ha sido denominado también así [os tincœ u “hocico de tenca”] en la hembra humana, y el pez está relacionado con la diosa Afrodita, que surgió del mar. Es igualmente curioso que las antiguas leyendas caldeas hablan de un instructor religioso llamado Oannes y Anedoto, medio hombre y medio pez, que, saliendo del mar, llegó a aquel país. (W.W.W.)
* Mitratâ (Sánscrito).- Amistad.
* Mitravatsala (Sánscrito).- Que inspira afecto, simpático.
* Mitrayu (Sánscrito).- Afectuoso, benévolo, amigo, simpático.
* Mitta (Pali).- Benevolencia compasiva. Esta doctrina ennoblece el Budismo y coloca a éste en un lugar eminente entre las religiones del mundo. Esta voz es sinónima de Maitreya (véase esta palabra), nombre del Buddha venidero. (Olcott, Catecismo búdico, 42da. Edic., pág 47).
* Mizra (Sánscrito).- Mezcla; mezclado, mixto, vario, múltiple.
Mizraim (Egipcio).- Nombre del Egipto en tiempos antiquísimos. Este nombre está ahora relacionado con la masonería. –Véase el rito de Mizraim y el rito de Menfis en las Enciclopedias masónicas.
* Mizraka (Sánscrito).- Paraíso, jardín celeste; canto.
* Mizrakâvana (Sánscrito).- El paraíso de Indra.
* Mizrita (Sánscrito).- Mezclado, adicionado; respetable.
Mlechchha (Sánscrito).- Paria, descastado. Este nombre se aplica a los extranjeros (bárbaros) en general y a los que no son arios.
Mnevis (Egipcio).- El otro Mnevis, hijo de Ptah, y símbolo del dios-sol Ra, de igual modo que se suponía que Apis era Osiris en la sagrada forma de toro. Su residencia estaba en Heliópolis, la ciudad del sol. Era negro, y llevaba sobre los cuernos el sagrado urœus [áspid] y el disco.
Mobeds (Zendo).- Sacerdotes zoroastrianos o parsis. [Véase: Mago.]
* Modalismo.- Doctrina por primera vez expuesta por Sabellius, de que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo no son tres personas distintas, sino sólo tres diferentes modos de manifestación.
* Mogha (Sánscrito).- Vano, inútil.
* Moghajñâna (Sánscrito).- De vano saber o conocimiento.
* Moghakarman (Sánscrito).- De acciones vanas.
* Moghâza (Sánscrito).- De vanas esperanzas.
* Moha (Sánscrito).- Ilusión, error, engaño, ofuscación, confusión, turbación, insensatez; inconsciencia, ignorancia; perplejidad; apatía; olvido, negligencia, descuido; pena, tormento. Es sinónimo de asmitâ, uno de los cinco “sufrimientos” de Patañjali.
* Moha-jâla (Sánscrito).- La ilusión del mundo de los objetos de los sentidos. (P. Hoult).
* Moha-mantra (Sánscrito).- Un mantra que crea un encanto o ilusión. (Id.).
* Mohana (Sánscrito).- Error, confusión, engaño, ilusión; que causa confusión, error, o engaño; falaz, engañoso, ilusorio.
* Moha-zâstra (Sánscrito).- Doctrina falsa o que induce a error.
* Mohin (Sánscrito).- Que turba el entendimiento o los sentidos; que causa vértigo o delirio.
* Moira (Griego).- Equivalente al Fatum latino: hado, destino, el poder que gobierna las acciones, los sufrimientos, la vida y las luchas humanas. Pero Moira no es Karma, es sólo una de sus fuerzas-agentes. [Para más detalles, véase: Doctr. Secr., II, 639, nota 3.]
Moisés.- Hay datos que hacen creer que los libros atribuídos a Moisés fueron escritos en Babilonia durante el cautiverio de los israelitas, o inmediatamente después de Esdras. En efecto, en dichos escritos no se ven más que terminaciones persas y caldeas: Babel, puerta de Dios; Phegor-beel o Beel-phegor, dios del abismo; Zebuth-beel o Beel-zebuth, dios de los insectos; Bethel, casa de Dios; Daniel, juicio de Dios; Gabriel, hombre de Dios; Jahel, afligido de Dios; Jaiel, vida de Dios; Israel, que ve a Dios; Oziel, fuerza de Dios; Rafael, socorro de Dios; Uriel, fuego de Dios. (Dicc. Filos., art. Moisés). Hace mucho siglos que las fábulas orientales atribuían a Baco todo lo que los judíos han dicho de Moisés. En efecto: algunos eruditos escritores, tales como Vossius, M. Huet y el padre Tomassin, han hecho notar curiosos puntos de semejanza entre el dios Baco y el renombrado legislador del pueblo hebreo: 1) Baco nació en Egipto, y tuvo dos madres: la ninfa Semele y su propio padre Júpiter, que recogió al niño del seno de su madre, muerta por un rayo, y lo guardó encerrado en su muslo hasta el día de su nacimiento. Moisés nació en Egipto y tuvo también dos madres, una que le dio a luz, y otra que le adoptó. 2) Baco fue hallado expuesto en la isla de Naxos. Esta circunstancia le valió el sobrenombre de Myfas, que significa “salvado de las aguas”. Moisés fue abandonado en la orilla del Nilo, y por haber sido salvado de las aguas, se le llamó Moisés, de mo, que en egipcio significa “agua”, e yses, “salvado”. 3) Baco pasó el Mar Rojo con un ejército compuesto de hombres y mujeres para ir a la conquista de las Indias. Moisés atravesó tambien dicho mar con una hueste compuesta igualmente de hombres y mujeres, para dirigirse a la tierra de Promisión. 4) Baco, lo mismo que Moisés, cambió las aguas en sangre. 5) La fábula dota de cuernos al dios Baco y le pone en la mano un tirso temible. Moisés tenía sobre la frente dos rayos luminosos y llevaba en la mano una vara milagrosa. 6) Baco fue criado en una montaña denominada Nisa. Moisés pasó cuarenta días en el monte Sinaí, del cual parece ser Nisa un anagrama. 7) Baco se vegó de Penteo, rey de Tebas, que se oponía a la introducción del culto de dicho dios en su reino. Moisés castigó a Faraón, que no quería permitir que saliese el pueblo de Dios para ir a celebrar sacrificios; y por último, Baco plantó la viña en diversos parajes, y en los días de Moisés, los exploradores que éste envió a la tierra de Canaán regresaron con un enorme racimo, que dos hombres llevaban en un varal. (Connaissance de la Mythologie, Lyon, 1817, página 83).
Mokcha (Moksha) (Sánscrito).- “Liberación”. Liberación de los vínculos de la carne y de la materia, o de la vida en esta tierra. [Véase: Mukti.] Lo mismo que Nirvâna; un estado post-mortem de reposo y bienaventuranza del Alma-peregrino. [Mokcha significa: liberación, desligamiento, emancipación, salvación; es la liberación definitiva de los lazos del cuerpo y de la materia en general, y consecutivamente, liberación de los dolores de la existencia mundana. En tal estado, el Espíritu individual, exento de toda nueva reencarnación, es absorbido en el Espíritu universal. Esta liberación final, por lo tanto, es considerada como la suprema bienaventuranza. Dicha palabra tiene aun otras acepciones: muerte; justicia, equidad, equilibrio, etc. –Véase: Mukti.]
* Mokcha-dharma (Sánscrito).- Título de la tercera parte del Zânti-Parvan del Mahâbhârata.
* Mokcha-jñâna (Sánscrito).- Conocimiento salvador, o que da la salvación.
Mokchopâya (Mokcha-upâya) (Sánscrito).- Devoto que no piensa más que en la liberación final.
* Moldes.- Se da en Egipto este nombre a unas tablillas de piedra calcárea que en realidad no son moldes, sino figuras impresas. Todas estas tablillas llevan la imagen del ave Bennou, avefría o frailecillo, tipo del fénix que renace de sus cenizas, y son, por lo tanto, un emblema de reproducción o renovación. Parecen indicar que la momia que acompañan dará nacimiento a un nuevo ser destinado a recorrer una nueva existencia. (Pierret, Dict. D’Arch. Egypt.).
* Moloch.- Véase: Baal.
Momia.- Nombre que se da a los cuerpos humanos embalsamados y conservados segun el antiguo método egipcio. La manera de practicar la momificación es un rito de suma antigüedad en la tierra de los Faraones, y era considerada como una de las ceremonias más sagradas. Era, además, una operación que demostraba grandes conocimientos de química y cirugía. Vemos momias que cuentan más de cinco mil años tan bien conservadas y frescas como cuando acababan de salir de las manos de los parashistas. [Las momias de Tebas conservan una flexibilidad notable y se pueden doblar sin romperse; en algunas de ellas, el dedo se hunde todavía en la carne. La mano izquierda está adornada con sortijas y escarabajos. (Véase: Escarabajo). Las momias de Menfis estaban frecuentemente cargadas de amuletos y escarabajos, y a su lado, o entre sus piernas, se habían depositado en el ataúd papiros (ejemplares del Libro de los Muertos); varios de estos manuscritos estaban medio desarrollados y extendidos desde la cabeza hasta los pies de la momia. (Dict. D’Arch. Egypt.).]
Mónada [Del griego monas, unidad.].- La Unidad, lo uno; pero en Ocultismo significa muchas veces la Tríada unificada. Âtma-Buddi-Manas, o la Duada Âtma-Buddhi, la parte inmortal del hombre que se reencarna en los reinos inferiores y progresa gradualmente a través de ellos hasta el hombre, y después hasta la meta final: el Nirvâna. [La Mónada es la Chispa divina, el Jîva, el Yo, el Rayo del Principio Absoluto único, universal; el hálito o la vida exhalada del Logos. Aunque una en esencia, penetra en todos los planos y regiones del ser y se encarna en todas las formas al recorrer los arcos descendente y ascendente (involución y evolución). Por este motivo se la designa, segun los casos, con los nombres de Mónada elemental, mineral, vegetal, animal, humana, de un Espíritu planetario, etc. Contiene en germen o estado latente los atributos y poderes divinos, poderes que se van manifestando en virtud de las impresiones nacidas del contacto con los objetos del universo con que la Mónada se pone en relación. (Doctr. Secr., passim). Se la llama Mónada tanto si se trata de la Mónada del Espíritu-Materia (Âtmâ), como si de la Mónada de la forma (Âtmâ-Buddhi) o de la Mónada humana (Âtmâ-Buddhi-Manas). En cada uno de estos casos, es una unidad y obra como una unidad, lo mismo si tiene un solo aspecto como si tiene dos o tres. (A. Besant, Sabid. Antig.).]
* Mónada animal.- Véase: Mónada.
* Mónada cósmica.- Buddhi. –(Véase: Doctr. Secr., I, 200).
* Mónada divina.- Véase: Âtman.
* Mónada dual.- Este término, usado entre los estudiantes de Ocultismo de la escuela Âryâsanga, se aplica al Âtma-Buddhi.
* Mónada espiritual.- Es una, universal, infinita e indivisible, cuyos Rayos, no obstante, forman lo que, en nuestra ignorancia, llamamos “Mónadas individuales” de los hombres. (Doctrina Secreta, I, 200). Sólo existe en un estado latente por completo. (Id., II, 83).
* Mónada humana.- Es el conjunto de Âtma-Buddhi-Manas. Estos tres principios constituyen la parte inmortal del hombre, el Yo superior, que transmigra sucesivamente de un cuerpo a otro, hasta alcanzar la liberación final, o sea su completa emancipación de la materia. –Véase: Mónada.
* Mónada individuales.- Véase: Mónada espiritual y Mónada universal.
* Mónada mineral.- Véase: Mónada.
* Mónada universal.- El Logos, del cual emanan, a modo de Chispas o Rayos, las Mónadas individuales.
* Mónada vegetal.- Véase: Mónada.
Mónadas ex-lunares.- Nombre introducido por Mrs. Besant (Genealogía del Hombre) para diferenciar a los Seres más avanzados (los Barhichads y los Pitris solares) las siete clases inferiores de entidades de la Cadena lunar, a que se alude frecuentemente, en la Doctr. Secr., con el nombre de “Pitris lunares”. (Powis Hoult).
* Monádica, esencia.- Véase: Esencia monádica.
Monas (Griego).- Lo mismo que la palabra Mónada: “Uno”, una unidad. En el sistema pitagórico, la duada emana del Monas superior y único, que, por lo tanto, es la “Causa primera”.
* Monismo.- El Monismo, o doctrina de la Substancia única, es la más sutil forma de psicología negativa, que uno de sus defensores, el profesor Bain, denomina acertadamente “materialismo disfrazado”. Esta doctrina, que admite el pensamiento y los fenómenos mentales como radicalmente contrastados con la materia, los considera como los dos lados o aspectos de una sola y misma substancia en algunas de sus condiciones. (Doctr. Secr., I, 149-150). Llámase tambien Monismo o Advatismo (no dualismo) una de las escuelas de la filosofía Vedânta. Esta escuela admite la doctrina de la unidad o identidad del Âtmâ humano con el Paramâtmâ, esto es, la identidad del Espíritu universal; doctrina que se halla resumida y formulada en la palabras: “Tú eres Aquello (Brahman)” (Tat twam asi.) Véase: Advaita.
Monjas.- Había monjas en el antiguo Egipto, lo mismo que en el Perú y en la antigua Roma pagana. Eran las “esposas vírgenes” de sus respectivos dioses (solares). Como dice Herodoto, “las esposas de Ammon están excluídas de todo trato con los hombres”; son “las esposas del ciclo”, y virtualmente vienen a ser muertas para el mundo, exactamente como lo son ahora. En el Perú eran “puras vírgenes del Sol”, y en algunas inscripciones se habla de las pallakistas de Ammon Ra diciendo que ellas son las “esposas divinas”. La hermana de Ounnefer, primer profeta de Osiris durante el reinado de Ramses II, es descripta como “Taia, señora Abadesa de Monjas”. (Mariette Bey).
* Mono.- Opuestamente a lo que afirman varios naturalistas modernos, el hombre no desciende del mono o de algun antropoide de la presente especie animal, sino que el mono es un hombre degenerado. –Véase: Doctr. Secr., I, 212, II, 757, etc.
Monogenes (Griego).- Literalmente: “unigénito”; un nombre de Proserpina y de otros dioses y diosas.
* Monogénesis.- Literalmente: “generación única”. Generación directa, en la cual los seres vivos se reproducen directamente, y con fases de desarrollo idéntico, por huevo o por óvulo, en oposición con la digénesis o generación alternante. (Van Beneden).
* Monogenismo.- Doctrina antropológica segun la cual toda la familia humana desciende de un tipo primitivo y único.
* Monograma de Cristo.- Véase: Crismón.
* Monoteísmo (Del griego monos, único, y Theos, Dios).- Doctrina teológica de los que no reconocen más que un solo Dios, opuestamente a los politeístas, que admiten la existencia de muchos dioses.
* Monstra (Latín).- Véase: Monstruos.
* Monstruos.- Seres no naturales –generalmente invisibles-, que pueden provenir de la corrupción o de una unión sexual contranatural, de la putrefacción (astral) del esperma, o de los efectos de una imaginación morbosa. Todas estas cosas y otras parecidas pueden pasar del estado simplemente subjetivo al estado objetivo, puesto que “objetivo” y “subjetivo” son términos relativos, y se refieren más bien a nuestra capacidad para percibir tales seres, que a cualidades esenciales suyas propias. Lo que puede ser puramente subjetivo para una persona que se halle en un estado de existencia determinado puede ser completamente objetivo para otra que se halle en un estado distinto. Así, por ejemplo, en el delirium tremens, la locura, las alucinaciones subjetivas le parecen objetivas al paciente, mientras que, durante nuestro sueño, todo lo que nos parecía ser objetivo en estado de vigilia desaperece y cesa de ser objetivo para nuestra conciencia. (F. Hartmann).
* Montanismo.- Herejía que apareció en la iglesia cristiana en la última mitad del siglo II, fundada por el profeta y “enviado de Dios” Montano de Frigia, que promovió una reacción en favor de la antigua ascética severidad y disciplina eclesiásticas.
* Monte Merú.- Véase: Merú.
* Moral egipcia.- Los egipcios eran amables, benévolos y caritativos. Se conocen varios tratados de moral de aquel país: las Máximas de Ptah-hotep, las Máximas del escriba Ani, etc. El papiro demótico del Louvre contiene asimismo excelentes máximas morales.
Moral irania.- La obrita que tiene por título Antigua moral irania y zoroastriana, compilada por Mr. Dhunjibhoy Jamsetjee Medhora, teósofo parsi de Bombay, es un excelente tratado de repleto de las más sublimes enseñanzas morales, en inglés y gujerati, y dará a conocer al estudiante, mejor que muchas otras obras, la ética de los antiguos iranios.
Moriah, Monte.- El sitio que ocupaba el primer templo de Salomón en Jerusalén, segun la tradición. A dicho monte se encaminó Abraham para ofrecer en sacrificio a su hijo Isaac.
Morya (Sánscrito).- Una de las casas budistas reales de Magadha, a la cual pertenecían Chandragupta y su nieto Azoka. Es también el nombre de una tribu râjput.
* Mosaico.- Adjetivo que se aplica a lo perteneciente o relativo a Moisés.
Môt (Fenicio).- Lo mismo que ilus, légamo o barro, el caos primordial. Palabra empleada en la cosmogonía etrusca. (Véase: Ilus y Suidas).
Mout o Muth (Egipcio).- La diosa-madre; la diosa primordial, puesto que “todos los dioses han nacido de Muth”, como se ha dicho. Astronómicamente, es la luna. [Véase: Chnoupis.]
* Mrigaziras (Sánscrito).- El quinto asterismo lunar, figurado por una cabeza de antílope (mriga).
* Mrit (Sánscrito).- La tierra; barro.
* Mrita (Sánscrito).- Muerte; mendicidad. Como adjetivo: muerto.
* Mrityu (Sánscrito).- La muerte. Epíteto de Yama, dios de los muertos.
* Mrityusainya (Sánscrito).- Literalmente: “ejército de la muerte”: las pasiones, en lenguaje búdico.
* Mu (Sensar).- La palabra mística (o mejor dicho, una parte de ella) en el Budismo del Norte. Significa la “destrucción de la tentación” durante el curso de la práctica del Yoga.
* Mû (Sánscrito).- Lazo, vínculo.
* Mud (Sánscrito).- Alegría, júbilo; delirio, embriaguez.
* Mudâ (Sánscrito).- Alegría, gozo, júbilo; deleite.
* Mûdha (Sánscrito).- Turbado, confuso; errado, cegado; iluso, insensato, irracional.
* Mûdhagrâha (Sánscrito).- Que tiene la imaginación extraviada; idea o intención desacertada; comprensión errónea.
* Mûdhasattva (Sánscrito).- Insensato.
* Mudita (Sánscrito).- Alegre, gozoso, contento, complacido. –Entre los budistas, una de las cinco clases de meditación; la meditación de la alegría o del gozo. (P. Hoult).
Mudrâ (Sánscrito).- Llamado sello místico. Sistema de signos secretos que se hacen con los dedos. Estos signos imitan antiguos caracteres sánscritos de mágica eficacia. Usados primeramente en la escuela yogârcharya del Budismo del Norte, fueron más tarde adoptados por los tantrikas indos, que con frecuencia han hecho un mal uso de ellos para fines de magia negra. [Mudrâ es también una práctica del hatha-yoga, que consiste en cierto número de actitudes y contorsiones de los miembros del cuerpo.]
Muérdago.- Este curioso vegetal, que crece sólo como un parásito en varios árboles, como el manzano y la encina, era una planta mística en diversas religiones antiguas, y sobre todo en la de los druidas celtas. Sus sacerdotes cortaban el muérdago en ciertas estaciones, con muchas ceremonias y sirviéndose sólo de una falce de oro especialmente consagrada. Hislop insinúa la idea, a modo de explicación religiosa, de que siendo el muérdago una Rama que brota de un Arbol-Madre, fue adorado como una Rama divina salida de un Arbol terrestre, la unión de la divinidad con la humanidad. El nombre de esta planta en alemán significa “todo lo cura”. Compárese la Rama de Oro de la Encida, de Virgilio (VI, 126) y Plinio, Hist. Natur. (XVII, 44): Sacerdos cándida veste cultus arborem scandit, falce aurea demetit. [Un sacerdote vestido de blanco sube al árbol y corta el muérdago con una falce de oro.] (W.W.W.) -[Entre los druidas, esta planta parásita simboliza el sacrificio divino, el descenso del Espíritu a la Materia.]
* Muerte.- Para todos los que están plenamente convencidos de que la entidad humana no está constituída principalmente por el cuerpo físico, y que éste no es más que una simple envoltura pasajera del hombre eterno, o sea de la individualidad, la muerte no existe, es un sueño; es la mayor de las ilusiones de la tierra, porque no es otra cosa que un mero cambio de estado en las condiciones de la vida perenne e incesante, un cambio de existencia que da al hombre una liberación parcial, puesto que, con el abandono y desintegración del cuerpo grosero, se libra de la más pesada de las cadenas que le esclavizan. Lo que llamamos “muerte” es un nacimiento a otra vida superior, más amplia; un retorno a la verdadera patria del alma, tras un breve destierro en la tierra, el paso desde la prisión del cuerpo a la libertad del aire de lo alto. La muerte, en fin, es el tránsito de la vida objetiva, material, a la vida subjetiva, esto es, a la verdadera vida del alma. Nada, pues, más ilógico, más absurdo, que ese aparato fúnebre, tétrico, con que se suele revestir la muerte en nuestro tiempos excesivamente materialistas. Véase: Sabid. Ant., págs. 206-207. –Véase también: Kâmaloka, Devachán, etc.
Segun expresa una fórmula que se halla en las inscripciones funerarias, los egipcios “amaban la vida y detestaban la muerte”. Así es que tenían mucho cuidado al alejar la idea de la muerte, hasta el extremo de que en los textos no figura dicha palabra. La aniquilación era considerada como el supremo castigo de los malvados; los justos no bajaban a la tumba más que para prepararse allí para nuevas existencias. La región infernal es la tierra de los vivientes, y en las inscripciones tumularias, el nombre del difunto va muchas veces seguido del epíteto reviviente. (Pierret, Dict.de Arch. Egypt.).
* Muerte del alma.- Véase: Segunda muerte.
* Muerte segunda.- Véase: Segunda muerte.
Muertos vivientes.- Así se hallan calificados en la Voz del Silencio, II, los hombres que ignoran la Sabiduría y las verdades esotéricas.
* Muhira (Sánscrito).- Amor, deseo; Kâma.
* Muhurta (Sánscrito).- La trigésima parte del día, o sea unos 48 minutos; un momento, un tiempo breve.
* Mukha (Sánscrito).- Boca, rostro; voz, sonido; dirección; principio, medio; el Veda (salido de la boca de Brahma).
* Mukhya (Sánscrito).- Jefe, caudillo; primero, primario, principal, el mejor. –En los Purânas, es la cuarta creación, o sea la del reino vegetal. Se llama Mukhya o “primaria” porque da principio a la serie de cuatro. Es, pues, el punto medio entre los tres reinos inferiores y los tres superiores, que representan los siete reinos esotéricos del Kosmos y de la Tierra. (Doctr. Secr., I, 490).
* Mukhya-Kârana (Sánscrito).- Causa principal.
* Mukhya-prâna (Sánscrito).- El Prâna principal. La manifestación objetiva del Âtmâ en el cuerpo. (P. Hoult).
Mukta (Sánscrito).- Libre, libertado, emancipado, exento; beatificado o salvado. El candidato al Mokcha (liberación de las trabas de la carne, de la materia o de la vida en esta tierra). [El Espíritu libre de la existencia condicionada, o libre de los lazos del cuerpo.] Véase: Mukti.
* Muktasanga (Sánscrito).- Libre de interés o de apego; exento de deseos.
* Muktâtman (Sánscrito).- El Espíritu desligado de la materia.
Mukti (Sánscrito).- Liberación de la vida senciente. (Véase: Mukta). [Exención, emancipación, liberación de los sufrimientos de la vida terrestre; liberación final; beatitud; Nirvâna. Sinónimo de Mokcha.]
* Mukti-marga (Sánscrito).- Sendero de liberación.
* Mukunda (Sánscrito).- Piedra preciosa. Epíteto de Vichnú y de Krichna.
* Mûla (Sánscrito).- Raíz, base, fundamento; origen, principio, causa; principal, original. Nombre del décimonono asterismo lunar que corresponde a la cola del Escorpión.
* Mûladhâra (Sánscrito).- El centro o chakra inferior de distribución de las corrientes, llamado en lenguaje poético “loto inferior”, situado en la extremidad inferior de la médula espinal, y opuesto al sahasrâra o “loto superior”, situado en el cerebro. Segun leemos en el Diccionario de Términos teosóficos de Powis Hoult, es el loto fundamental de los yoguis, donde está latente el Kundalinî.
* Mûladhâra-chakra (Sánscrito).- El plexo sacro. Véase: Mûladhâra.
* Mûlakârana (Sánscrito).- La primera causa; la causa fundamental.
* Mûlakarman (Sánscrito).- Operación mágica.
Mûlaprakriti (Sánscrito).- Literalmente: “raíz de la Naturaleza (prakriti) o de la Materia”. –La raíz Parabrâhmica, el abstracto principio deífico femenino: la substancia indiferenciada, Âkâza. [La materia cósmica indiferenciada, materia primordial, esencia o raíz de la materia, eterna causa material y substancia inmanifestada de todo ser; o sea la masa inmensa de materia informe, caótica o indiferenciada, de la cual surgen todas las formas o manifestaciones materiales del universo visible o manifestado, de igual modo que de la informe masa de barro salen todas las figuras y vasijas que fabrica el alfarero. –Los alquimistas occidentales le dan el nombre de “Tierra de Adán”, y los vedantinos, Parabrahman, si bien, en rigor, “el Mûlaprakriti es sólo el velo echado sobre Parabrahman”. (Véase: Doctrina Secreta, I, 39, nota.).]
Mulil (Caldeo).- Nombre del Bel caldeo.
* Mul-il (Acad.).- Véase: Dingir.
Muluk-Taus (o Muluk-Taoos) (Arábigo).- De Maluh “regente” o “gobernador”, forma posterior de Moloch, Melek, Malayak y Malachim, “mensajeros”, ángeles. Es la deidad adorada por los yezidis, que forman una secta persa, benévolamente llamada por la teología cristiana “adoradores del diablo”, bajo la forma de un pavo real. El señor “Pavo real” no es Satán, ni es el diablo, puesto que es simplemente el símbolo de la Sabiduría de cien ojos; el ave de Sarasvatî, diosa de la Sabiduría, de Karttikeya el Kumâra, el virgen célibe de los Misterios de Juno, y de todos los dioses y diosas que tienen relación con la sabiduría secreta.
* Mumia.- La esencia vital contenida en algun vehículo (Jîva, Vitalidad, que se une a alguna substancia material). Las partes del cuerpo humano, animal o vegetal, separadas del organismo, retienen por algun tiempo su potencia vital y su acción específica, como está probado por el injerto cutáneo, o trasplantación de la piel, vacunación, envenamiento por infección cadavérica, heridas anatómicas, infección por úlceras, etc. (Las bacterias son estos vehículos de vida). La sangre, las materias excretadas, etc, pueden contener vitalidad durante algun tiempo después que han salido del organismo, y puede existir aun alguna simpatía entre dichas materias y la vitalidad del organismo, y obrando sobre aquellas, este último puede ser afectado. Cítase un caso en que se practicó una operación plástica en la nariz de un hombre, trasplantando en ella un trozo de piel tomada de otra persona. La nariz artificial se conservó por espacio de largo tiempo, mientras vivió la persona de quien se tomó el trozo de piel; pero cuando ésta murió, la nariz del otro hombre entró en putrefacción. Igualmente se registran casos en que alguna persona ha sentido dolor por la presión de una piedra en una pierna amputada, que fue enterrada sin que lo supiera el operado, y el dolor cesó instantáneamente cuando se quitó la piedra. Esta simpatía que existe entra coincidencia del hombre y su cuerpo es la causa de que la forma astral de un muerto pueda sentir agudamente cualquier daño que se haga a su cadáver. El “espíritu” de un suicida puede sentir los efectos de una autopsia post mortem tan vivamente como si el cuerpo estuviese vivo. Todo esto no es sorprendente ni misterioso si recordamos que todas las cosas no son sino substancia de la voluntad hecha objetiva, y que la armonía que existe entre dos partes pertenecientes a la misma cualidad de voluntad no cesa necesariamente de existir cuando las dos partes se han separado. (F. Hartmann). Con el reciente descubrimiento de las vitaminas, la ciencia oficial moderna acaba de corroborar lo antes expuesto. Ha demostrado de un modo concluyente que el valor nutritivo de los alimentos depende principalmente de las vitaminas que contienen, o en otros términos, de su grado de vitalización. Los alimentos no vitalizados no sólo son causa de una nutrición deficiente, sino que además originan ciertas enfermedades (escorbuto, raquitismo, etc.). Los niños sometidos a la lactancia artificial no se desarrollan tan bien como los que chupan directamente la leche del pecho materno o de una buena nodriza. Se ha observado que las vacas alimentadas con pastos verdes producen una leche rica, cremosa y abundante, mientras que las que hacen uso de forraje seco dan una leche escasa y aguanosa. Por la ausencia de vitalidad se explica que un huevo o una semilla pierda la facultad de germinar después de transcurrido algun tiempo. En los saludables efectos que en nuestro organismo producen las exhalaciones vitales de las substancias orgánicas en estado fresco se fundan además numerosísimas prácticas, tanto de la medicina popular como de la oficial, tales como la aplicación de redaños, pieles de conejo, trozos de carne cruda y hasta orina y excrementos de animales en la parte enferma. En Roma, las personas decrépitas y valetudinarias acudían al Spoliarium para chupar las últimas gotas que manaban de las heridas de los gladiadores, absorbiendo con la sangre de los postreros efluvios vitales que debían vigorizas o rejuvenecer aquellos organismos extenuados por una dolencia o por la mano implacable del tiempo.
* Mumukcha.- Véase: Mumukchatva.
Mumukchatva (Mumukshatwa) (Sánscrito).- Deseo de liberación (de la reencarnación y de la esclavitud de la materia).
* Mumukchu (Sánscrito).- Deseoso de liberación.
* Munda (Sánscrito).- Literalmente: “calvo”. Nombre de un demonio (daitya), a quien Durgâ dió muerte.
* Mundaka (Sánscrito).- Título de un Upanichad.
Mundakya-Upanichad (Mundakopanichad) (Sánscrito).- Literalmente: “Doctrina esotérica Mundaka”. Obra muy antigua. Ha sido traducida por el rajâ Rammohun Roy.
Mundano, árbol o huevo o cualquier objeto simbólico por el estilo en las mitologías del mundo.- Merú es una “Montaña mundana”; el Arbol Bodhi o Ficus religiosa, es el Arbol mundano de los budistas, así como el Yggdrasil es el Arbol mundano de los antiguos escandinavos.
Mundo.- Este nombre asociado con los de montañas, árboles, etc., denota una creencia universal. Así, la “Montaña del mundo” de los indos era el Merú. Como se dice en Isis sin velo: “Todos los montes, huevos, árboles, serpientes y columnas mundanos puede probarse que encierran verdades de filosofía natural científicamente demostradas. Todas estas montañas contienen, con ligeras variaciones, la descripción alegóricamente expresada de la cosmogonía primitiva; los huevos mundanos, la de la subsiguiente evolución del espíritu y de la materia; las serpientes y columnas mundanas, recuerdos simbólicos de los diversos atributos de esta doble evolución en su infinita correlación de fuerzas cósmicas. Dentro de los misteriosos retiros de la montaña –la matriz del universo-, los dioses (poderes) preparan los gérmenes atómicos de la vida orgánica, y al mismo tiempo el licor de vida, que, una vez gustado, despierta en la materia humana el espíritu humano. El Soma, bebida sacrificial de los indos, es aquel sagrado licor; porque, en la creación de la prima materia, mientras las partes más groseras de la misma eran empleadas para el embrionario mundo físico, su más divina esencia impregnaba el universo, penetrando de un modo invisible e incluyendo dentro de sus ondas etéreas al niño recien nacido; desarrollándolo y estimulándolo para la actividad, a medida que iba saliendo lentamente del caos eterno. De la poesía al concepto abstracto, estos mitos mundanos pasaron gradualmente a ser imágenes concretas de símbolos cósmicos, tal como los encuentra ahora la arqueología”. El calificativo “mundano”, aplicado a los diversos objetos de que se ha hecho mención, es más corriente aun que la palabra “Mundo”. (Véase: Arbol mundano; Huevo mundano e Yggdrasil).
Mundos, los cuatro.- Los cabalistas reconocen cuatro Mundos de existencia, a saber: Atziluth o arquetipo; Briah o creador, primera reflexión del supremo; Yetzirah o formativo, y Assiah, el mundo de cascarones o Klippoth, y el universo material. La esencia de la Divinidad, concentrándose en los Sephiroth, se manifiesta primero en el mundo de Atziluth, y sus reflexiones se producen sucesivamente en cada uno de los cuatro planos con una radiaciación y pureza que van disminuyendo por grados hasta llegar al universo material. Algunos autores dan a estos cuatro planos los nombres de Mundos intelectual, moral, sensitivo y material. (W.W.W.).
* Mundos astral.- Llamado también Plano astral. Es la región del universo inmediata al plano físico, si puede emplearse la palabra “inmediata” en este sentido, porque los planos del universo no son unas zonas o capas concéntricas superpuestas, sino más bien esferas concéntricas que se compenetran mutuamente, sin estar separadas unas de otras más que por la diferencia de su constitución respectiva. En este plano, la vida es más activa, y la forma es más plástica que en el físico. La materia astral es mucho más sutil que la del plano físico, de suerte que penetra fácilmente todo cuerpo de nuestro plano terrestre. Los objetos astrales son combinaciones de materia astral, de igual modo que los objetos físicos son combinaciones de materia física. Debido a su extraordinaria ductilidad, las entidades astrales pueden modificar rápidamente su aspecto, porque la materia astral de que están compuestas toma forma bajo cada impulso del pensamiento. –Una parte de este plano está constituída por el Kâma-loka. (A. Besant, Sabiduría antigua, págs. 73 y siguientes).
* Mundo briático.- Véase: Briah y Mundos (los cuatro).
Mundos inferior y superior.- Los ocultistas y cabalistas concuerdan en dividir el universo en mundos superior e inferior, los mundos de Idea y los mundos de Materia. “Como es arriba, así es abajo”, afirma la filosofía hermética. Este mundo inferior está formado segun su prototipo: el mundo superior; y “toda cosa del inferior no es más que una imagen (o reflexión) del superior”. (Zohar, II, fol. 20 a.).
* Mundo oculto.- Título del primer libro que trató de Teosofía, de su historia y de algunas de sus doctrinas. Fue escrito por A. P. Sinnett, editor, de aquella época, del importante periódico indo The Pioneer (El Explorador) de Allahabad, India.
* Munen o Munin (Escandinavo).- Hugen y Munen son los cuervos mensajeros del dios principal de la Mitología escandinava, Odín, a quien informan de todo cuanto ven y oyen en el mundo.
Muni (Sánscrito).- Santo, sabio. [Literalmente: “silencioso”. Solitario, asceta, contemplativo; santo iluminado. Anacoreta o monje solitario que observa el voto del silencio y vive en el retiro, entregado a la vida contemplativa. Por su santidad y sus grandes austeridades participa de una naturaleza semidivina y está dotado de gran sabiduría y poderes sobrehumanos.]
* Munîndra (Sánscrito).- Literalmente: “Señor de los santos o munis”. Un Buddha, un Arhat o sabio budista en general.
* Munisthâna (Sánscrito).- Literalmente: “residencia o morada de un Muni”; ermita.
* Mura (Sánscrito).- Nombre de un daitya o asura.
Murâri (Sánscrito).- Epíteto de Krichna o Vichnú. Literalmente: “enemigo de Mura”.
Muro guardián o protector.- Nombre sugestivo dado a la legión de Adeptos (Narjols) o Santos colectivamente, que se supone velan por la humanidad ayudándola y protegiéndola. Esta es la llamada doctrina Nirmânakâya en el Budismo místico del Norte. [Segun se enseña, los acumulados esfuerzos de largas generaciones de yoguis, santos y adeptos, y especialmente de Nirmânakâyas, han creado, por decirlo así, en torno de la humanidad un muro de protección que la defiende invisiblemente de males todavía peores. –Voz del Silencio, III.]
* Muro protector.- Véase: Muro guardián.
* Mûrta (Sánscrito).- Que tiene cuerpo; corpóreo; material, masivo.
Mûrti (Sánscrito).- Forma, signo y también faz. Así, Trimûrti significa: las “tres faces” o imágenes. [Cuerpo, forma corpórea, figura, imagen, aspecto, persona.]
Mûrtimat (Murttimat) (Sánscrito).- Alguna cosa inherente o encarnada en alguna otra cosa e inseparable de ella; como la humedad en el agua, que es coexistente y contemporánea con ella. Este nombre se aplica a algunos atributos de Brahmâ y otros dioses. [Mûrtimat significa igualmente: que tiene cuerpo, corpóreo; encarnado, personificado, cuerpo.]
* Músicos celestes.- Véase: Gandharvas.
Muspel (Escandinavo).- Un gigante de que se habla en el Edda, el dios del fuego y el padre de las llamas. Estos malos hijos del buen Muspel, después de amenazar con hacer daño en Glowheim (Muspelheim), se juntaron formando un ejército formidable, y libraron la “última batalla” en el campo de Wigfred. La palabra Muspel es traducida en el sentido de “Fuego del Mundo (mundano)”. La idea de Dark Surtur (Humo negro), del cual surgen centelleantes lenguas flamígeras, establece una conexión entre Muspel y el dios indo Agni. [También se designa con el nombre de Muspel o Muspelhem una región de fuego situada al Sur.]
* Muth.- Véase: Mout.
Mutham o Mattam (Sánscrito).- Templos de la India con claustros y monasterios para los estudiantes y ascetas regulares.
Myalba (Tibet).- En la filosofía esotérica del Budismo del Norte, es el nombre de nuestra Tierra, llamada infierno, destinado para aquellos que se reencarnan en ella para su castigo. Exotéricamente, la palabra Myalba se traduce en el sentido de un infierno. [Myalba es nuestra Tierra, propiamente llamada “Infierno”, y el mayor de todos los infiernos, por la escuela esotérica. La doctrina esotérica no conoce más infierno, o lugar de castigo, que una tierra o planeta habitado por hombres. –Voz del Sil., III.]
Mystagogia.- Véase: Mistagogia.
Mysterium (Latín).- Esta palabra la explica el Dr. Hartmann, segun los textos originales de Paracelso, como sigue: Segun este gran rosacuz, “Mysterium es todo aquello de lo cual puede desarrollarse algo que está sólo germinalmente contenido en ello. Una semilla es el Mysterium de una planta; un huevo, el de un ave, etc.” (Doctrina Secreta, I, 304).
Mysterium magnum (Latín).- “El gran Misterio”, expresión usada en alquimia y relacionada con la fabricación de la “Piedra filosofal” y el “Elixir de Vida”. [Mysterium magnum es también la materia original, la materia de todas las cosas; la última esencia; la esencialidad de la naturaleza interior; la cualidad específica de la parte semimaterial de las cosas. Todas las formas proceden originalmente del Mysterium magnum, y todas vuelven a él al fin; el Parabrahman de los vedantinos. Segun Jacobo Boehme, el Mysterium magnum es Dios. “Dios es lo más secreto y también lo más revelado. La obscuridad está ante los ojos, pero la angustia que hay en ella es incomprensible, a menos que la voluntad entre en ella, y entonces será sentida y experimentada si la voluntad pierde su luz”. (Cuarenta Preguntas, I, 51). “Los que hallen el Mysterium magnum sabrán lo que es; pero para el ateo es incomprensible, porque no quiere ni desea comprenderlo. Está aprisionado por la esencia terrestre hasta el punto de no poder atraer la voluntad al misterio de Dios”. (Id., XVII, 13) -F. Hartmann) –Akâza; la Luz astral es la matriz del universo, el Mysterium magnum del cual nace por separación o diferenciación todo cuanto existe. (Doctr. Secr., II, 538) -También se ha dado este nombre al Espíritu y al Caos. (Paracelso.) -Véase: Ideos.]
Mystes (Griego).- En la antigüedad se daba este nombre a los nuevos Iniciados; actualmente se da a los cardenales romanos, que habiendo tomado sus ritos y dogmas de los “paganos” arios, egipcios y griegos, se han ofrecido también para el mysis (voz griega que significa “la acción de cerrar los ojos, la boca, etc.) de los neófitos. Tienen que mantener cerrados sus ojos y su boca en su consagración, y, por lo tanto, se le llama Mistœ.
Mystica Vannus Iacchi.- Comúnmente se han traducido estas palabras en el sentido de Abanico místico; pero en una antigua terra cotta del Museo británico, el abanico es una Cesta, la que los Misterios de los antiguos exhibían con místicos contenidos: Inman dice con testes emblemáticos. (W.W.W.).